Tribuna Libre.- Dentro las celebraciones del 150 aniversario
de la erección del Obispado de Veracruz con sede en la ciudad de Xalapa,
el pasado 6 de diciembre, en una majestuosa celebración eucarística en el
Estadio Xalapeño “Heriberto Jara Corona “ con la participación de miles de
creyentes católicos procedentes de las parroquias de los 35 municipios
veracruzanos y uno poblano pertenecientes a la arquidiócesis de Xalapa de la
Inmaculada, dividida en doce decanatos. Presidiendo el acto litúrgico en Nuncio
Apostólico en México, Christopher Pierre, y el IV arzobispo de Xalapa,
don Hipólito Reyes Larios, como el Obispo emérito de Xalapa, don Sergio Obeso
Rivera, así como los obispos de la provincia eclesiástica de Xalapa: Tuxpan, Papantla,
Veracruz, San Andrés Tuxtla, Coatzacoalcos, Orizaba y Córdoba. Como también
autoridades civiles. Por vez primera en más de doscientos años que la Imagen en
bulto de la virgen de la Inmaculada Concepción, patrona de la ciudad de Xalapa,
salió para presidir la eucaristía multitudinaria; acompañaron a la
procesión, con la corona para la Virgen, cargada por niños y las reliquias del
corazón del V obispo san Rafael Guizar y Valencia que la transportaron
mujeres. La procesión salió de la Catedral Metropolitana de Xalapa
con destino al Estadio, fue transportada por 150 hermanos de las Comunidades
del Camino Neocatecunado, todos uniformados con pantalón negro, camisa
blanca, y corbata roja, con pasos marciales y coordinados caminaron por
las calles de Enríquez, Viaducto, Zaragoza, Hidalgo, Díaz Mirón, Cayetano
Rodríguez Beltrán hasta llegar al Estadio; con los cánticos marianos propios
del Camino, acompañado por los integrantes de todas las comunidades de la
arquidiócesis.
El gran acontecimiento para la Iglesia
Católica Apostólica Romana, en el siglo XX fue la convocatoria de san Juan
XXIII para la realización del Concilio Vaticano segundo, con la firme intención
de discutir la situación de la Iglesia en los tiempos modernos, ya había pasado
la Segunda Guerra Mundial, eran los días de la Guerra Fría, entre los
Estados Unidos de Norteamérica y la antigua Unión de Repúblicas
Socialistas Soviética, estaban en marcha los movimientos libertarias de las
antiguas colonias europeas en África y Asia; Cuba experimentaba su revolución
social. En nuestra nación eran los días felices del milagro mexicano. Ya sin
mencionar los grandes avances tecnológicos y científicos de inicios de la
década de lo sesenta del siglo XX. El Papa Juan XXIII vio la urgencia de
convocar a todos los obispos del mundo para trabajar en la
renovación de la iglesia; lamentablemente la muerte sorprendió al Sumo
Pontífice, en 1963. Es electo Pablo IV para continuar en el trono petrino; para
seguir con los trabajos del Concilio hasta su promulgación en 1965. Son muchos
los frutos del Concilio Vaticano II, toda una renovación para actualizar a los tiempos modernos
a la iglesia, el último concilio databa de finales del siglo XVI, el
famosos Concilio de Trento. En la España franquista se preparaban los festejos
del 25 aniversario del triunfo del nacional-catolicismo, es ese ambiente donde
un joven Pintor egresado de Bellas Arte, Premio nacional, Francisco José
Gómez Argüello, hoy mundialmente con Kiko junto con Carmen Hernández, egresada
de la facultad de química, están viviendo una crisis existencial, se van a
vivir las barracas de Vallecas – Las Palomeras, una zona marginada y obrera en
la capital Española, con los gitanos, y una serie de marginados de la sociedad
franquista, y ambos jóvenes empiezan a predicar las promesas evangélicas con la
gran sorpresa que hubo respuesta de parte de estos marginados. Meses más tarde
bajan la Parroquia de la Paloma para empezar vivir la liturgia católica, juega un papal fundamental
el Arzobispo- cardenal Casimiro Morcillo. Para el año de 1968, Kiko y Carmen
pasan a Roma, para fundador la primera comunidad en la parroquia de Mártires
Canadienses. Seis años más tarde se fundan las primeras comunidades en el
México, en nuestra ciudad de Xalapa.
En México, el Camino Neocatecumanal fue
recibido en la Arquidiócesis de Xalapa, siendo su titular don Emilio Abascal y
Salmerón, 3º. Arzobispo de Xalapa; son enviados por parte de Kiko y Carmen, al
sacerdote Veracruz, Alberto Zamora Salicup, Carlo Roto, Pilar Antelo, para
abrir el camino en nuestro país. Es el Dr. José B Zilli Manica, párroco de la
Iglesia del Calvario, siendo de los primeros párrocos que aceptan las
catequesis de una nueva experiencia religiosa; la convivencia de inicio del
camino se realizó en la primera quincena de diciembre de 1974, hace 40 años,
siendo fieles de las parroquias de Catedral, El Calvario y San Gerónimo en la
ciudad de Coatepec. Así las Comunidades del Camino Neocatecumenado siguieron
los pasos de la evangelización de abril de 1519. Hoy en varias diócesis
del país, encontramos comunidades, así como la apertura de dos seminarios
Redemptoris Mater. En el mundo también en la mayor parte de la naciones
encontramos a las Comunidades de manera especial en naciones no católicos, en
el Asia, África. La Curia Romana aprobó los Estatutos para el Camino, con
fecha del 11 de mayo de 2008, luego muchos años de estudios por instancias
propias del Vaticano.
Los Sumo pontífice ha dicho del Camino: Tanta
gente se polariza hacia estas comunidades Neocatecumenales, porque ve que en
ellas hay una sinceridad, una verdad, hay algo vivo y auténtico, es Cristo, que
vive en el mundo. Que esto suceda con nuestra bendición apostólica.
S. S. Pablo VI, su sucesor Juan Pablo I, por la brevedad de su
pontificado, no hay comentarios a sobre el Camino. San Juan Pablo II, a los
largo de sus 27 años de pontificado dio muchas declaraciones, y así su
total apoyo. Juan Pablo II, afirma: Entre las realidades
suscitadas por el Espíritu en nuestros días figuran las comunidades
Neocatecumenales, iniciadas por el señor K. Argüello y por la señora C.
Hernández (Madrid, España), cuya eficacia para la renovación de la vida
cristiana era acogida por mi predecesor Pablo VI como fruto del Concilio:
"Cuánta alegría y cuánta esperanza nos dais con vuestra presencia y con
vuestra actividad. SS. Benedicto XVI: En todo caso, he conocido a
los neocatecumenales desde el inicio. Ha sido un Camino largo, con muchas
complicaciones, que existen todavía, pero hemos encontrado una forma eclesial
que ya ha mejorado mucho la relación entre el Pastor y el Camino. ¡Y así vamos
adelante! Lo mismo vale para los demás movimientos.
SS. Francisco, ya en Buenos Aires, Argentino
siempre ha apoyado a las comunidades del Camino, ya como Papa ha dicho: os doy las gracias por el bien inmenso
que estáis haciendo a toda la Iglesia.
En 2005, escribí uno de los primeros
artículos: “Comunidades del Camino Neocatecumenal (CCN) de la iglesia
Católica” en Vargas Guadalupe, Devoción y creencia religiosa en el
amanecer del tercer milenio, Editora del Gobierno del Estado de Veracruz,
Xalapa, 319- 370 pp.