Tribuna Libre.- El grupo parlamentario de Morena en la Cámara
de Diputados detectó un esquema de reparto de cuotas y una red de asesores,
empleados fantasma, compras y licitaciones irregulares que eran operadas por
las bancadas de los tres principales partidos políticos con representación en
la Cámara Baja, PRI, PAN y PRD, de acuerdo con un reporte al que Reforma tuvo
acceso.
Nuevos
diputados comienzan la legislatura en bancarrota
Morena, mayoría en la Cámara de Diputados,
accedió a un diagnóstico interno que identifica 28 áreas legislativas con
irregularidades y desvíos de recursos en los que estarían involucrados
servidores públicos de primer nivel.
“Según el reporte de Morena, el eje de la red
era la Secretaría General dominada por el PRI, y que hace una semana fue
entregada por Mauricio Farah Gebara. Ahí se encuentran 30 super asesores”,
describe Reforma.
El pasado 19 de septiembre, Farah Gebara
renunció a su cargo después de casi seis años de laborar en la Cámara. De
acuerdo con la carta de renuncia que presentó, su salida del Congreso se debió
a “la siempre saludable renovación institucional”.
Como secretario general, Farah era uno de los
funcionarios públicos que más dinero percibía al año, pues su ingreso mensual
era de 220 mil 15 pesos, lo que anualmente da un monto de 2 millones 424 mil
174 pesos.
El documento menciona que la Contraloría de
San Lázaro era una “pista de aterrizaje de aviadores en plazas propuestas por
la bancada priista, panista y perredista, con el fin de cubrir compromisos
personales y políticos”.
El diagnóstico de Morena refiere que en
algunas áreas, como Comunicación Social, es necesario recortar sueldos y
puestos.
El pasado 13 de septiembre, Reforma reportó
que los nuevos diputados se encontraron con una sorpresa: las cuentas bancarias
que deberán administrar están vacías, debido a que sus antecesores se gastaron
614 millones de pesos durante su último año de ejercicio.