* Más
de 2 mil 360 niñas han encontrado una oportunidad de vida.
* La
libertad de culto fortalece los valores, no los debilita, asegura.
Tribuna Libre.- Hace ya 70 años, la congregación de
religiosas que forman parte de la Casa de Jesús inició un proyecto que hasta
esta fecha ha dado una oportunidad de vida a 2 mil 360 adolescentes y jóvenes
veracruzanas de escasos recursos. Hoy, en medio de su actividad dominical,
recibieron la visita del senador Héctor Yunes, quien les ofreció su apoyo para
la atención integral de estos grupos vulnerables.
El legislador veracruzano recorrió las
instalaciones de la Casa de Jesús, acompañado de su directora la madre
Eduvijes, y conoció el programa mediante el cual se imparten clases en
distintos niveles educativos, así como talleres de cómputo, música, cocina,
artes y oficios que permitan a las niñas encontrar en el futuro una actividad
de subsistencia.
Esta comunidad, explicó la religiosa, está
integrada por niñas y adolescentes que se encuentran en una situación
vulnerable, resultado de la pobreza, migración,
desintegración, el abandono y la violencia que han vivido al interior de
su familia. “Lo que buscamos es que mediante la educación y la formación
social, intelectual y técnica, ellas puedan tener un mejor proyecto de vida,
que sean agentes de su propia superación”, aseguró.
Durante el recorrido que fue transmitido en
vivo por Facebook live para pedir el apoyo de los ciudadanos en la manutención
de la Casa de Jesús, Héctor Yunes dijo que estos esfuerzos de vínculo social
tienen un gran valor, sin importar si tienen o no un origen religioso. “El
trabajo que aquí realizan ayuda a muchas familias, lo que nos confirma que la
libertad de culto debe fortalecer nuestro valores y no debilitarlos. La ayuda
que requieren no es un acto de caridad, sino la reivindicación social de estas
jóvenes veracruzanas”, coincidió.
La Casa de Jesús que se encuentra en este
municipio atiende actualmente una población de 33 jóvenes y adolescentes de
familias de escasos recursos -5 de ellas son huérfanas-, que dedican el día a
su formación educativa y de diversos oficios; las necesidades apremian ante la
creciente demanda de la población. Sin embargo, los recursos con que cuentan no
son suficientes ya que estos tienen su origen principalmente en la Iglesia.
Entre los apoyos otorgados está el de brindar
una camioneta para que recojan semanalmente los alimentos que reciben en la
central de abastos; una televisión de plasma que pueda ser rifada y que genere
recursos para la adquisición de un horno de repostería, y el equipamiento de
algunas áreas y talleres. “Cualquier proyecto que tenga como propósito
fortalecer la solidaridad nuestra sociedad y dar una oportunidad de crecimiento
personal a grupos vulnerables, debe recibir nuestro apoyo”, destacó.