Ángel
Rafael Martínez Alarcón | 23 octubre de 2017
Tribuna Libre.- En octubre del 2017, tuve la gran oportunidad
de ser invitado a los estrenos de dos películas filmadas y con temáticas
veracruzanas. La primera gracias a Emilio Aguilar Pradal, presentó en el Ágora
de la ciudad, su primer largometraje, intitulado Los atardeceres rojos. Una historia ubicada
en la población de Jalacingo; con un
interesante historia. El pasado 17 de octubre, se presentó el largometraje documental Juanote, se exhibió
para un grupo de participantes en el filme, con sus testimonios sobre la vida y
obra de Juan Herrera Vásquez 1919-1989, nacido en la ciudad de Xalapa.
Gracias a Raúl Criollo,
un xalapeño dinámico y lleno de
proyectos, logra realizar un interesante documental, en 69 minutos cuenta la
historia de un hombre más allá de lo extraordinario. Periodista, cineasta,
novelista, son las credenciales del trabajo intelectual de Criollo, y por
varias décadas proyectó el más justo de los homenajes al cargador de número más
famoso no sólo de Xalapa sino del país, Juan Herrera Vásquez, mejor conocido por su apodo de Juanote,
haciendo clara referencia a su estructura física, fuera de la media de los
hombres de la región, y su fuerza. Un par de artículos por la singular forma de cargar y transportar los
pianos, y decenas de caricaturas en la
prensa local.
Juanote, fue imagen del paisaje urbano de la capital
de Veracruz, por espacio de más de 55
años, ejerció el oficio de cargador de número, es decir un cargador de dicha
características debería de presentar una solicitud a las autoridades
municipales, con el aval de unas cartas de los comerciantes de las ciudad,
cumpliendo dicho requisitos, el municipio le otorgaba el permiso y número, el
número trece perteneció a su padre, por circunstancias volvió a caer en la
familia Vásquez. Desde los doce años empezó a ejercer el oficio de cargador
hasta los 69 años de edad. Raúl Criollo,
rescató para posteridad la figura del Juanote, en un testimonio fílmico, apoyando por muchas
novedades, como imágenes inéditas de Xalapa del año 1936, propiedad de la
cineteca nacional, unos segundos de lo que fue la segunda sede de la Escuela
Normal Veracruzana, hoy las facultades de economía, estadísticas y geografía de
la Universidad Veracruzana.
Otras de las novedades
presentadas en el largometraje documental, es una entrevista inédita realizada
por Matilde Hernández, en 1988, un año
antes de la desaparición física de Juanote.
Radio y Televisión de Veracruz, fundada en 1980, fue de las primeras
cámaras en recoger entrevistas e
imágenes de Juanote, pero
lamentablemente no se conservaron.
Raúl Criollo, logra
reunir una serie testimonios desde sus familiares, integrantes de la orquesta
sinfónica de Xalapa, empresarios, funcionarios de la cultura, periodistas, el
cronista oficial de Xalapa, pobladores
de la ciudad. Entre ellos están: Erasmo Capilla Sabino Cruz Rosa María Del
Valle Roy Dudley Vicente Espino Jara Manuel Fernández Ávila Janina Harasymowicz
Juan Manuel Jiménez Nicanor Juanz Raciel D. Martínez Ángel Rafael Martínez
Alarcón Juan Enrique Martínez Zárate Daniel Méndez Vivanco Lucía Molinos Blanca
Lucía Nadal Castillo (q.e.p.d.) César Perea Juana Pérez Herrera Carlos Pérez
Herrera Angélica Rivera Herrera Jorge Rivera Herrera Jaime Ríos Otero José
Rubín Gajón “Jobín” Enrique Salmerón Luis Sosa Huerta Mauro Torres Sánchez
Jorge Vázquez . En la vida Juanote, tuvo
un gran don de gente, propio de su actividad de cargador, lo mismo tenía amistad con los vendedores de
billetes de lotería, que con toda la clase política y cultural de la capital de
Veracruz. Cabe destacar que su centro de trabajo fue en la calle Enríquez, a
una lado de la paquetería de ferrocarriles mexicanos.
Juanote, su amor por la música clásica le permitió ser
un gran conocedor, y ganarse el respeto de los músicos de la OSX; siendo el
único ciudadano del país, en que la
orquesta le organizara un concierto homenaje poco antes de morir. Así como
recibir un homenaje póstumo de cuerpo presente en la antigua sede de la
OSX, el Teatro del Estado-
Sólo nos resta desearle
todos los éxitos al largometraje documental; para reconocer la vida de un hombre sencillo llamado Juan Herrera Vásquez, con su
trabajo, honradez, amor hizo posible transformar su mundo, sin perder la
esencia de origen. Mil gracias Raúl Criollo, por el rescate de la vida y obra
del admirable Juanote.