Nuestro mundo es un
lugar mejor porque César Chávez decidió
cambiarlo. Barak Obama.
Ángel Rafael Martínez Alarcón | 08 mayo de 2014
Tribuna Libre.- El pasado primero de mayo, en el marco
del 128 aniversario de la gesta de los mártires de Chicago, día internacional
de los trabajadores, se estrenó el filme César Chávez. Con la leyenda: ¿Quién
demonios es César Chávez? El mexicano que desafió a los Estados Unidos.
Del director Diego Luna. Siendo sin duda
alguna una gran aportación para la historia de México y los Estados Unidos de
Norteamérica. Filme que ha sido
estrenado en meses pasados en los Cines estadunidense. Así cómo también bien ha
sido acogido en los circuitos internacionales, con una excelente critica. El
reto seguramente se encuentra en nuestro territorio nacional, en donde en más
de 300 salas se está exhibiendo.
César
Estrada Chávez, era noticia en la prensa de la izquierda, recuerdo haber leído
sobre su lucha en la prensa soviético, claro editada en español, como también Nelson Mandela, o la activista
Ángela Davis. Rara vez la prensa mexicana filtraba alguna nota, ya para los año
ochentas del pasado siglo XX, Televisa, en sus noticieros informaba acerca del
líder chicano. Aquí en Xalapa el sacerdote Álvaro Fernández, articulista del
Diario de Xalapa, escribió una serie de colaboraciones sobre su estancia en el estado sureño de California. Y una sus
colaboraciones describía al líder de los campesinos en los Estado Unidos de
Norteamérica, como un católico practicante y líder sindical al servicio de sus
agremiados, nada que ver con los líderes
sindicales corruptos al servicio del Gobierno y los dueños del capital,
como estamos acostumbrados a conocer en nuestra patria. Presentaba otro tipo de
líder sindical más apegado a los principios de la doctrina social de la iglesia
Católica Apostólica y Romana, fundada por León XIII, pasando por el Concilio
Vaticano II, sin olvidar los documentos de Medellín 1969 y Puebla. 1979; en
dónde encontramos todo el bagaje de la doctrina social de la iglesia. César
Chávez le tocó luchar por la dignificación de los migrantes y trabajadores del
campo en el marco del mundo bipolar: capitalismo versus socialismo.
Cesar
E. Chávez, nace el 31 de marzo de 1927, en Arizona, legalmente es de
nacionalidad norteamericana, pero su mundo y sus orígenes son mexicanos, padres
y abuelos de nacionalidad mexicana, emigrante al sur de la Unión Americana, en
la primera década del siglo XX, procedente de familia mexicana muy numerosa.
Condenados al trabajo del campo en los tierras de California y Arizona. Su
padre Librado, logra con todo el esfuerzo familiar tratar de cambiar las
perspectivas de vida para sus hijos, pero aparecen las injusticias para evitar que la familia
saliera adelante. Situación que provoca que la familia Chávez fuera condenada
trabajar en los campos californianos, eran los años de la crisis económica de
Norteamérica, los hermanos Estrada Chávez son enviados a la escuela donde
sufren las primeras discriminaciones infantiles; porque en el hogar sólo se habló el español y en la
escuela pública la educación es en inglés,
César E. Chávez, sólo logro terminar hasta el octavo grado, con grandes
deficiencias académicas para joven chicano. En 1944, a los 17 años se incorpora
al ejército Norteamérica que este momento está participando en la Segunda Guerra
Mundial, eran los años de la Presidencial de la presidencia Franklin D
Roosevelt. La experiencia militar de
Chávez seguramente le marco para el resto de su vida. Sólo participo dos años
como militar. Los Estados Unidos fueron
de las potencias triunfadora de la guerra que había iniciado el primero
de septiembre de 1939.
Es
justamente en la Segunda Guerra Mundial 1939-1945, cuando miles de campesinos
mexicanos de los estados del bajío: Michoacán, Jalisco, Colima, y Zacatecas,
emigran organizadamente para trabajar en los campos del sur de los Estados
Unidos, mientras sus ciudadanos están alistados en el ejércitos norteamericano.
Esta primera experiencia laboral para
los trabajadores agrícolas, dio origen para crear toda una red migratorio para
trabajar, en las décadas siguientes fueron conquistando espacios para los
braceros mexicanos, hasta en la actualidad la presencia de los trabajadores
agrícolas mexicanos están en toda la geografía de dicha nación. La lucha de
César Chávez, a 21 años de su muerte física sigue más vigente que nunca; ante
la crisis económica y política de América Latina, logran expulsar millones de
sus pobladores y quienes se lanzan a la aventura del sueño americano.
César
E. Chávez tuvo la gran virtud de
organizar a los campesinos para exigir mejores condiciones de vida, desde 1964.
Logrando boicot contra el cultivo de la
uva, y su única arma por varias ocasiones fue el ayuno, emulando al Gandhi, sin
olvidar que también San Francisco guio su lucha en favor de los campesinos.
Finalmente
la propuesta de Diego Luna, es hacer el justo homenaje al luchador social de
los chicanos, así como también dar a conocer la lucha de los trabajadores
migrantes de las más diversas nacionalidades de latinoamericana. Los millones de mexicanos residentes en los
Estados Unidos no todos tiene claro el legado de César Chávez, las más diversas
asociaciones civiles se han encargado de mantener viva la memoria y lucha de
César E. Chávez 1927-1993. Este filme contribuye a la larga lista de películas
de las minorías que siguen construyendo la grandeza de los Estados Unidos de
Norteamérica.
@angelrafaelmtz