Ángel Rafael
Martínez Alarcón | 30
mayo de 2014
Tribuna Libre.- El sexenio
del extinto presidente Miguel de la Madrid Hurtado, durante los años de 1982 a
1988; conocido como el último gobierno de la Revolución Mexicana e introductor
del modelo neoliberal en nuestra nación; para aquellos años se decía que De la
Madrid Hurtado era un presidente gris. Gracias a la nueva clase de gobernantes
en los últimos años ha sido superado los presidentes de finales del siglo XX y
principio del siglo XXI. El esplendor de la presidencia imperial estuvo
decayendo como Miguel de la Madrid gobernó al país; en eso años fueron de la
certificación de la Agencia anti drogas
del gobierno de los Estados Unidos, la detención del narcotraficante más importante
de esos años Rafael Caro Quintero, hoy gracias a las bondades de la justicia de
México está libre; como también del
asesinato de Enrique Camarena, que hoy tenemos las más diversas versiones de su
asesinato. El hoy el senador de la República por el Partido del Trabajo Manuel
Bartle Diaz, era el más flamante Secretario de Gobernación, el todopoderoso,
que ha pasado la historia como el ejecutor del más importante del fraude
electoral conocido en la historia de nuestra país, si del dos de julio de 1988; contra el candidato
del Frente Democrático Nacional, nacido el 12 de enero de 1988, en nuestra
ciudad de Xalapa. Su política exterior enmarcada del conflicto de la guerra
fría ente los Estados Unidos y la antigua Unión de Repúblicas Socialista
Soviética, en particular el conflicto de
Centroamérica: Nicaragua y El Salvador, y sus revoluciones de
liberación. Fue la década perdida en lo económica impuesto por las políticas monetarias del Banco Mundial
y el Fondo Monetario internacional, las
deudas externas creció sin medida. El partido Revolucionario Institucional
continuo ejerciendo poder en sus prácticas y rituales conquistados por la
revolución del 20 de mayo de 1920,
cuando el Grupo militar Sonora arriba al poder político de nuestro país.
También eran los años como hoy del férreo control de los medios masivos de
comunicación, si también los privados
como Televisa juro amor eterno y fidelidad a los gobiernos hermanados de
la revolución mexicana. Gracias estas prácticas hicieron grandes fortunas en
los dueños de algunos medios, a los medios críticos sufrieron toda clase de
represalias por parte del Gobierno de la Republica, son pocos los casos de los
medios críticos que logrado sobrevivir.
La misma naturaleza tampoco fue aliada de Miguel de Madrid, como el incendio de
San Juanico, o temblor del 19 de septiembre de 1985. Donde el gobierno federal
no supo estar a la altura de las circunstancias, donde se lució el gobierno fue
durante el campeonato mundial de fut bot, en mayo - junio de 1986, donde el
público le rechifló al Ciudadano
Presidente "culero" o “Paloma cordero tu esposo es un
culero" y la magia del servilismo de la televisión privada evito que se escucharse el reclamo
ciudadano. En acción nacional llegaba los bárbaros del norte. En nuestro estado
de Veracruz era gobernado por Agustín Acosta
Lagunes y Fernando Gutiérrez Barrios, quien sólo gobernó dos años, para
integrarse al Segob del gobierno de Carlos Salinas de Gortari; también eran
años violentos en Veracruz, como lo que estamos viviendo actualmente
El asesinato
del periodista Manuel Buendía Téllez Girón, acontecido el 30 de mayo de 1984,
marco historia de nuestro país. Desde el primer momento se supo que el
responsable del asesinato tenía el sello de la Secretaria de Gobernación, como
el único organismo por tener las herramientas como interés de matar al
columnista incómodo por estar infiltrando información valiosa, treinta años más
tarde el ejercicio del asesinato de periodistas incómodos en los tres niveles
de gobierno, ver el caso del estado de Veracruz: entre la confusión si fue el
narcotráfico o el mismos Estado interesado el eliminarlos. La sangre de Manuel
Buendía ha sido en vano para el gremio
de los periodistas. Años tarde se supo que autor intelectual fue
José Antonio Zorrilla Pérez, director federal de seguridad dependiente
de la secretaria de gobernación, cercano colaborador del capitán Fernando
Gutiérrez Barrios, y como autor material el asesinato Juan Rafael Ávila Moro,
se le diseño un parentesco con la familia Ávila Camacho; ambos personajes
pagaron con cárcel el artero asesinato.
El autor de
la columna “Red privada” era natural del estado de Michoacán, nació el 24 de
mayo de 1926; sus primeros años de formación transcurrieron en el seminario,
para posteriormente pasa estudiar la
carrera de jurisprudencia, en la Escuela Libre de Derecho, en la ciudad de
México, la cual no concluye. Su primera actividad relacionada con el
periodismo, fue reportero de la revista La Nación, órgano propagandístico del
Partido Acción Nacional, iniciando una larga carrera en dicho mundo hasta el
día de su asesinato el 30 de mayo de 1984; pero mejor los invito leer, el magnífico
de otro extraordinario periodista como lo fue Miguel Ángel Granados Chapa,
2013. Buendía. El primer asesinato de la narcopolítica en México.,
Grijalbo-Proceso. México, 286 páginas. Hoy Buendía no está sólo en su martirio,
a 30 años de su asesinato docenas de periodistas han caído en el cumplimiento
de informar con veracidad. Su sangre de
Manuel Buendía sigue corriendo a lo largo y ancho de nuestra convulsionada nación. Pero también es
urgente que los texto servidores jóvenes pueden leer la obra y le legado de
Manuel Buendía. En 30 de mayo de 1984, no sólo asesinaron a un ciudadano, sino
a una biblioteca repleta de información al servicio de la verdad y en contra de
la corrupción en los tres órdenes de gobierno en México. Buendía vive en cada
periodista digno y sobre todo en los amantes de la justicia. México dejó de ser
diferente cuando la columna Red Privada, ya no informó más del mundo de la
corrupción en el país.
