El
talento de reconocer a los talentosos
Jorge Arturo Rodríguez |
11 septiembre de
2019
Tribuna Libre.- Aperitivo 1: “Lo que no se vale es pagar
favores a cuenta del Estado. Colocar a cuates en lugares privilegiados solo por
ser cuates. Es hora de que los cargos públicos, en México y en el extranjero,
dejen de ser rehenes del influyentismo.” (Periodista Dolia Estévez).
Aperitivo 2: “Al Presidente Andrés Manuel
López Obrador, le ha tocado enarbolar la ola liberal y nos está conduciendo,
sin duda, a una nueva transformación de la vida política, económica y social de
México, a la que identificamos los Mexicanos como la cuarta transformación”.
(Diputado José Manuel Pozos Castro, presidente del Congreso de Veracruz). Así
sea, Kimosabi.
Aperitivo 3: “México es un paraíso para
inversionistas”. (Carlos Slim, luego del acuerdo entre el Gobierno federal y
las firmas constructoras de gasoductos, el mes pasado). ¿Alguien lo duda? ¿No
nomás pa’ ellos?
Ahora que andamos sueltos, por no decir que
desquiciados en este mundo acelerado por la tecnología, internet, redes
sociales y más lo que se le agregue, pienso en lo que escribió Orson Welle:
“Muchas personas son demasiado educadas para hablar con la boca llena, pero no
les importa hacerlo con la cabeza hueca.” Claro, lo digo pa’ lo que voy –no
importa la RAE, que sea subir pa’ arriba y bajar pa’ abajo; al diablo con ello,
dijera Nikito Nipongo. ¿Las instituciones también?-; digo que según
@OrtografiaReal: “No tengo novia” no es lo mismo que “no, tengo novia”. ¿Ven la
importancia de la coma, la novia y la ortografía?”
Del mismo modo, les comento la importancia de llamarse Ernesto, honor a
quien honor merece, en el principio era el Verbo, decir las cosas por su
nombre, en fin. El poeta Jean-Baptiste Racine dijo: “Dueño del Universo, yo
regulo su fortuna. Puedo nombrar reyes, puedo deponerlos, pero de mi corazón yo
no puedo responder”. Y el economista de parecido nombre al del poeta, Jean
Baptiste Say comentó que una de las mayores pruebas de mediocridad es no
acertar a reconocer la superioridad de otros.
Viene a cuento lo anterior, porque va mi reconocimiento a la titular del
Centro de Estudios para la Igualdad de Género y Derechos Humanos del Congreso
estatal, mi estimada amiga doctora Mónica Mendoza Madrigal, por su destacada
labor que realiza al frente de dicho Centro de Estudios, a pocos meses de haber
asumido el cargo.
Elbert Hubbard señaló que existe algo mucho más escaso, fino y raro que
el talento. Es el talento de reconocer a los talentosos. Por ello dejo con
ustedes algunas palabras de Mónica Mendoza Madrigal, en ocasión de la
develación de la placa que establece que a partir de este martes 10 de
septiembre del presente, el lobby del Salón de Plenos llevará el nombre de
Irene Bourell Peralta, primera mujer legisladora en la entidad. Nos ofrece unos
datos interesantes.
“El pasado 8 de marzo, diputadas locales de esta legislatura se
reunieron en un desayuno al que denominaron de la soloridad y en el cual
coincidieron en una agenda común, en la que se encontraba su interés por
reconocer la trayectoria de mujeres, honrándolas mediante el ejercicio de
nombrar al menos a un espacio dentro de las salas de eventos que existen en el
Congreso.
“El Centro de Estudios para la Igualdad de
Género y Derechos Humanos fue encomendado por parte del presidente de la Junta
de Coordinación Política, Dip. Juan Javier Gómez Cazarín, para dar seguimiento
a ese acuerdo, por lo que hoy estamos aquí para honrar la memoria de las
mujeres que han sido diputadas locales y para actuar en congruencia, al ser
esta, la primer legislatura paritaria en la historia del Poder Legislativo de
Veracruz.
“Y qué mejor nombre que el de Irene Bourell
Peralta, quién fue la primer diputada local electa en la 44 Legislatura Local,
en el período de 1956 a 1959 y también la primera Diputada Federal por el
estado de Veracruz, siendo además la primer representante de nuestra entidad en
formar parte de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados.”
Continúa Mónica Mendoza:
“Es por ello que convocarles a este acto,
utilizamos la frase “nombrar es reconocer”, porque esta ceremonia no se trata
tan solo de darle el nombre de la primer diputada local a este espacio, sino de
que a partir de ello, reconozcamos el aporte que han brindado a la historia del
Congreso del Estado de Veracruz, cada una de las mujeres que se han desempeñado
como diputadas locales y que en ese encargo, han representado a ciudadanos y
ciudadanas que les dieron su voto de confianza.
“Desde la 44 Legislatura en la cual Irene
Bourell fue la primera y la única mujer diputada, hasta esta, la 65
Legislatura, 138 mujeres han sido legisladoras locales y 11 de ellas han tenido
oportunidad de serlo en dos ocasiones.
“Ello sin contar desde luego a las 180
suplentes, muchas de las cuales no tuvieron la oportunidad de fungir como
titulares, porque en aquellos primeros tiempos una mujer suplente era el
equivalente de cumplir con un requisito que permitiera aparentar inclusión,
aunque de hecho no la hubiera.
“Han transcurrido desde entonces 21
legislaturas locales y si la distribución fuera proporcional, deberíamos haber
tenido 6.5 diputadas por legislatura, pero no fue así. La participación
política de las mujeres no siempre fue progresiva, sino que a veces a algún
avance, sobrevenía un retroceso.”
Muy de acuerdo. Concluye Mónica:
“Por fortuna hoy la paridad es ley, y la
integración proporcional está garantizada en la Constitución. La distribución
equitativa en la integración política supone que las mujeres y los hombres
construyamos al fin la igualdad a la que siempre hemos aspirado.
“Así sucede en esta, la LXV Legislatura, en
donde en conjunto las Diputadas y los Diputados impulsan leyes que redundarán
en beneficio de toda la población.”
Así sea.
De cinismo y anexas
El extraordinaria Goethe escribió: “El hombre
más feliz del mundo es aquel que sepa reconocer los méritos de los demás y
pueda alegrarse del bien ajeno como si fuera propio.”
Ahí se ven.