*En sus
ensayos, se detectó que un 70 por de las personas, a quienes se les aplicó la
vacuna, desarrollaron fiebre o dolor de cabeza, aunque esos síntomas pudieron
ser tratados con paracetamol.
*Hay
cinco tipos de vacunas en desarrollo: las genéticas, de vectores virales,
hechas sobre la base de proteínas, de virus enteros y reutilizables.
Ciudad, de México. | 28 julio de 2020
Tribuna
Libre.- Hace
unos días, la Organización Mundial de la Salud (OMS) subrayó que la
distribución y aplicación de la vacuna contra la COVID-19, no se realizará
antes de la primera parte del año 2021.
“Hay que ser realistas en cuanto a los
tiempos. No importa cuánto intentemos acelerar el proceso, tenemos que estar
seguros de que una vacuna es segura y efectiva y eso toma su tiempo”, manifestó
Mike Ryan, director de Emergencias Sanitarias de la OMS.
En días recientes la Universidad de Oxford y
Astra Zeneca informaron que la vacuna contra el coronavirus en la que trabajan,
denominada ChAdOx1 nCoV-19, es “segura” y “entrena” al sistema inmunológico.
Sin embargo, aunque aún no está lista la
vacuna contra la COVID-19, algunos médicos ya comienza a alertar sobre posibles
efectos secundarios de esta. Esta, dicen, podría tener un comportamiento
“reactogénico” en el cuerpo, dependiendo del organismo y reacciones de cada
individuo.
De acuerdo con una publicación del sitio de
divulgación científica StatNews, las vacunas que se están desarrollando para
combatir al coronavirus podrían causar dolor de cabeza, dolor de brazos,
fatiga, escalofríos y fiebre.
En este sentido, sobre su vacuna, la
Universidad de Oxford reveló que sí tiene efectos secundarios; aunque, dijo, no
se consideran de peligro.
En sus ensayos, detectó que un 70 por de las
personas, a quienes se les aplicó la vacuna, desarrollaron fiebre o dolor de
cabeza, aunque esos síntomas pudieron ser tratados con paracetamol.
Por su parte, los médicos consultados por
StatNews también apuntaron que los efectos secundarios no deberían preocupar;
por el contrario, “podría ser considerado un buen signo de que la inyección
está funcionando y el sistema inmunológico ha comenzado a reaccionar, actuar y
a manifestarse levemente”.
“Creo que una de las cosas que tendremos que
darnos cuenta es que todas estas vacunas serán reactogénicas. Todas van a estar
asociadas con reacciones“, dijo Kathryn Edwards, directora científica del
Programa de Investigación de Vacunas Vanderbilt en Nashville, Tennesse.
En tanto, el director senior en el Centro de
Ciencias de la Comunicación en RTI International, Brian Southwell, subrayó que
es importante informar a la población mundial sobre los posibles efectos
secundarios de la vacuna, para no generar pánico.
“Creo que debiera señalarse eso: ‘Mira, esto
va a ser un poco doloroso, pero hay un final y hay un bien mayor que ganar
aquí, creo que probablemente valga la pena”, declaró.
“La aceptación podría ser mucho mayor si
hacemos nuestro trabajo para generar confianza ahora y sentar las bases ahora.
Pero no estamos necesariamente tan centrados en eso como podríamos estarlo”, agregó.
Hay cinco tipos de vacunas en desarrollo: las
genéticas, las de vectores virales, las hechas sobre la base de proteínas, las
de virus enteros; y las reutilizables, es decir, aquellas que ya son aplicadas
en otras enfermedades, de acuerdo con el portal Infobae.