* Escamotear 1,000 millones a la UV
* Nuño, el troglodita de la educación
* Cuauhtémoc Cárdenas al ataque
Marco Antonio Aguirre Rodríguez | 27
noviembre de 2015
Tribuna Libre.- Para Antonio Gómez
Pellegrin, el titular de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) del
gobierno del estado, el escamotearle 1,000 millones de pesos a la Universidad
Veracruzana es una buena idea; durante la glosa del V Informe de gobierno,
simplemente dijo que a la institución le deben “nada más” mil 308 millones de pesos.
Con solo unas palabras
desapareció más de mil millones de pesos, porque el 11 de noviembre, en el
Senado de la República, la mención fue que el adeudo llegaba a 2 mil 353
millones de pesos, hasta el 9 de noviembre..
Gómez Pellegrin quiere hacer
con la Universidad Veracruzana lo mismo que hacen con otros deudores, a quienes
les ofrecen hasta el 20% de lo que les deben para finiquitar las cuentas y
muchos lo aceptan para cobrar aunque sea una parte, pero al mismo tiempo les
hacen firmar que están cobrando el total de la deuda.
Si esto es así ¿dónde quedan
el dinero no entregado?, porque en las arcas de la Sefiplan no creo.
De hecho el 30 de septiembre
Javier Duarte llegó hasta la rectoría de la Universidad Veracruzana a ofrecer
que se le pagaría a la institución lo que se le debe, después de que Sara
Ladrón de Guevara exhibió en su Informe de Labores del 7 de septiembre que a la
UV no le habían entregado, hasta ese momento, 2,058 millones de pesos.
El adeudo en ese entonces
contemplaba 1,008 millones de rezago de los 5 años anteriores.
En este año el gobierno del
estado superó ampliamente la sustracción de recursos que le hace a la UV, al
rebasar el acumulado de 5 años previos.
Y no se ve que exista mucho
interés en pagar ese adeudo.
Después de más de un mes de
que Duarte ofreció que se cubriría la deuda, lo único que el gobierno del
estado ha hecho es buscar excusas y pretextos para escamotear ese recurso que
tampoco es de Sara Ladrón de Guevara, si no de la institución.
La UV tiene problemas, y fuertes,
por ese dinero retenido.
Un punto donde más ha
impactado es el servicio médico al personal, pues hay doctores y otros
vendedores de servicios de salud, que suspendieron sus actividades con la
Universidad Veracruzana, por los débitos acumulados.
En la farmacia con la que
trabaja la UV, también hay escasez de medicamentos, precisamente porque ya no
pueden pagarle a los laboratorios que les surten.
También hay académicos y
empleados a los que se les deben diferentes cantidades por este mismo concepto.
Por lo pronto los
sindicatos, tanto el Setsuv como el Fesapauv, ya preparan estrategias de acción
por si el 14 de diciembre no les han pagado el sueldo y el aguinaldo. Saben que
el gobierno del estado puede querer retrasar el dinero para pagarles hasta que
comience el 2016.
Este año la Universidad
Veracruzana cumplió su 70 aniversario y en lugar de hacer una gran fiesta, se
realizaron varios eventos que tuvieron muy poco impacto.
El dinero que el gobierno de
Javier Duarte quiere escamotearle a la Universidad Veracruzana no es para la
rectora, sino que es un recurso que al no ser entregado impidió la ampliación
de la matrícula y la plantilla de la Universidad, la mejora de las
instalaciones, la creación de nuevas aulas y talleres.
Vaya, otro ejemplo del fuerte
impacto que ha tenido la retención de los dineros de la Universidad, es la sala
de conciertos de la USBI Xalapa, la cual sigue sin concluirse.
Javier Duarte está afectando
el desarrollo del estado con esto.
Porque además amenazaron con
reducir el presupuesto de la UV para el próximo año, lo cual sonó
–definitivamente- como ultimátum represivo ante el reclamo del pago.
Y esto no es una graciosa
concesión que Javier Duarte debe hacer, si no el cumplimiento de una obligación
marcada en la Constitución de Veracruz y en la Constitución de la República,
además de que es parte de los convenios de coordinación que la federación hace
con los estados.
Cuando Javier Duarte dijo
que entregaba un subsidio solidario a la Universidad Veracruz lo único que hizo
fue exhibir su desconocimiento de la Constitución de la República, y también su
ignorancia sobre lo que dice la máxima ley reguladora en el estado.
Así pues Javier Duarte le
escamotea (con los peores sinónimos que la palabra tiene o con una de las
definiciones que la Real Academia de la Lengua le da al verbo escamotear (del
francés escamoter): “Hacer desaparecer, quitar de en medio de un modo
arbitrario o ilusorio algún asunto o dificultad”) más de mil millones a la
Universidad Veracruzana, pero también lo hace con los trabajadores de la
institución, y con todos y cada uno de los habitantes del estado, porque la UV
debería ser impulsora del desarrollo de la entidad, con programas de acción
directa en las comunidades o creando e inventando para beneficio de los
veracruzanos y de todos los habitantes del mundo.
Pero esto a Javier Duarte no
le importa.
Son más de mil millones de
pesos.
¿Cuántos beneficios a los
terrenales no se están yendo con ese dinero?.
Javier Duarte le debe pagar
a la Universidad Veracruzana.
AURELIO NUÑO, EL TROGLODITA
DE LA EDUCACIÓN. Aurelio Nuño Mayer, una vez subido en el ladrillo de la
Secretaría de Educación Pública del país se mareó tanto que una vez más amenaza
a quienes se oponen a las evaluaciones de los profesores con la represión, con
la violencia física, y –por supuesto- la que conlleva lo salarial.
Habla nuevamente de “firmeza
en la aplicación de la ley”, cuando en realidad lo que hace es alentar
prácticas represivas y violentas como las que se presentaron en Veracruz el sábado
y domingo anterior, cuando los policías vestidos de civil arremetieron contra
todos los que se le pusieron enfrente, incluyendo a comerciantes de los
alrededores donde se realizaba la evaluación magisterial, a transeúntes que
cruzaban por la zona, incluso contra profesores que iban a presentar los
exámenes, pero aquí –en Veracruz- especialmente contra la prensa, en acciones
claramente violatorias a la libertad de informar al
querer eliminar los
materiales que mostraban la violencia ejercida (Por cierto ¿ya le repusieron el
equipo y bienes a los afectados?)
Aurelio Nuño dijo el 22 de
noviembre que hubo “saldo blanco”, porque no quiso darle valor a las agresiones
sufridas por periodistas, porque para cuando dio su comunicado la noticia de
las agresiones ya estaba dándole la vuelta al mundo.
Aurelio Nuño se volvió el
troglodita de la educación, y le debe –por lo menos- una disculpa a todos los
agredidos por la policía de Veracruz que atendía sus órdenes (¿o irá a decir
Aurelio Nuño que Javier Duarte se extralimitó?): profesores que si querían
presentar sus exámenes, comerciantes, transeúntes y periodistas sobre todo.
Y eso que dice que quiere
ser candidato a la Presidencia de la República en el 2018.
CUAUHTÉMOC CÁRDENAS AL
ATAQUE. Este viernes 27 de noviembre llega Cuauhtémoc Cárdenas nuevamente a
Xalapa, ahora para presentar el movimiento “Por México Hoy”.
Primero dará una conferencia
de prensa y a las 5 de la tarde será una conferencia magistral en el Casino
Xalapeño.
Viene acompañado por el
senador Alejandro Encinas, quien –por cierto- ya le tocó sufrir la violencia
dirigida que hay en la entidad.
Cuauhtémoc Cárdenas hoy
aboga por un cambio en la Constitución del país, para que se incorporen nuevos
derechos de los ciudadanos, así como para quitar contradicciones, pero
reforzando sus partes fundamentales; también se debe establecer y especificar,
el control de los recursos naturales, un sistema de justicia recto, acciones
para terminar con la corrupción e impunidad, pero sobre todo, que haya un verdadero
cambio en las políticas del estado.
El “Hijo del Tata Cárdenas”
parece tener todavía que aportar al país.
Que sea para bien.