A la
opinión pública:
Tribuna
Libre.- Un
grupo numeroso de profesionistas, estudiantes, universitarios, servidores
públicos y ciudadanos con un amplio arraigo en nuestro Estado, en nuestro medio
y en Instituciones Públicas diversas, manifestamos conocer la gran trayectoria
de casi 50 años en la administración pública de la Maestra Clementina Guerrero
y estamos más que convencidos de su honestidad, honorabilidad,
incorruptibilidad, espíritu de servicio, sensibilidad social y humanismo, así
como el gran beneficio que ha aportado a nuestra sociedad, y a las
Instituciones en las que ha estado al frente, entregando en todo momento más
que buenas cuentas de sus actuaciones en el ejercicio del servicio público y
esto, aunque suene extraño, en nuestro medio y en estos tiempos, sin haberse
favorecido personalmente de manera ilícita en ningún momento de su vida.
Un ejemplo claro es paso por la Universidad
Veracruzana; como Secretaria de Finanzas en la administración que ahora
encabeza la Doctora Sara Ladrón de Guevara, la Maestra Clementina Guerrero
aporto resultados relevantes, por cierto demostrables, en el logro de la
regularización de un sin número de inconsistencias y desviaciones que al inicio
de esa administración prevalecían en muchos ámbitos institucionales, como son
las finanzas, los recursos humanos, las entidades académicas, entre otros,
coadyuvando de manera importante en la salvaguarda patrimonial y en la
estabilidad financiera, administrativa y académica de nuestra Máxima Casa de
Estudios, lo que permitió en su oportunidad ser calificada como una Institución
ejemplar en nuestro país, hecho diametralmente opuesto con lo sucedido en una
gran cantidad de Universidades Públicas de México, las que estuvieron
involucradas durante la pasada administración federal en fraudes de todo tipo,
participando burdamente en la famosa “Estafa Maestra” que tanto daño causo a la
educación de nuestra juventud y al país entero; para el caso y como bien se
sabe fueron creadas múltiples empresas fantasma utilizadas para lavar y saquear
dinero público y para enriquecer a grupos de poder de manera burda e inmoral;
esto no pasó en ningún momento en la Universidad Veracruzana y por el contrario
se obstaculizó cualquier intervención de los grupos de la ahora llamada “mafia
del poder” para evitarlo; esto fue uno de los grandes logros de la Maestra
Clementina Guerrero, apoyada incondicionalmente por las máximas autoridades de
esa misma casa de estudios y que por cierto como sucede ahora, le generó
enemistades y críticas denostables de quienes se vieron entonces afectados en
sus mezquinos intereses; los funcionarios honestos estorban comúnmente y
entorpecen las practicas que en materia de corrupción pretenden generarse.
Surge entonces la pregunta, a quien estorbó ahora la Maestra Clementina
Guerrero para ser atacada y perseguida de este modo?
Por ello, manifestamos a través de la
presente carta, nuestro más amplio repudio a las acciones ilegales,
arbitrarias, irresponsables, carentes de sustento jurídico y violatorias de los
Derechos Humanos consagrados en nuestra Carta Magna, con fines perversos,
obscuros y deleznables que en su contra ha instaurado el Gobierno de Veracruz a
través de la Fiscalía General y del Tribunal Superior de Justicia, las que no
sabemos si corresponden a acciones ligadas a la política electorera que en todo
momento rige o a cuestiones personales que el propio Gobernador del Estado
tenga en contra de la Maestra Clementina, inclinándonos más por esta última
hipótesis en razón de que la Maestra no ha pertenecido, ni ha formado parte o
está vinculada con ningún partido, grupo o personaje político, ni ahora ni
nunca y esta desligada de cualquier acto que tenga que ver con ello, aunado
esto a la falta de elementos legales que pudieran existir en su contra,
denotándose la improvisación, la falta de oficio e inconsistencia en los procedimientos
“legales” con que se han llevado las absurdas acusaciones que se le han hecho,
además de la saña perversa con la que ha actuado la autoridad, cuyo cometido no
tiene por objeto hacer justicia sino cometer un acto de venganza o bien sacar
del camino a la Maestra Clementina Guerrero porque posiblemente estorba; esto
se señala al observar que en ningún momento se ha respetado el debido proceso y
que la orden tajante del Ejecutivo es privarla de su libertad a costa de lo que
sea, lo que para nuestra comunidad representa una violación clara a los
Derechos Humanos Universales, a la falta de ética de este Gobierno y a la
incongruencia con el discurso de la Cuarta Transformación, el que muchos de nosotros apoyamos para buscar
lograr un cambio que hoy por hoy en Veracruz no se ha dado, sino todo lo
contrario. ¿Esta es acaso la ideología de la cuarta transformación?; habría que
preguntárselo al Sr. Presidente de la República haber que opina.
No está por demás reiterar que estas
acciones, solo demuestran la escasa calidad profesional y moral de quienes
representan hoy día a nuestras pobres instituciones y al propio Gobierno de
Veracruz; hemos visto que los métodos y la contundencia avasallante con las que
se han instaurado las acciones “legales” en contra de la Maestra Guerrero solo
demuestran que quienes lo hicieron son incluso más peligrosos que los propios
delincuentes que hoy por hoy tiñen de sangre a Veracruz, Estado fallido plagado
de inseguridad, incertidumbre, injusticias, impunidad, crisis economía,
política y social, corrupción, tráfico de influencias, nepotismo, etc.; ¿de
quién entonces tendremos que cuidarnos más; de aquellos o de estos?
Es por demás buscar un verdadero
calificativo o bien una justificación al
ataque artero que ha sufrido la Maestra Clementina Guerrero a través de una
denuncia presentada por el actual y flamante Secretario de Salud ante la
Fiscalía de Veracruz, pesimamente formulada como él acostumbra cumplir con sus
responsabilidades que el cargo que ostenta le exigen, denuncia aparejada por
una orden de aprehensión, que al ser éstas filtradas a los medios de
comunicación y redes sociales, han denostado y dañado en principio la imagen de
la Maestra Clementina en cuanto a su persona y a su entorno familiar, lo que
implica violaciones constitucionales a su esfera jurídica reguladas en los
artículos 14 y 16 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos;
la secrecía de las carpetas de investigación y de los instrumentos legales
señalados es responsabilidad plena de la Fiscalía de Veracruz, que tal vez sin
saberlo por la ignorancia o perversidad que ciertos Fiscales demuestran, han
cometido con ello delitos graves que por ende deberían ser castigados por la
propia ley que ellos a su antojo aplican o no aplican, según convenga.
En lo que respecta a la orden de aprehensión
mencionada, fue evidente el exceso cometido por la Fiscalía y el Poder Judicial
en contra de la Maestra Clementina
Guerrero, considerando que dicha medida tiene carácter excepcional y para ser dictada,
conforme al artículo 141 del Código Nacional de Procedimientos Penales, se
requiere que el Ministerio Público advierta que existe la necesidad de cautela,
situación que no fue debidamente acreditada, tomando en cuenta el arraigo que
tiene en esta ciudad, y que además se encontraba desempeñando el cargo de
Tesorera del Ayuntamiento de Xalapa, por lo que el Juez de control tenía otras opciones para hacerla comparecer,
sin embargo de manera automática, sin análisis e irresponsablemente concedió
arbitrariamente la petición de la Fiscalía.
La actuación perversa e ineficiente de la
Fiscalía quedó evidenciada, en virtud que la Maestra Guerrero de manera
voluntaria, solicitó fuera fijada fecha y hora para la celebración de la
audiencia inicial, la cual fue celebrada el pasado 31 de octubre sin que al
efecto acudiera el Fiscal encargado de la carpeta, no obstante haber sido
notificado, en razón de la incomparecencia del Fiscal, el Juez de Control
convocó nuevamente a las partes para el día 1 de noviembre de 2019, y los
representantes de la Fiscalía nuevamente no acudieron a la cita, presentándose
hasta el 14 de noviembre, con el asesor legal de la Secretaría de Salud, sólo
para acreditar la interposición de diversos recursos “legaloides” con el objeto
de dilatar el proceso y esperar a que fuera designada la nueva Presidente del
Poder Judicial del Estado, la cual es afín a los Intereses del Gobierno
Estatal.
Esto refleja la incapacidad, improvisación e
irresponsabilidad de ese aparato judicial, lo que abonó a la intención
maquiavélica de retrasar el proceso legal que se desarrollaba hasta lograr
acomodar autoridades a modo para lograr de manera desapegada a la legalidad,
sus nefastas intenciones de privar de su libertad a la Maestra Guerrero.
Es importante que de manera mencionar que
derivado de un análisis somero realizado a la denunciada presentada contra la
maestra Guerrero por parte de algunos compañeros conocedores de estos temas, se
observa que ésta parece haber sido formulada por un estudiante de primer
semestre de Derecho, ya que, entre otras cosas, hasta de desaparición forzada
de personas la acusan, ridículo como verán.
Como consecuencia a las múltiples
deficiencias e indebida integración de la carpeta de investigación de la
denuncia mencionada y con objeto de continuar con el hostigamiento penal
instaurado contra la Maestra Guerrero, durante el mes de diciembre de 2019, la
Fiscalía inició un nuevo proceso penal, del que se desconocen los datos
identificativos por haber sido integrado en el período vacacional de invierno;
de este mismo proceso se generó una nueva orden de aprehensión en contra de la
Maestra Clementina Guerrero, la que fue concedida durante el periodo vacacional
referido; el plan era privarla de su libertad el 23 de diciembre de ese mismo
año, fecha simbólica para estos actos deplorables; este proceso penal o la
acusación que lo motiva, en ningún momento fue notificado a la acusada
dejándola en total estado de indefensión, presumiéndose que la citada carpeta
de investigación, posiblemente esté integrada de manera infundada o tal vez ni
exista e indebidamente desprenden de ella una orden de aprehensión de la que
sabemos de su existencia, en razón de que actualmente se encuentra en trámite
un juicio de amparo en contra de dicha orden.
En razón de lo anteriormente expuesto,
resulta sencillo concluir, lo expresado al inicio de esta carta, referente a
que las acciones instauradas en contra de la Maestra Clementina Guerrero,
resultan del todo ilegales, arbitrarias, irresponsables, carentes de sustento
jurídico y violatorias de los Derechos Humanos Universales, corroborándose que
el Estado de Derecho es flagrantemente violado en su perjuicio, quien más que
responsable de cometer delito alguno resulta ser víctima del aparato de un
Gobierno sin rumbo y de quienes lo representan, los que sin respeto alguno a la
legalidad, creen poder ejercer las facultades que el puesto que ahora ostentan
les ha otorgado, olvidándose que cuando tomaron protesta en sus encargos
respectivos prometieron bajo juramento respetar y hacer respetar la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las Leyes que de ella
emanan, cosa que no han hecho sino todo lo contrario, dando testimonio en ese
mismo acto que de incumplir su juramento el pueblo se los demandara y es por
ello que ahora nosotros como pueblo les demandamos cumplir con la Ley y
respetar el Estado de Derecho y de no estar en condiciones de hacerlo renunciar
a su cargo. “Nosotros los pusimos, nosotros los quitamos, el Pueblo
manda”
Por último, es de considerar cuales fueron
los actos cometidos por la Maestra Guerrero que de manera personal agraviaron
al Ejecutivo; de éstos consideramos que algunas pudieron causarle enojo,
molestia, ira, estorbo, pero cualquier servidor público, está sujeto a
opiniones, acciones, manifestaciones que no le pueden agradar, pero no por ello
echar a andar todo el aparato judicial para mitigar su enojo, cometer actos de
venganza contra ciudadano alguno o lograr objetivos perversos; estos son por
parte de quien los comete y tiene el poder para hacerlo, deplorables,
inmorales, y nefastos y solo dejan ver la falta de oficio político del promovente
y lo peor de todo es que todo este circo, maroma y teatro instaurado en contra
de la Maestra Clementina es antagónico con los principios ideológicos del
propio Presidente de la República y atentan contra el cambio que la ideología
que él promueve a través de la Cuarta Transformación, por ello consideramos que
el Gobierno Federal encabezado por el Lic. Andrés Manuel López Obrador, está
obligado a que se investiguen todos
estos hechos, que más que beneficiar sus políticas de cambio las dañan y
denostan y por ende se promueva que en Veracruz la justicia prometida se
aplique en estricto apego a la legalidad y al estado de derecho, más no de
acuerdo a rencillas, caprichos personales o intereses turbios o personales que
mucho tendrían que ver con la comisión de actos de corrupción, entre otros.
En breve publicaremos una carta pública
nacional dirigida al Lic. Andrés Manuel López Obrador, respaldada por todos
nosotros y por múltiples personalidades de la vida pública de Veracruz, quienes
hoy hacemos este reclamo, dado que consideramos que el Presidente de la
República, debe conocer los pormenores de estos actos del todo contrarios a su
ideología política y a la Ley; en él aún confiamos y le apoyamos y mantenemos
la esperanza firme de que en verdad tendremos un cambio sustancial en nuestro
país, claro no un cambio para mal como está sucediendo día con día en nuestro
lastimado Veracruz, en verdad esperamos que ese cambio prometido se dé para
bien de México y de nuestro pueblo del que todos somos parte.