La expresión de los columnistas y colaboraciones, es criterio y responsabilidad personal de quien los firma. Más no el sentir de Tribuna Libre Noticias

septiembre 30, 2017

La ruta de la tragedia en el Rébsamen

* Documentos muestran responsables de obra, el de seguridad estructural y ex funcionarios de la delegación Tlalpan por omisiones.

Ciudad de México. | 30 septiembre de 2017 
Tribuna Libre.- La tragedia en el colegio Enrique Rébsamen comenzó a edificarse en 1983 cuando Mónica García Villegas solicitó una licencia de construcción en dos predios ubicados en Rancho Tamboreo 11 y 19, colonia Nueva Oriental Coapa. Después de 34 años, durante el sismo de 7.1 grados que cimbró a la Ciudad de México, uno de los edificios colapsó. Fallecieron 21 niños y cuatro adultos.

Horas posteriores al temblor, la atención se centró en rescatar a los sobrevivientes y en recuperar a las personas que perdieron la vida. Pasaron los días y un video de un brigadista sembró la duda. Decía que arriba del inmueble derrumbado estaba la casa de la directora y que la estructura ni siquiera tenía columnas. Entonces preguntó ¿quién autorizó la construcción?

El edificio que colapsó fue el área administrativa. El piso de arriba albergaba un departamento y una terraza. No había aulas. Para poder acceder a una de las salidas se tenía que pasar por ese sitio. Es por eso que al momento de derrumbarse, varios niños se quedaron atrapados, intentaban salir.

Las responsabilidades no son claras. Las autoridades involucradas se deslindan de acuerdo a sus facultades. Los que han dado sus versiones: delegación Tlalpan, Instituto de Verificación Administrativa (Invea) y el Tribunal Administrativo de lo Contencioso. Han callado los demás, incluso, la directora y única dueña: Mónica García Villegas.

La delegación Tlalpan señaló que según los documentos relacionados a la seguridad estructural y de operación que integran el expediente que realizó la demarcación, la escuela contaba con autorizaciones y papeleo de manera regular.

Sin embargo, para establecer que los documentos corresponden con la realidad de la construcción y seguridad estructural, la delegación solicitó una investigación al Colegio de Ingenieros.

“Quién nos puede decir si presuntamente el DRO no decía la verdad o el Corresponsable Estructural no decía la verdad o en realidad estaba construida con vicios ocultos. Los únicos que nos pueden decir eso son los expertos en seguridad estructural y ellos están en el Colegio de Ingenieros Civiles de México", aseguró la jefa delegacional, Claudia Scheinbaum.

¿Quiénes avalaron las estructuras de los edificios?

Documentos oficiales revelan que en los últimos años, los Directores Responsables de Obra (DRO) Manuel Velarde Gámez y Juan Apolinar Torales, así como el Corresponsable en Seguridad Estructural, Francisco Arturo Pérez Rodríguez, fueron los que avalaron las construcciones: de la primaria y secundaria. Ellos firmaron documentos responsivos en los que aseguraban que la estructura de la escuela estaba en buenas condiciones, no tenía fallas y que podía soportar sismos.

Los DRO, en general, son expertos en construcciones, ingenieros o arquitectos, cuya certificación en la Ciudad de México la otorga la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) para vigilar el proceso constructivo de acuerdo a los reglamentos y emitir recomendaciones cuando algo no se realiza de manera adecuada.

Sus dictámenes forman parte de los trámites que las empresas o dueños tienen que presentar en las distintas instituciones para otorgar los permisos. En el caso Rébsamen, los DRO fueron contratados por el colegio, indicó Scheinbaum.

El 26 de junio de 2014, la delegación le notificó a la escuela que había una falla estructural que constituye un peligro significativo y le solicitó unas pruebas de carga, las cuales son una manera de certificar la estructura.

Para estos análisis se utilizaron sacos de arena. El DRO determinó que la estructura no muestra "evidencia visible de falla", es decir no presentó agrietamientos, descascaramiento o deflexión de tal magnitud y extinción que sea obviamente excesiva e incompatible con los requisitos de seguridad, indica el documento.

"Debo mencionar que para efecto de dar cumplimiento a los artículos 185 y 186 del Reglamento de Construcciones para el Distrito Federal se realizaron las pruebas de carga verificando el comportamiento de dichos elementos y después de ser sometidos a las pruebas, por lo tanto no tengo inconveniente en dar el Visto Bueno de la Constancia de Seguridad Estructural", señalan los resultados de pruebas de cargas entregados a la demarcación el 15 de julio de 2014 para los inmuebles Rancho Tamboreo 11 y 19 con uso de Escuela y firmados por Velarde Gámez.

Ese día, el mismo arquitecto entregó otro documento en el que establece que con inspección ocular y verificación de la edificación cuenta con los equipos y sistemas de seguridad para situaciones de emergencias.

El DRO Velarde Gamez y el Corresponsable Pérez Rodríguez fueron los que emitieron las Constancias de Seguridad Estructural con vigencia de cinco años en 2014, durante la administración del perredista Héctor Hugo Hernández, para ambos predios: Rancho Tamboreo 11 y 19. Así como el Visto Bueno de la Constancia de Seguridad Estructural.

"Existe evidencia suficiente de que la edificación inspeccionada no tiene daños estructurales ni los ha tenido, ni ha sido reparado y que el comportamiento de la cimentación ha sido satisfactoria. Que no existen defectos en la calidad de los materiales ni en la ejecución de la obra. Y que el sistema estructural es el idóneo para resistir las fuerzas estáticas y sísmicas", dice la carta responsiva suscrita por Francisco Arturo Pérez Rodríguez el 22 de septiembre de 2014 y avalada por el DRO Mario Velarde Gámez, quien con este documento emitió la Constancia en Seguridad Estructural para Rancho Tamboreo 11.

Para junio de 2017, ya en el gobierno de Claudia Scheinbaum, el DRO Juan Apolinar Torales Iniesta, fue el encargado de avalar todo lo relacionado con la seguridad estructural, incluso se comprometió a conservar "en perfectas condiciones de seguridad e higiene las instalaciones de los inmuebles.

"Bajo protesta de decir la verdad la Propietaria y el DRO manifestamos que el predio (Rancho Tamboreo 19)  No ha sido ni será modificado el Uso de Suelo para escuela en sus cuatro niveles de construcción permitido en toda la superficie construida y que reúne todas las condiciones de seguridad previstas en el Reglamento de Construcciones, publicado el 17 de junio de 2016", dice la carta compromiso firmada el 2 de junio de 2017 y entregada a la delegación.

No obstante a toda la documentación presentada ante la delegación, en relación al uso de suelo de Rancho Tamboreo 19, el Invea encontró irregularidades.

Delegación Tlalpan y las clausuras

De acuerdo con sus facultades legales, la delegación Tlalpan solo se encarga de emitir las licencias de construcción y avalar los documentos relacionados con la seguridad estructural de los inmuebles.

Luego de varias quejas vecinales en contra del colegio Rébsamen, el gobierno delegacional tanto de 2010 como de 2014 y debido a que en esos años la escuela realizó algunas obras (sin especificar cuáles) y no contaba con la manifestación de construcción para esas modificaciones realizaron dos clausuras. Se pagó la multa y se emitió el permiso, por lo que se levantaron los sellos de suspensión, aseguró Scheinbaum.

El Invea y el documento apócrifo

Meyer Klip, titular del Instituto de Verificación Administrativa (Invea), explicó que luego de una denuncia vecinal del predio con dirección en calle Rancho Tamboreo 19, a finales de 2016, el Invea realizó una verificación al colegio y una investigación sobre el uso de suelo.

El Invea encontró que la escuela tenía un certificado de uso de suelo por derechos adquiridos en 1993, es decir para una ampliación o modificación del plantel. La Seduvi dijo que ese documento no lo había emitido y que no coincidía con los datos del colegio. No lo reconocía.

Debido a que como se invalidaba ese certificado apócrifo de 1993, el predio ubicado en Rancho Tamboreo 19 violaba el uso de suelo. El Invea impuso una multa de 107 mil pesos y conminó al colegio a cerrar o regularizar su uso de suelo.

"En lugar de cumplir lo solicitado en  la resolución decidió irse por la vía  de la impugnación, presentando un juicio de nulidad ante el Tribunal Contencioso Administrativo de la Ciudad de México, por lo que el procedimiento de verificación del INVEA no se encontraba firme", expresó.

La impugnación de la escuela fue presentada ante el Tribunal a finales de marzo y el 31 de mayo el tribunal resolvió  en primera instancia a favor del Invea que notificó al Instituto el 26 de junio, pero la escuela apeló el 1 de agosto y está pendiente su resolución, por lo que a la fecha el procedimiento del Invea no puede proceder, aseguró Meyer Klip

La respuesta del Tribunal Contencioso Administrativo

El Tribunal de Justicia Administrativa de la Ciudad de México precisó en un comunicado que en el caso del juicio I-23402/2017, iniciado por los representantes legales del colegio Enrique Rébsamen en contra de los actos del Invea, el pasado día 26 de junio de 2017, se notificó la sentencia que confirma la validez de la sanción, la cual es únicamente una multa de 107 mil 448 pesos. En esa misma resolución, quedó firme la "conminación" del Invea a la escuela de cumplir con el uso de suelo permitido

"Mediante resolución de fecha 31 de mayo del 2017, el entonces Tribunal de lo Contencioso Administrativo, hoy de Justicia Administrativa de la Ciudad de México, se reconoció la legalidad y validez de la multa impuesta a la parte actora, mismo que se notificó al Invea desde el pasado 26 de junio de 2017. Es decir: Invea ganó el juicio. Este procedimiento, de ninguna manera, le impide al Invea continuar con el procedimiento administrativo respecto a las materias de su competencia".

Presentan denuncia penal

La jefa delegacional en Tlalpan, Claudia Sheinbaum, presentó este jueves una denuncia penal contra ex funcionarios delegacionales por omisión en el proceso de ampliación del Colegio Enrique Rébsamen, durante los periodos de 2010 y 2014.

En conferencia de prensa, la delegada señaló que dicha denuncia, es adicional a la carpeta de investigación que por oficio tiene que levantar la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, en el caso del colapso de un edificio del colegio privado ubicado en la colonia Nueva Oriental Coapa, durante el sismo registrado el pasado 19 de septiembre.

Además, aseguró que la denuncia deriva de la presencia de irregularidades en la documentación y reside, particularmente, contra los ex funcionarios Alejandro Zepeda Rodríguez y Miguel Ángel Guerrero López, quienes fungieron como directores generales de jurídico y gobierno en Tlalpan, en los periodos de 2010 y 2014 respectivamente, así como contra la directora del Colegio Enrique Rébsamen, Mónica García Villegas, por corresponsabilidad.

La delegada Claudia Sheinbaum, señaló que en la documentación jurídica con la que cuenta la delegación, se presentan una serie de irregularidades que deberán ser investigadas a fondo, para encontrar y castigar a los responsables de otorgar permisos o en su caso omitir el ejercicio de sus funciones como autoridades delegacionales.

"Como persona y como jefa delegacional, esto es indignante y tenemos que actuar porque estamos del lado de las víctimas, del lado de la ley y queremos que se haga justicia. Le pedimos al Procurador de Justicia de la Ciudad de México que revise con cuidado todos los expedientes".

En ese sentido, informó que aún queda pendiente el dictamen del Colegio de Ingenieros Civiles, en el que se analizarán a fondo las estructuras del edificio, del concreto, de los planos, de todos los expedientes, con los que hará un dictamen completo.

"En caso de que haya responsabilidad, vamos a actuar de la misma manera contra el Director Responsable de Obra y el corresponsable de seguridad estructural, que a la autoridad delegacional le dicen de puño y letra que el edificio era seguro", aseveró Sheinbaum Pardo.

Web Master