Entre
el ocio, las moscas y las leyes
Jorge
Arturo Rodríguez | 07 septiembre de 2017
Tribuna Libre.- “Un monstruo hay en el mundo: el ocioso”,
escribió Thomas Carlyle. No sé si tenga razón, no tengo ánimos de reflexionarlo
por el momento. Me da güeva, sobre todo ahora que pienso, parafraseándolo, que
“un monstruo hay en el mundo: el demente”. Alguien me preguntó que si creo en
el mal. Le contesté que sí, puesto que si hay bien, hay mal, como existen de
igual modo la paz y la guerra, el amor y el odio, el yin y el yang, el
equilibrio, la “normalidad”… En fin, que la ociosidad camina con tanta
lentitud, que todos los vicios la alcanzan, dijo Benjamin Franklin. Y Séneca
expresó que estar en ocio muy prolongado, no es reposo, es pereza. Ya me
entienden mis lectores que estoy en reposo por unos días. Espero no me alcance
la pereza.
Por eso digo que cuando el diablo no tiene qué hacer, con el rabo mata
moscas, dijera el refrán. O sea… No sé qué carajos digo. Pero creo que me
entienden.
Por cierto, en Eclesiastés (10.1-2) leo: “Las moscas muertas hacen heder
y dar mal olor al perfume del perfumista; así una pequeña locura, al que es
estimado como sabio y honorable.
“El corazón del sabio está a su mano derecha, más el corazón del necio a
su mano izquierda”. Que alguien me lo explique.
Por lo pronto, pa’ no hacerle caso al ocio, fui a la sesión de la
Diputación Permanente de la LXIV Legislatura local a enterarme de los chismes
en los pasillos del Palacio Legislativo y a conocer la iniciativa con Proyecto
de Ley para la Atención, Intervención, Protección e Inclusión de las Personas
con Trastorno del Espectro Autista para el Estado de Veracruz, presentada por
la diputada Cinthya Amaranta Lobato Calderón.
El objetivo de la propuesta es “impulsar la plena inclusión educativa,
social y laboral de las personas con el Trastorno del Espectro Autista en un
ambiente libre de discriminación y con un enfoque de sus Derechos Humanos
reconocidos en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en
los Tratados Internacionales, y garantizar políticas públicas, programas y
acciones institucionales efectivas en favor de madres, padres, jefas de hogar,
madres solteras, padres solteros, familiares, tutores, cuidadoras y cuidadores
de las personas con Trastorno del Espectro Autista, en los ámbitos, de la
salud, educativo, social y laboral”. Muy bien.
¿Cómo lograrlo? La legisladora local señaló: “Para el cumplimiento de lo
dispuesto en la presente Ley, las dependencias y entidades de la Administración
Pública estatal, los Ayuntamientos y Organismos Autónomos, formularán, respecto
de los asuntos de su competencia, las propuestas de programas, objetivos,
metas, estrategias y acciones, así como sus previsiones presupuestarias”.
Asimismo, “el Gobierno del Estado se
coordinará con el gobierno federal, mediante la celebración de convenios, con
el objetivo de alinear los programas estatales con la política pública y los
presupuestos etiquetados en materia de atención, intervención, protección e
inclusión de las personas con TEA, con arreglo al sistema competencial que
corresponde a cada orden de gobierno, a fin de lograr una efectiva
transversalidad de las políticas públicas. Los municipios se coordinarán con la
Federación, el Gobierno del Estado y otros municipios…” Otra vez: muy bien.
La diputada fue clara y precisa: “Si bien es
cierto, contamos con leyes que garantizan el ejercicio de los derechos humanos
de todas las personas sin ningún tipo de discriminación, requerimos de un ordenamiento
que logre incorporar las demandas específicas de las personas con el Trastorno
del Espectro Autista y puedan acceder a condiciones de vida digna, justa y
equitativa; el desafío es cumplir las leyes, crear las que faltan, eficientar
recursos y voluntad política e institucional para construir oportunidades”.
La Iniciativa, aclaró, se enriqueció gracias
al “Diagnóstico Psicoeducativo y Legal del TEA en Veracruz del Acuerdo
Ciudadano para el Mejoramiento de la Calidad de Vida y la Educación Inclusiva
para la Personas con Autismo en Veracruz”, alcanzado como producto del consenso
entre madres y padres de familia; docentes, normalistas, especialistas;
investigadores, terapeutas y psicólogos; maestras, maestros de USAER y CAM;
supervisores y directores de escuelas regulares y de centros de educación
especial que participaron en las Mesas de Trabajo: “Las Familias, el sistema
Educativo, los terapeutas. ¿Cómo mejoramos la calidad de vida de las personas
con Autismo en Veracruz?”
Cierto, diputada, “el desafío es cumplir las
leyes, crear las que faltan, eficientar recursos y voluntad política e
institucional para construir oportunidades”. Ojalá.