* Pedro Miguel Rosaldo va por Coatza * Un burócrata montado en Morena * No emerge de la lucha social sino de la entraña de la gobernadora * La cargada, en horario laboral * A la mayoría ni los conoce * Gersaín Hidalgo se apanicó y se abrió del PT * Cabeza de cerdo y amenaza en la Tesorería de Coatzacoalcos
Mussio Cárdenas Arellano | 07 marzo 2025
Tribuna
Libre.- De su entraña política, algo
raquítica, saca Rocío Nahle a Pedro Miguel Rosaldo García para convertirlo en
alcalde de Coatzacoalcos. Qué más da que sea tecnócrata, fifí, invisible, sin
roce con los pobres ni cargo de elección popular.
Su
pupilo, invento político al más puro estilo Nahle, surge de una encuesta
inexistente que lo catapultó en las preferencias de un público, también
inexistente, que votó por un personaje, Pacho Rosaldo, del que sólo su familia
y sus amigos saben quién es.
Rosaldo
García es producto de un parto prematuro, extraído con forceps en el doloroso y
accidentado proceso interno de Morena, apurando los destapes, contragolpeando
la cúpula del obradorismo a Rocío Nahle y rasurándole algunos de sus candidatos
como precio y castigo por la revuelta que armó por el caso Yunes, una
afiliación que la desquició.
La
zacatecana se puso la soga al cuello y de paso se la puso a sus candidatos. A
Pedro Miguel lo tuvo a un tris de bajarlo de la nube en que lo trepó.
Originalmente,
los destapes serían el 13 de marzo pero Morena aceleró el paso. Y Nahle,
creyendo que podía patear a sus líderes, Andy López Beltrán incluido, nada
pasaría y que le respetarían los espacios que suelen reservarse para un
gobernador.
Nahle
se quedó sin candidatos en Acayucan, San Andrés Tuxtla y Emiliano Zapata, pero
a su hijo político, Pedro Miguel Rosaldo García, lo enfila a la alcaldía de
Coatzacoalcos, la tierra que no la vio nacer, pues es zacatecana, y donde ya ha
impuesto, para desgracia de los coatzacoalquenses a dos bodrios que acabaron
con el presupuesto y se fueron sin hacer nada, célebres por dejar una estela de
abuso y corrupción.
Víctor
Manuel Carranza Rosaldo, tío de Pacho, llegó con la bendición de José Luis Peña
Peña, el marido incómodo de la gobernadora de Veracruz, y en cuatro años sólo a
dos cosas se dedicó: andar revolcándose con el baile de la iguana, y hacerse el
muerto mientras el clan de los Nahle-Peña acaparaban las obras y los millones
de pesos que se pagaron por ellas.
El
sucesor, Amado Cruz Malpica, fue igual o peor. A la güeva que lo caracteriza se
agregó una red de corrupción, encabezada por el ex director de Obras, Onésimo
Mendoza, que solía simular licitaciones y luego apretar a los contratistas
ganadores para que dejaran las obras y el funcionario las realizara con sus
compañías de confianza.
Súmese
al bandidaje, el desvío de recursos, dejando que la clínica y los médicos donde
se realizó la cirugía de rodilla de la esposa del alcalde, Esther Mortera
Zetina, fueran facturados al ayuntamiento de Coatzacoalcos.
Y al
aquelarre político se agrega la ruptura en el cabildo cuando la mitad de los
ediles se negaron a firmar el avance de obras de 2024, pues la síndica, Ana
Bertha Hernández Aguilar, investigó y halló que se dieron por concluidas obras
que se hallaban en proceso o que ni siquiera habían iniciado, o que la calidad
no correspondía a lo pagado. La denuncia precipitó la renuncia de la tesorera
municipal, Grace del Carmen Mendoza Chesty, a la que el Órgano de Fiscalización
Superior de Veracruz le documentó millones de pesos en inconsistencias.
Rocío
Nahle, que es un fiasco en la toma de decisiones y, peor, en la selección de
sus alfiles, o en la postulación de candidatos. Cree en su gente y su gente le
muerde la mano.
Pedro
Miguel no es sólo el juguete de cuerda de Rocío Nahle. Tiene a su favor una
sólida formación universitaria, y en contra que habla un español tan tecnócrata
que no hay quien le entienda.
Cuando
se pone a hablar de trazabilidad, hace reír.
Y tiene
en contra, también, que no lo conocen en las colonias.
Y en
contra, que se mueve sólo entre los de clase media alta y alta.
Y en
contra, que se le percibe atado a las faldas de la gobernadora.
A su
favor, dos licenciaturas, una en Derecho por la Universidad Tecnológica de
Xalapa y otra, en Mercadotecnia, en el Instituto Tecnológico y de Estudios
Superiores Monterrey (ITESM) campus Querétaro.
Los
posgrados abonan al futuro alcalde: una maestría en Finanzas por la Universidad
Autónoma de Barcelona, una especialidad en Dirección Financiera por la
Universidad de Chicago y otra más en Alta Dirección AD-2 en el Instituto
Panamericano de Alta Dirección Empresarial (IPADE) Business School.
Cuenta
con cursos y diplomados en la Secretaría de la Función Pública relacionados a
temas presupuestarios y geopolíticos, así como un doctorado en Administración
Pública en el Instituto Nacional de Administración Pública (INAP).
Todo
bien si no fuera por el desarraigo y la madrina. Nahle es cáustica, dominante,
volada, políticamente limitada, ocurrente, necia, caprichosa y berrinchuda. Y
el casting siempre es un desastre.
Encumbra
bodrios, abusivos, ratas y malintencionados. Dos Bocas es una muestra;
Veracruz, otra; el ayuntamiento de Coatzacoalcos, un nido de corrupción.
Su
nueva oferta es Pacho Rosaldo. Pero Pacho es repelente a los de abajo. No se
mezcla con la broza. No se agacha al proletariado. No dirige la mirada al
pueblo bueno y sabio que sufre, calla, se aguanta, aplaude y vuelve a callar.
Los programas sociales sirven para aletargar.
Pedro
Miguel Rosaldo será alcalde, quizá el más preparado que haya tenido
Coatzacoalcos. Pero la política no es sólo formación. Es sensibilidad, lenguaje
llano, diálogo y apertura, ser inmune al vértigo y, sobre todo, entender las
reglas del poder. En la victoria, humildad.
Pedro
Miguel será el cuarto Rosaldo en alcanzar la presidencia municipal. Antes lo
fue, en dos ocasiones, su bisabuelo, Pedro Rosaldo Palomino; Rogelio Lemarroy
González, hijo del empresario Rogelio Lemarroy Rosaldo, primo de su papá, el
doctor y ex diputado federal perredista, Pedro Miguel Rosaldo Salazar, y el
morenista Víctor Manuel Carranza Rosaldo, su tío, quien fue alcalde de
Coatzacoalcos de 2018 a 2021.
El
problema de Pedro Miguel se llama Andrés. Su hermano, quien fuera secretario de
Gobierno en el ayuntamiento de Coatzacoalcos, fue sancionado por el Tribunal
electoral del Poder Judicial de la Federación por retiro ilegal de propaganda
del partido Movimiento Ciudadano, en 2024.
Los
desplantes de Andrés Rosaldo son célebres, soberbia pura, las ínfulas de un
mediocre que desoye y contradice al alcalde Amado Cruz Malpica, su jefe
político, cuando dicta a qué agentes municipales y personal administrativo se
le reasigna salario y a quién no. El audio es revelador.
Pedro
Miguel Rosaldo no emerge de la lucha social. No se empolva los zapatos en los
arenales de las colonias. No se enloda en los pantanos del Coatzacoalcos real.
Nace de
la entraña política de Rocío Nahle, que es algo raquítica.
METADATO
La
cargada morenista a favor de Pedrito Miguel Rosaldo, en horario laboral. Unos
fueron a conocerlo, otros a lisonjear. Desconocidos para el futuro candidato de
Morena y virtual alcalde de Coatzacoalcos, lo rodeaban, se fundían en abrazos,
le externaban que es el mejor. Semanas atrás ni idea tenían de quién era él. La
bufalada despedía tufo a PRI, las huestes de Joaquín Caballero, Olver Damas,
Juan Carrera. Un alcalde que debiera estar despachando en su municipio, Noé
Castillo Olvera, de Agua Dulce, mostrando que ser comparsa de carnaval es lo que
se le da. Los Prot de Villa Allende que, contra lo que se diga, operan al 100.
Y hasta Cutberto Sánchez, director de Alumbrado Público, aquel que decía que el
ex diputado federal perredista, Pedro Miguel Rosaldo Salazar, padre de Pedrito
Miguel, era un palurdo, un ordinario, un patán. Al único que Pedrito Miguel se
le vio abrazar fue al ex secretario del ayuntamiento, Miguel Pintos Guillén,
del clan Nahle-Peña, hoy diputado local, aquel que falsificó un acta de cabildo
para despojar a las ligas del futbol de los terrenos en que se realizaban sus
partidos y convertir el área en el Parque Ecológico Miguel Hidalgo, un elefante
banco cuya construcción el clan Nahle-Peña entregó a Oscar Fosado, que no
concluyó pero que cobró al 100 por ciento. Tantas caras extrañas, sudores
ajenos, sonrisas fingidas, y Pedrito Miguel preguntándose: ¿estos quiénes
son? La mayoría nunca lo había tenido
cerca. Nunca habían cruzado palabra con él. Pedrito Miguel no es el caballo
negro de Morena; es el candidato desconocido, el entenado político de Rocío
Nahle. Otro Rosaldo a la alcaldía, como el experimento fallido llamado Víctor
Manuel Carranza Rosaldo. Pedrito Miguel cuenta con buena formación académica,
quizá como ningún otro alcalde en la historia de Coatzacoalcos, pero el círculo
que lo lleva al poder es voraz, una pandilla significada por la corrupción… Más
por las malas que por las buenas, Gersaín Hidalgo Cruz dejó al PT. Sucumbió a
una amenaza que llega desde el entorno de Rocío Nahle. Era abrirse de cualquier
aspiración, vía el Partido del Trabajo, o enfrentar las denuncias que le han
acumulado desde que Víctor Manuel Carranza Rosaldo era alcalde de Coatzacoalcos
y Gersaín Hidalgo, líder del Sindicato Único de Empleados Municipales, se daba
gusto cerrando accesos a Coatzacoalcos, bloqueando la entrada al túnel
sumergido, marchando en las calles y amenazando con quemar el palacio
municipal. Esas y otras denuncias sobre el líder sindical, hoy regidor priista
que le aplaude y le aprueba todo al alcalde morenista Amado Cruz Malpica,
espantaron a Gersaín y en cuanto pudo se alejó de la sucesión. Ni candidato por
el PT ni la regiduría que pudiera corresponderle al SUEM si logran un mínimo de
votación. ¿Quién cuenta la historia? El alto mando del PT en Veracruz. El miedo
–a Nahle– no anda en burro… ¿Quién es ese funcionario que hizo llegar una
cabeza de cerdo con una amenaza al director de Ingresos de la Tesorería de
Coatzacoalcos, Sidronio Alfaro, con la célebre frase de que “en mis negocios no
te metas”? La cabeza de cerdo yacía en el interior de una caja de cartón. Fue
entregada por un sujeto que no se cubría el rostro; no usaba gorra ni sombrero.
Durante la mañana del miércoles 5, dejó el “regalo”. Minutos después, el
personal de seguridad revisó el contenido. Hallaron la cabeza de cerdo y una
cartulina con el mensaje amenazante. ¿A quién le afecta que Sidronio Alfaro, un
reconocido profesionista, contador público, haya metido orden en la Dirección
de Ingresos?...
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