José
Miguel Cobián | 22 enero de 2018
Tribuna Libre.- Después de unos días de precampañas, a nivel
nacional con Meade, Anaya y AMLO, y a nivel estatal con Pepe, Miguel y
Cuitláhuac el panorama muestra perspectivas inesperadas, y que pueden cambiar
acorde a los resultados y decisiones a nivel nacional, pero hoy las cosas se
ven extrañas por decir lo menos.
En
principio es indudable que tanto AMLO a nivel nacional como AMLO a nivel estatal gozan de una enorme simpatía y
base popular, lo que le otorga de entrada una buena ventaja a Cuitláhuac en su
aspiración por gobernar Veracruz.
Aparentemente una vez terminadas las pre-campañas, ambos arrancarán como
punteros.
La
lucha por arrancar en segundo lugar se vuelve encarnizada, pues es sabido que
la contra campaña contra Morena ha dado resultados los dos sexenios anteriores
y es posible que esta vez también tenga los mismos resultados positivos, así
que quien arranque en segundo lugar cuando sean tiempos de campaña es seguro
que podrá aspirar al voto útil del contrario, así el PRI y el PAN se convierten
en aliados involuntarios en contra de AMLO.
En
Veracruz es notorio que la percepción de los ciudadanos indica que al día de
hoy el segundo en la contienda es Miguel Ángel, ya sea por llamarse igual que
su padre que hoy gobierna, o porque inició con mucha anticipación su campaña
política por la gubernatura, o por la simple percepción de que teniendo el
presupuesto del estado y el de Veracruz y Boca del Río a su disposición (cuando
menos y sin contar los presupuestos de los muchos municipios gobernados por
Acción Nacional en Veracruz) resulta más probable su posible triunfo o cuando
menos una posición holgada en la contienda.
Se ha soltado un rumor muy conveniente para el gobierno del estado y
muy útil y a los planes de la familia
Yunes Linares-Márquez, que es el de que el presidente Peña acordó con el actual
gobernador dejar que herede el estado, a cambio de frenar las aspiraciones de
Morena. Según los rumores, los cálculos
de presidencia de la república indican que si se logra frenar a Morena en los
principales estados del país conforme al número de votantes, entonces puede
ganar el PRI la presidencia de la República.
El asunto es sencillo. En la
ciudad de México el PRD y un buen trabajo del candidato del PRI pueden
equilibrar la votación para que Morena no arrase y eso le resta en la suma de
votos. En el caso del estado de México,
la opción es quedar con una votación igual entre el PRI y Morena. En Jalisco movimiento ciudadano tendrá más
votos que Morena. En Nuevo León, el Pri
y el PAN irán a tercios con Morena, lo cual elimina cualquier ventaja para el
nuevo partido, y en Veracruz el compromiso del gobernador debiera ser que su
hijo gane con escaso margen por encima del PRI dejando a Morena en un tercer
lugar. Si este escenario se cumple,
Morena no tendría votos suficientes para ganar la elección y siempre según los
rumores, Miguel Ángel Yunes habrá vendido caro su apoyo, solicitando el estado
para su hijo, de manera similar a Moreno Valle que garantiza el triunfo del PAN
y no de Morena en la elección a cambio de que su esposa herede la gubernatura.
A
nivel estado de Veracruz la percepción de que este plan es más que un rumor se
refuerza debido ciertas señales que han
llamado la atención a los diversos analistas, las cuales detallo a
continuación: Los delegados federales
que normalmente operarían a favor del candidato del PRI no son los idóneos para
este fin, y no son afines a Pepe. Nueva
Alianza aunque va aliado al PRI en otros estados, en Veracruz tendrá candidatos
de manera independiente. Aunque el PRI
y el Verde van juntos rumbo a la
gubernatura, en las diputaciones van separados, haciendo muy difícil el triunfo
de sus candidatos, a favor de los candidatos de Acción Nacional, que así
tendría en el congreso del estado una legislatura afín al próximo gobernador, y
además tendrían mucho peso en las negociaciones con el nuevo presidente de la
República al tener una presencia significativa en el congreso de la unión. La presencia en medios de comunicación y
redes sociales del candidato del PRI es mucho menor que la del candidato del
PAN, aunque muy superior de la del candidato de Morena, pues ya sabemos que en
ese partido todo gira alrededor de la figura de su fundador, la cual si es muy
explotada. Otro aspecto a notar, es
que el gobernador del estado, invariablemente se involucra en discusiones
mediáticas con Andrés Manuel, cada vez que éste visita el estado, lo cual
resulta extraño, pues mientras uno es gobernador en funciones, el otro es un
simple ciudadano en busca de una candidatura… De alguna manera, no están en
la misma liga… aunque en cuanto a posicionamiento y como figura política AMLO
esté en primera división mientras Miguel Ángel es de segunda división.
La
propia debilidad de la estructura electoral de Morena, la costumbre de venderse
de parte de algunos de los representantes de casilla, la probable imposibilidad
de cubrir todas las casillas rurales para la defensa del voto, los problemas
internos exacerbados desde fuera, una vez que resulten algunos como candidatos
y otros se queden con sus aspiraciones nada más, todo ello, hace pensar que la
labor de un viejo lobo de mar en cuestiones electorales como lo es el
gobernador se vuelve más sencilla, sobre todo cuando se tiene el mando de la
fuerza pública y los recursos del estado.
No
debemos olvidar, que quienes sostienen esta teoría del acuerdo por Veracruz,
recalcan una y otra vez, que el escándalo de Eva Cadena, (hoy absuelta de
cualquier delito) estalló exactamente cuándo convenía a la campaña del estado
de México, fortaleciendo la especie en contra de la candidata de Morena para la
gubernatura. Siempre acorde a quienes
defienden esta idea, ese efecto convenció al presidente Peña de que la gubernatura
del estado de México se le debe al gobernador de Veracruz, y por ello y su
promesa de lograr disminuir a Morena en la elección de este año, se acordó dejarle Veracruz a la familia
gobernante.
Quien esto escribe no tiene dudas de que si Meade es presidente, el
gobernador que le conviene a Veracruz es Pepe Yunes, quien ha destacado por su
ética de trabajo a lo largo de los puestos que ha ocupado. Nada mejor que tener un gobernador que
durante todo su mandato, pueda llegar a hablar de tú con el presidente para
llevar a cabo el desarrollo de Veracruz acorde a sus proyectos y que colaborará
hombro con hombro con la federación. Sin embargo, a la fecha su equipo de
trabajo no ha demostrado profesionalismo para transmitir ni la imagen ni las
ideas de su candidato así como tampoco han sabido apoyar la candidatura de
Meade. De seguir así las cosas, parece
que los rumores se convertirán en realidad, haya o no haya existido el supuesto
pacto de los pinos entre Enrique Peña Nieto y Miguel Ángel Yunes Linares. Habrá que esperar a que avancen los tiempos
para ver el rumbo que toma esta elección.
¡Ah!
El votante, se considera manipulable y en muchos casos comprable, por
eso no juega en la ecuación. La
ingeniería electoral actual permite no sólo conocer dónde se ganará y dónde se
perderá una elección, sino también que fibras tocar en los probables votantes
para cambiar el sentido del voto. Eso
sin contar con la compra del voto, la intimidación, el bloqueo a simpatizantes
y representantes generales, la compra de representantes y sobre todo el acarreo
a las urnas, con el fin de que gane quien tiene el conocimiento y el dinero
para ejercer lo que la mencionada ingeniería establezca como estrategias para
que gane el que se desea que gane.