Tribuna Libre.- Revivieron las dudas sobre la salud de Andrés
Manuel López Obrador y con ellos muchos se preguntan, si tiene las condiciones
que se requieren para ser presidente de México. Ante los rumores, AMLO dice que
se encuentra en buen estado de salud y acepta que tuvo problemas cardíacos;
pero en las columnas políticas señalan que padece algo más y que trata de
ocultarlo. Esto es lo que sabemos sobre el estado de salud del próximo
presidente.
Desde las campañas electorales para renovar la
Presidencia de la República, periodistas como Pablo Hiriart, Raymundo Riva
Palacio y Carlos Loret de Mola han escrito sobre visibles problemas de saluddel
fundador de Morena.
Señalaron que neurólogos de Miami viajaban
constantemente a México para atender a López Obrador. Esto, sirvió de pretexto
para que los rivales de AMLO en la contienda electoral, Ricardo Anaya, del PAN
y José Antonio Meade, del PRI, lo golpearan políticamente.
Ante las críticas, Andrés Manuel respondió:
“Estoy rebién, hasta me puedo parar en un solo pie, voy al beisbol y todavía
macaneo… Tengo salud para ser presidente”.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiZd7LeIV3qMW0MBmXSTFPBNeJQ2kRHxYP3JMMbH5u4TmDL2YWatJEyVIS0NK_D7bC7WQ8SewlzBcCrN3YiGdtT_VRh23d8EBjSL_4hkGha_Z7-lvjj6wQPYygfutbWSL0yZ2C0chmfFq82/s320/Esto+sabemos+2.jpg)
Se dice que ya no es el “corazón” lo que
obliga a López Obrador a acudir a consulta, sino un padecimiento que “pone en
riesgo su movilidad”, incluso que le “habrían quemado los nervios del cuello
para esconder una grave dolencia en las cervicales”. Agregan que sufre de
“mucho dolor de espalda y por eso en los mítines se le ha visto encorvado”.
Las versiones también apuntan que le urge una
intervención quirúrgica y necesitaría reposar varias semanas, pero ante la
presión por el proceso electoral el morenista no quiso operarse.
Andrés Manuel López Obrador está a menos de
dos meses de asumir la Presidencia del país y solo sabemos que se “toma un
cóctel de pastillas” todos los días, entre ellas una de “amlodipino” para la
presión.
Mientras el presidente electo reitera que
está en buen estado, sus detractores insisten en que es poco transparente con
su salud, pues se trata de un asunto de seguridad nacional.
El infarto que derivó en cirugía, así lo
cuenta AMLO
“Para qué ocultar las cosas, a mí me dio ese
infarto muy fuerte”, así respondió Andrés Manuel López Obrador durante una
entrevista en Noticieros Televisa en diciembre de 2016.
López Obrador narró que se le obstruyó la
arteria principal del corazón, “los médicos le dicen ‘la deja viudas’, no fue
cualquier cosa. Me dejaron bien”.
¿Qué fue lo que le ocurrió? La madrugada del
3 de diciembre de 2013, año y medio después de perder sus segundas elecciones
presidenciales ante el PRI, Andrés Manuel sufrió un infarto agudo almiocardio.
Sus familiares y colaboradores lo llevaron al Hospital Médica Sur, donde fue
sometido a una cirugía.
César Yáñez, entonces vocero de AMLO y
Patricio Ortiz, médico que atendió al tabasqueño, explicaron paso a paso el
procedimiento:
-Se le practicó una angioplastia, le
colocaron un dispositivo metálico en la arteria coronaria, eso permitió que el
flujo sanguíneo se restaurara.
-La cirugía duró una hora y 15 minutos.
-Los doctores le recomendaron comer bien,
dormir bien y hacer ejercicio.
Cabe señalar que la entrevista de 2016 a la
que hacemos referencia se le cuestionó a López Obrador por qué había dicho que
el mandatario en funciones, Enrique Peña Nieto, padecía cáncer y si creía que
debía informar sobre eso: “Yo creo que está mal, pero a lo mejor es un asunto
depresivo”.
López Obrador agregó que él no se deprime y
que se encuentra en buen estado de salud
“gracias, a la ciencia al creador y a que siempre echa para adelante”.
Por lo pronto, el tabasqueño continúa con su
gira nacional de agradecimiento, la cual concluirá el 28 de noviembre, unos
días antes de la ceremonia en la que rendirá protesta como presidente.