Ángel
Rafael Martínez Alarcón | 21 agosto de 2017
Tribuna Libre.- El historiador británico, Herry Kamen, en su
obra la inquisición española, 1965, inicia comentando que en la península
ibérica hasta 1492, ahí convivían en un mismo territorio, cristianos,
musulmanes y judíos, con una relativa
tolerancia. Son los Reyes Católicos: Isabel y Fernando, quienes inician una
política de expulsión contra los musulmanes y más tarde con los judíos, con los
recursos expropiados a estos últimos Isabel de Castilla, logra financiar la
empresa de Cristóbal Colón, hace 525 años.
Desde
el 11 de septiembre del 2011, el mundo occidental ha experimentado los más
grandes atentados terroristas, con la autoría islámica, sin olvidar que los
Estados Unidos de Norteamérica utilizó dicha excusa para invadir militarmente
varias naciones del medio oriente, y en los últimos años crearon el Estado
Islámico, que a ciencia cierta todavía nos sabemos que es, un estado virtual,
bajo el amparo de un fundamentalismo fanático religioso de una rama del Islam;
ya es muy grande la lista de atentados terroristas en los últimos 16 años, en
varias naciones europeas. En la ciudad emblemática, el jueves 17 de agosto en
plenas vacaciones de verano, la ciudad condal de Barcelona, capital de la
comunidad autonómica de Catalunya, en su paseo de las Ramblas, una camioneta
suicida, acaba con la vida de una docena de ciudadanos de diferentes partes del
mundo.
La
ciudad de Barcelona, una de las ciudades más abiertas del reino de España, se
abrió en los últimos 40 años a todas las nacionalidades del mundo, creencias,
preferencias sexuales, en pocas palabras una ciudad cosmopolita. Testiga hace
25 años, en 1992, de los juegos
olímpicos. En muchas aspectos Barcelona es una referencia obligadas para
las más diversas tendencias, amén de la lucha que están dando los nacionalistas,
por proclamarse independiente del estado español
Hay
que recordar que en los últimos 50 años, los españoles estuvieron a la merced
de los atentados terroristas de la banda nacionalista de la ETA, procedente del
país vasco, que dejó un numero grande de víctimas a lo largo y ancho del reino
de España; logrando por medio del dialogo llegar a un alto a la violencia por
parte de los terroristas que reivindicaban: tierra y libertad, en el norte de
España.
El
primer gran atentado en España del mundo islámico, fue en marzo del 2008, en las
líneas del metro de la ciudad de Madrid, y hoy
Catalunya fue la foco de acción de terrorismo, en una ciudad más
cosmopolita, donde todas las nacionalidades del mundo entero tenía un respeto
en la ciudad condal, sin faltar sus leves problemas de intolerancia
internacional, que venía resolviendo con un trabajo de integración y dialogo
entre sus actores.
Las
nuevas estrategias terroristas, hoy son muy baratas, con un vehículo en marcha
y lanzarlo en los lugares de mayor concentración para hacer el mayor número posible de víctimas, ya nos
son las bombas que no sólo causan la muerte a los seres humanos sino el daño
material a los inmuebles. Con el atropellar
a matar, los terroristas cumplen con hacer el mayor número de daño
posible.
El
viernes 18 de agosto, los habitantes de Barcelona, salieron a las calles a su rutina diaria, con la consigna “No
tenemos miedo ¡En cambio en nuestra nación llevamos décadas de una guerra de
baja intensidad y el gobierno en sus tres órdenes de gobierno, no ha tenido la
capacidad de negociar de pie. Todos los mexicanos si tenemos miedo del crimen
organizado, de las policías desorganizadas, de gobernantes inexpertos y
corruptos, tenemos miedo de la misma justicia que sido selectiva, tenemos miedo
de salir a vender las frutas para que el inspector municipal te robe. Seguiremos teniendo miedo hasta que no hayan
un acierto entre todos, incluyendo a los malos de ponerle fin a tanta violencia
en México, y salir a gritar en todas las plazas públicas del país, ¡No tenemos
miedo ¡