
*Sobre
el tema de la transparencia, Carstens, siendo un servidor público, debe
presentar su declaración patrimonial, al igual que los demás miembros de
Banxico, sin embargo, no la hace pública. De acuerdo con datos del Banco de
México, en 2011, Agustín Carstens recibía un sueldo bruto anual de 3 millones
895 mil 662 pesos, que disminuía a 2 millones 770 mil 984 pesos (sueldo neto)
tras una retención de 1 millón 124 mil 678 pesos por concepto de impuesto sobre
la renta.
*Tras
casi ocho años en el que afianzó su prestigio y logró el respeto de políticos,
empresarios y opinión pública, Carsten deja un vacío difícil de llenar en una
institución clave para la estabilidad macroeconómica del país, de acuerdo con
analistas.
Ciudad de México. | 30 noviembre de 2017
Tribuna Libre.- Agustín Guillermo Carstens Carstens, a quien
muchos consideran un tecnócrata brillante, dejará oficialmente el Banco de
México (Banxico) este jueves. Se va en la última y una de las más difíciles
etapas del sexenio del Presidente Enrique Peña Nieto, cuando la deuda pública
ha crecido a niveles nunca vistos: 44.5 por ciento del PIB y cuando la
inflación ha resentido la disparidad en el tipo de cambio.

“En el sector financiero pensamos que
Carstens hizo muy buena labor, le tocaron momentos complicados para las
finanzas en México, le tocó vivir una crisis muy importante en el mundo y la
manejo muy bien”, dijo a SinEmbargo Jorge Gordillo Arias, director de Análisis
Económico y Bursátil del CI Banco.
A finales de 2009, Carstens asumió el cargo
de gobernador del Banco de México con la tarea de estabilizar la macroeconomía
del país y controlar la inflación y la devaluación del peso, en unos momentos
convulsos con el arranque de la crisis económica mundial.
Resolvió su acometido, y Carstens refrendó el
respaldo que recibe de los mercados financieros, empresarios y políticos,
quienes destacan de él su profesionalismo, transparencia y capacidad
negociadora.
“El doctor Carstens hizo una muy buena labor
sobre todo en el tema de la inflación. Se metió más en la inflación subyacente,
que es la de los alimentos y productos agropecuarios, porque esa inflación
tiene poco que ver con la política monetaria y más sobre cómo funcionan los
productos agropecuarios en el mercado”, explicó Marcelo Delajara, director del
Programa de Crecimiento Económico y Mercado Laboral del Centro de Estudios
Espinosa Yglesias (CEEY).
Licenciado en Economía por el Instituto
Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y poseedor de una maestría y un doctorado
de la Universidad de Chicago, Carstens inicia el 1 de diciembre una nueva
andadura profesional como gerente del Banco de Pagos Internacionales (BIS, por
sus siglas en inglés).
En medio de tantos elogios, cuesta encontrar
voces críticas como la del economista Jonathan Heath, quien en una columna en
el diario Reforma destacó el “despilfarro” en burocracia interna implementada
por Carstens desde que llegó al instituto emisor el 1 de enero del 2010.
“Mientras Carstens ha criticado el manejo
imprudente del Gobierno federal en torno a las finanzas públicas, aumentó el
organigrama exponencialmente. […] El despilfarro no se queda allí. Muchos
analistas desde hace tiempo han pedido a gritos una comisión en el Senado cuya
función sea vigilar, controlar y cuestionar la logística administrativa del
Banco, ya que como está ahora, se concentra un gran poder desmedido en el papel
del Gobernador, que en la práctica no rinde cuentas a nadie, escribió Heath en
Reforma.
Sobre el tema de la transparencia, Carstens,
siendo un servidor público, debe presentar su declaración patrimonial, al igual
que los demás miembros de Banxico, sin embargo, él y los demás funcionarios no
la hacen pública.
La página del Banco de México detalla: “El
servidor público presentó en tiempo y forma su declaración de situación
patrimonial, en términos de la normatividad aplicable. La evolución de su
declaración patrimonial se encuentra en proceso de verificación, con base en
los datos y justificaciones presentados por el declarante. El servidor público
ejerciendo el derecho previsto en la citada normatividad, no autorizó la
publicitación de la presente declaración”.
De acuerdo con datos del Banco de México, en
2011, Agustín Carstens, recibía un sueldo bruto anual de 3 millones 895 mil 662
pesos, que disminuía a 2 millones 770 mil 984 pesos (sueldo neto) tras una
retención de 1 millón 124 mil 678 pesos por concepto de impuesto sobre la
renta.
Además del sueldo neto de casi tres millones
de pesos, Carstens recibía 1 millón 432 mil 634 pesos por concepto de
prestaciones, que incluía una prima vacacional por 307 mil 432 pesos, aguinaldo
por 830 mil 067 pesos y ayuda de despensa por 285 mil 135 pesos, además de una
canasta navideña por 3 mil 571 pesos.
¿CÓMO
DEJA CARSTENS LA INFLACIÓN?
El Banco de México tiene como objetivo una
inflación del 3.0 por ciento con un margen de flexibilidad de un punto
porcentual hacia arriba o hacia abajo, con lo cual una inflación de entre 2.0
por ciento y 4.0 por ciento se considera dentro del objetivo.
El 1 de enero de 2010, Carstens recibió el
cargo con una inflación ligeramente por arriba de la meta, de 4.5 por ciento.
En 2014, con la llegada de las reformas estructurales, los precios bajaron a
niveles récord, pero la historia cambió a partir del “gasolinazo”.
El alza del 20 por ciento en los precios de
los combustibles y la depreciación que ha sufrido el peso frente al dólar de
manera constante a partir de la victoria de Donald Trump en Estados Unidos
hicieron subir los precios de los productos y servicios de manera generalizada.
En enero de 2010, la inflación anual se ubicó
en 4.5 por ciento, pero desde que comenzó este año la inflación se ha disparado
por arriba del 6.0 por ciento.
En octubre pasado se ubicó en 6.37 por
ciento, de acuerdo con datos publicados a principios de noviembre por el
Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Con esta cifra, Carstens se irá de Banxico
con la inflación más alta en 16 años.
TASA DE
INTERÉS
Cuando Agustín Carstens tomó el control de
Banxico, la tasa de interés de referencia se encontraba en 4.5 por ciento.
Entre 2010 y mediados de 2014, el banco central se ocupó de bajar gradualmente
el costo del dinero para estimular la economía, permitiendo que se consumiera a
un menor costo.
Durante ese periodo, Estados Unidos
conservaba tasas de interés cercanas a cero, una política monetaria
implementada tras la crisis financiera y con el mismo objetivo de estimular la
economía. La diferencia entre la tasa estadounidense y la mexicana permitía que
invertir y traer capitales fuera más atractivo que llevarlos al vecino país del
norte.
A finales de 2015, la Reserva Federal, el
banco central de Estados Unidos, normalizó su tasa de interés y comenzó a
elevarla paulatinamente, con lo cual se incrementó el atractivo de Estados
Unidos y Banxico se vio en la necesidad de pagar cada vez más por el ahorro en
México.
“Hay otra cosa que me hubiera gustado ver más
en el Banxico que tiene que ver en la comprensión de cómo influye la política
monetaria de Estados Unidos en la depreciación del peso. Lo que hizo el Banco
Central para mitigar la depreciación del peso fue subir la tasa de interés,
faltó implementar otras acciones”, consideró Marcelo Delajara.
Diversos analistas coinciden en que el nuevo
gobernador, Alejandro Díaz de León Carrillo, quien reemplazará a Carstens en el
cargo desde el 1 de diciembre de 2017 al 31 de diciembre de 2021, tiene un gran
reto al frente de la institución.
“Hay que darle el beneficio de la duda al
nuevo gobernador del Banco de México. En su gestión va a tener que demostrar
que se mantiene independiente al Gobierno federal”, dijo Delajara respecto a
las diversas voces que ligan a Díaz de León con el Secretario de Relaciones
Exteriores, Luis Videgaray Caso.
Para Jorge Gordillo, del CI Bnaco, es
“normal” que actores políticos crean que la autonomía de Banxico se perderá, ya
que Alejandro Díaz de León fue subsecretario de Hacienda cuando Luis Videgaray
era Secretario de Hacienda.
El economista considera que el nuevo
Gobernador tiene que desenmascares de eso, “está en él en garantizar que el
Banco de México sea independiente”.