Así fue su llegada a México
Ciudad, de México. | 18 julio de 2020
Tribuna
Libre.- La
FGR dijo que Lozoya fue trasladado a un hospital por problemas de salud. España
sostiene que no hay constancia de que estuviera enfermo mientras estuvo preso
en ese país.
España no tiene constancia del presunto mal
estado de salud del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, como informó en su comunicado
oficial la FGR.
“Fuentes penitenciarias de España dicen no
tener constancia de que Lozoya tuviese algún padecimiento”, confirmaron a
Animal Político.
A su llegada a México, el exdirector de Pemex
fue trasladado a un hospital debido a problemas de salud importantes, lo que
fue ratificado por un médico de la propia familia del exfuncionario.
“El perito médico de la Fiscalía General de
la República (FGR), por su parte, realizó la revisión física y médica
correspondiente del extraditado y
encontró anemia desarrollada y problemas sensibles en el esófago, así como una
debilidad general en toda su salud, por lo que propuso su internación en un
hospital. La familia del extraditado pidió, y se le autorizó, que un médico
particular hiciera también una revisión, en la que encontró los mismos
síntomas. En razón de lo anterior, el MPF ordenó su traslado a un hospital”,
dijo la Fiscalía en su comunicado.
Emilio Lozoya fue detenido en Málaga, España
el pasado 13 de febrero. Posteriormente se le trasladó a una cárcel en Madrid
durante se desarrollaba el juicio de extradición que finalmente concluyó con el
exdirector de Pemex aceptando la misma a cambio de colaborar con la Fiscalía y
obtener algún beneficio legal. En todo
ese lapso no se reportaron problemas de salud del exfuncionario del gobierno
del presidente Enrique Peña Nieto.
El exdirector de Pemex llegó poco antes de la
una de la mañana al Aeropuerto internacional de la Ciudad de México en un avión
de la Fiscalía General de la República (FGR) proveniente de España, país del
que fue extraditado en cumplimiento de dos órdenes de aprehensión por los casos
Odebrecht y Altos Hornos de México.
Hasta ahí todo marchaba como estaba previsto.
Pero en las horas posteriores, lo que debió ser una puesta a disposición ante
los jueces que ordenaron su captura se convirtió en un traslado a un hospital
por problemas de salud realizado en medio de versiones contradictorias.
De forma cronológica los hechos ocurrieron de
la siguiente forma: a las 3:58 de la mañana de este viernes un convoy compuesto
por 6 camionetas, un automóvil y 2 motocicletas – todos de la FGR – abandonó
las instalaciones del aeropuerto capitalino en el oriente de la capital.
El trayecto del convoy fue seguido por
numerosos medios de comunicación. A las 4:24 de la mañana el convoy llegó al
Reclusorio Preventivo Norte en la alcaldía Gustavo A. Madero donde decenas de
fotógrafos y camarógrafos ya lo esperaban.
En los 15 minutos siguientes los vehículos
permanecieron detenidos debido a que la presencia de los medios impidió que el
convoy ingresara rápidamente al complejo. Finalmente, a las 4:42 de la mañana,
las dos camionetas que lideraban el convoy, una blanca y una negra, ingresaron
al área de estacionamiento frontal del complejo penitenciario donde ya no
pudieron ser seguidas por la prensa.
En los minutos posteriores los medios de
comunicación dieron por un hecho que Emilio Lozoya había ingresado al
reclusorio en uno de esos vehículos e incluso se difundió con insistencia la
fotografía de un hombre dentro de una de las camionetas, que portaba chaleco
antibalas, cubrebocas y gorra, asegurándose que se trataba de Lozoya.
Incluso a las 6 de la mañana el Consejo de la
Judicatura Federal activó a través de su área de comunicación social un chat en
la aplicación whatsapp en donde se darían a conocer los pormenores de la
audiencia inicial de Lozoya, luego de que debido a restricciones sanitarias no
se permitiría el ingreso del público y prensa a la misma.
No obstante, los minutos transcurrían sin que
se confirmara oficialmente a qué hora se llevaría a cabo la referida audiencia
ya que la FGR no había solicitado que se programara la misma.
A las 7:01 de la mañana la FGR difundió el
comunicado 225/20 en el que confirmaba que Lozoya había llegado al Aeropuerto,
sin embargo, reveló que la revisión médica que conforme a la ley debe
realizarse a cualquier detenido al llegar a otro sitio, había evidenciado
problemas importantes de salud en el exdirector de Pemex, entre ellos “anemia
desarrollada y problemas sensibles en el esófago”. Esto, según la Fiscalía, fue
corroborado también por un médico privado de la familia del exfuncionario.
Por este motivo, la FGR indicó que el
Ministerio Público ordenó el traslado del detenido a un hospital para su
internamiento y observación en calidad de detenido, situación que fue
notificada a los jueces correspondientes. Es decir, según la información
oficial de la Fiscalía, Lozoya no fue trasladado al penal capitalino.
Entérate: Audiencia de Emilio Lozoya será
privada por pandemia de COVID; se dará información a medios por WhatsApp
A las 7:45 de la mañana autoridades de la FGR
contactaron a Animal Político para ratificar que Lozoya nunca fue trasladado al
centro penitenciario, sino que se le llevó directamente a un hospital, y que el
convoy que los medios siguieron durante la madrugada fue “una diligencia
distinta”, de la que hasta el momento no se han dado detalles.
No obstante, de forma paralela a este hecho
en la conferencia matutina que el presidente Andrés Manuel López Obrador
ofreció desde Colima, el secretario de seguridad Alfonso Durazo señalaba,
aunque en un tono de duda, que Lozoya había sido llevado al reclusorio
capitalino.
“Efectivamente fue ingresado en este penal
pero fue trasladado inmediatamente después a un hospital por algunos síntomas
de algunas molestias que presentó. Estoy tratando de localizar el reporte de la
Fiscalía…” dijo Durazo.
Pese a dicho señalamiento la FGR – que
finalmente es la instancia legalmente responsable del traslado y manejo de
Lozoya – mantuvo su postura respecto al traslado directo del aeropuerto al
hospital de Lozoya.
Esta versión fue fortalecida posteriormente
por autoridades del Gobierno de Ciudad de México quienes a las 8:30 de la
mañana confirmaron a Animal Político que Lozoya nunca fue ingresado a las
instalaciones del Reclusorio Preventivo Norte.
Por su parte el Consejo de la Judicatura
Federal ratificó a las 9 de la mañana a este medio que la audiencia inicial de
Lozoya nunca fue programada ya que, aunque estaban listos para ella, la
Fiscalía no solicitó la realización de la misma.
A su vez, ni el Poder Judicial ni el gobierno
capitalino tenían corroborado, hasta las 10 de la mañana, si realmente iba una
persona detenida en el convoy que durante la madrugada siguieron los medios y
en donde se supuso que iba el exdirector de Pemex.
(revistarepublica)