Ciudad de México. | 19 septiembre de 2018
Tribuna Libre.- La próxima titular de la Secretaría del
Bienestar dijo que en los últimos gobiernos se han impulsado programas con
ascendencia clientelar y electoral.
La próxima titular de la Secretaría del
Bienestar –hoy Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol)- del futuro gobierno
del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, María Luisa Albores,
prometió a los diputados federales de Morena que los recursos de los programas
sociales “no serán botín de nadie”.
Les aseguró también que “habrá castigos
ejemplares” para quien cometa actos de corrupción y a quien “se robe el
dinero”.
En reunión con la bancada de Morena en la
Cámara de Diputados, la próxima funcionaria criticó que en los últimos
gobiernos “se han impulsado programas con ascendencia clientelar y electoral,
que han hecho de la pobreza el negocio de algunos cuántos”, lo que, dijo, “no
se va a repetir”.
Sostuvo que “para acabar con los actos de
corrupción alrededor de los programas sociales, se impondrán castigos
ejemplares, porque no se puede aceptar que se roben los recursos que son para
la gente más pobre”.
Explicó que “la política social del país
contará con un nuevo enfoque donde la persona será sujeto de derechos, con un
gobierno transparente, honesto, honrado, esos cambios tienen que implementarse
en una secretaría que se debe a la gente más pobre y más vulnerable del país”.
Albores aseguró que el 80 por ciento de la
riqueza de este país está en 10 por ciento de una población, “por eso decimos
que este país no es pobre, sino un país injusto”.
Señaló que para acortar brechas, se hará una
política social desde el territorio, no desde el escritorio y una de las tareas
prioritarias de la Secretaría del Bienestar será acortar esas brechas a través
de los programas sociales, donde las personas sean el centro que recibe los
derechos, a través del primer eje que es la familia y la comunidad.
“Vemos a las personas no como beneficiarios,
que sean participantes, con una política integral, transparente, con rendición
de cuentas, con un enfoque territorial que llegue directamente a las personas,
con una perspectiva de derechos y que sea progresiva e incluyente”, precisó.
El nuevo modelo de política social debe ser
participativo, incluyente, llegar a la reconstrucción del territorio, del
tejido social, “hablamos de una política desde el sujeto individual para darle
fuerza al sujeto social”, indicó.
Durante la reunión, la futura titular de la
Secretaría del Bienestar señaló que algunos de los programas prioritarios del
gobierno de Andrés Manuel López Obrador son la reforestación de un millón de
hectáreas, programa para Adultos Mayores y atención a personas con
discapacidad.
Para lograr los objetivos planteados para la
política social, dijo que los diputados federales deben apoyar la reforma de la
Ley General de Desarrollo Social, que no sólo implica un cambio de nombre, sino
que debe incluir que esta Secretaría pueda tener inclusión productiva e iniciar
el proceso para constituir la nueva Ley del Bienestar.