Conversatorio… Olvidando a los héroes veracruzanos: 136 aniversario del natalicio del General Heriberto Jara Corona, 1879-1968
Ángel Rafael Martínez Alarcón | 09 julio de 2015
Tribuna Libre.- El 10 de julio del presente 2010, se
conmemoran los 136 aniversarios del natalicio del General Heriberto Jara Corona,
el más preclaro de los revolucionarios del Estado de Veracruz. En la actual
administración estatal, se le ha olvidado los servicios prestados a la
patria y particular al Estado de Veracruz por parte del primer Secretario de
Marina durante el sexenio del Presidente de la República Manuel Ávila Camacho.
No sabemos si ya no funciona la oficina de Acción Social, o el economista
gobernador no tenga ningún interés por la historia local de los 212 municipios
que integran el Estado de Veracruz, si en los últimos años ni actos
conmemorativos de los natalicios o fallecimientos. Ya los bustos lucen triste
en la temporada del año que le tocan los homenaje, pues el Gobierno del Estado
ya no tiene dinero ni para pagar esas tradicionales coronas para
conmemoran, así también se están evitando gastos económicos. Uno entiende
al joven gobernador que se haya educado en la de México, pero tiene
asesores y mucho de ellos con conocimiento históricas, para comprender y
gobernar a Veracruz. Algo pasó al interior del Gobierno Estatal, que
tiene grandes lagunas mentales. Los niños de tercer grado de primaria, cursan
la materia de Historia de Veracruz, con su libro de texto; que se
quejan los padres de familia del material por la gran cantidad de
actividades que acaban por realizarla los padres. La Universidad Popular
Autónoma de Veracruz, tiene en tronco común la materia la diversidad cultural
en el Estado de Veracruz.
Un servidor guarda como un tesoro los
folletos muy sencillos editados por Acción Social, para cada unos de las
efemérides que conmemorar, en particular en el tradicional arreo de la bandera
en el Parque Benito Juárez, en punto de las seis de la tarde, dichos folletos
del gobierno del Gobernador Agustín Acosta Lagunes. El acto cívico de
los jueves que datan de finales del siglo XIX; los actos de honores a la
bandera realizados para los funcionarios menores de la legislatura, por el
Mtro. Juan Nicolás Callejas, rinde los honores a la bandera tal cual. En la
mayoría los señores diputados nunca asisten ni por equivocación, con eso
niveles de escolaridad no estaría mal que asistieran, y no sólo aprendan del
legendario charro sindical las mañas de la grilla.
El General Heriberto Jara Corona,
revolucionario, constitucionalista de 1917, embajador de México en la recién
fundada Cuba, gobernador de los estados de Tabasco, Veracruz, Senador de
la República. Presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido de la
Revolución Mexicana. Secretario de la Marina. Premio Mundial Stalin por la Paz
y Medalla Belisario Domínguez.
Siendo el único hijo del matrimonio de Emilio
Jara Andrade y María del Carmen Corona Corona, originarios de Tecamachalco,
Puebla. El descendiente nace el 10 de julio de 1879 en Nogales Veracruz, otros
afirman que fue en la ciudad de Orizaba. En esa ciudad realiza sus primeros
estudios en la Escuela Modelo de Orizaba fundada por Enrique Laubscher. La
familia Jara Corona se trasladan a vivir a la ciudad Pachuca. En 1892,
cursó en el Instituto y Literario Autónoma, donde egresa como
tenedor de libros. Tuvo la oportunidad de establecer amistad como Alfonso
Cravioto y Efrén Rebolledo.
La familia regresa al Estado de Veracruz,
donde Heriberto Jara, ingresar a trabajar como administrativo en la fábrica
textil de Santa Rosa y Río Blanco, a los 19 años año ingresa al Partido
Liberal, iniciando una carrera política desde las bases, está muy cercano a los
acontecimientos de la huelga de Río Blanco de 1907; siendo considerado uno de
los principales promotores de la huelga. Sufre persecución política, en enviado
a Valle Nacional, donde logra escapar.
También es inicia su labor como articulista
en las páginas de la Opinión y el Dictamen, y al final de su vida en las
páginas de la revista siempre, también escribió poesía, de los pocos
revolucionarios don dote literarios, una faceta poco conocida como explotada
por los investigadores.
En 1911, es electo diputado Federal, le toca
vivir los acontecimientos del golpe de estado impuesto a Madero y Pino Suárez,
se fortalece su lucha por la democracia, Heriberto Jara Corona, es organizador
del primer desfile del primero de mayo en 1913, por parte de Casa del Obrero
Mundial. Como también denunciar al asesinato del líder agrario de Camerino Z
Mendoza. Así fue de los pocos diputados que votaron en contra de la renuncia
del Presidente y vicepresidente de México en 1913.
Organiza la Brigada Ocampo para enfrentarse
con las guardias blancas de las compañías petroleras en el norte del Estado de
Veracruz; en la segunda mitad del año de 1913, tiene una actividad militar muy
comprometida a lados de militares revolucionarios como Pablo González y Francisco
J Mújica. En Agosto de 1913, le toca participar en el primer reparto agrario
por parte de Lucio Blanco, con las tierras de la hacienda propiedad de Félix
Díaz, en el estado de Tamaulipas.
El Gobernador carrancista, Cándido Aguilar,
como gobernador de Veracruz, en 1914, lo designó como Secretario de gobierno
del Estado. En ese mismo año recibe el ascenso de General Brigadier del
ejército mexicano. Más tarde es designado como Gobernador de la Distrito
Federal. El presidente Venustiano Carranza en 1916, lo designa como Jefe
de las primeras División del Ejército de Oriente. Regresa al Congreso de
la Unión, como diputado federal por el distrito de Orizaba. Destacándose como
uno de los diputados más aguerrido para impulsar los artículos 3º, 27º, 124º y
120º, en los Diarios de los debates, hay están sus intervenciones en defensa del
proyecto revolucionario.
Luego de su encargo legislativo, regreso a
carrera castrense, como Jefe de la segunda División de Oriente, y Jefe de las
operaciones en Tabasco, y también como Gobernador.
El Secretario de Relaciones Exteriores, Cándido
Aguilar, lo designa como Embajador de México, en la naciente nación Cubana
entre los años de 1917 a 1920. Regresa al país al ser electo como Senador de la
República por espacio de 4 años. Así también como Jefe de Operaciones militares
en el Estado de Puebla para enfrentar a la rebelión dela huertista.
Como Gobernador Constitucional de Veracruz,
será del 18 de diciembre de 1924 al 31 de octubre de 1927. Su gobierno ha
sido un referente de honestidad y trabajo, transformó la capital de Veracruz,
destacándose la construcción del Estadio Xalapeño, único en su estilo en
América Latina; promoviendo en su gobierno a la vanguardia literaria y
artística de los Estridentistas. Por tener conflictos por el asunto del
petróleo, el Presidente de la República Plutarco Elías Calles, logró que
Jara Corona fuera destituido, como hace falta esa acción en los actuales
gobernantes por el saqueo de las finanzas estatales.
El General Lázaro Cárdenas, en 1934, lo
nombra presidente de la Comisión de Estudios de las leyes Militares, e inspector
general del ejército, así como también Comandante de las 26º y 28º zona
militar entre los años de 1935 a 1939.
En 1939, es designado como Presidente del
Partido Nacional Revolucionario, fue el comisionado en transformarlo en Partido
de la Revolución Mexicana, y organizar la campaña presidencial del General
Manuel Ávila Camacho. En segundo sexenio de 19140 a 1946, es designado
como Secretario de Marina del Gobierno de la República, tuvo que
enfrentar el conflicto de la agresión fascista contra buques mexicanos, y la
participación de nuestro país en la Segunda Guerra Mundial.
En los últimos años de su actividad política,
encabezó el Movimiento mexicano por la Paz y Presidente del instituto de
relaciones culturales México Cuba. Muere en la ciudad de México el 17 de abril
de 1969, a los 88 años de edad. Sus cenizas fueron esparcidas en el golfo de
México.
En el estado de Veracruz, encontramos un sin
número de Escuelas con su nombre, colonias, calles, el aeropuerto internacional
del puerto de Veracruz, el estadio Xalapeño, hasta monedas de cinco pesos;
espero que la clase política actual conozcan a un político honrado, que siendo
Secretario de Marina pagaba renta, y el Presidente de la República le dio en propiedad
una casa, misma que regresó al Estado Mexicano, para convertirla en un centro escolar en el puerto de Veracruz.