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El informe “Panorama de la Salud 2017” de la
OCDE alertó sobre la falta de inversión por parte del Gobierno en materia de
salud, la cual provoca que los mexicanos gasten hasta el 41 por ciento de sus
ingresos en atender enfermedades de alto costo como el cáncer.
*La
organización señaló que la “pobre” calidad de la atención médica en México se
ve reflejada en bajos índices de supervivencia ante afecciones como derrames cerebrales
e infartos, con cifras que duplican o más que triplican el número de decesos
promedio en la OCDE.
*A eso
se une un incremento de la tasa de mortalidad por diabetes, la falta de
progresos con las enfermedades circulatorias, y un número extraordinariamente
alto de fallecimientos por accidentes de tráfico y homicidios.
Ciudad de México. | 13 noviembre de 2017
Tribuna Libre.- La falta de inversión
por parte del Gobierno en materia de salud provoca que los mexicanos gasten
hasta el 41 por ciento de sus ingresos en atender enfermedades de alto costo
como el cáncer, lo que empobrece a las familias, reveló la Organización para la
Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en su más reciente informe.
México se encuentra en el penúltimo lugar de
la tabla, de 35 países de la OCDE, en el rubro del “Gasto del bolsillo”, es
decir, el que realizan las familias de sus recursos para atender enfermedades.
El país es sólo superado por Letonia, donde sus habitantes gastan hasta 40 por
ciento de su salario en salud, y supera el promedio de la OCDE, que equivale a
20 por ciento.
“Se ha demostrado que cuando el gasto de
bolsillo es superior a 20 por ciento se favorece que las personas incurran en
gastos catastróficos; es decir, que se empobrezcan por la necesidad de cubrir
tratamientos de alto costo por padecimientos graves como el cáncer. En
contraste, incrementar 10 por ciento la inversión en salud se traduce en un
incremento de tres meses en la esperanza de vida, explicó Ian Forde, analista
senior de política de la salud del organismo al presentar el informe.
“La posición de México es decepcionante e
inquietante. En la mayoría de los países vemos un aumento de gasto en salud en
los últimos 20 o 30 años. En México vemos una tendencia muy llana, queda al 6
por ciento por los últimos 12 años. Los países están incrementando su gasto en
salud, pero México no”, añadió.
Según el analista, la baja inversión de México en salud se ve
reflejada en la atención de la población, por lo que el país está muy por
debajo del promedio de la OCDE en varios indicadores.
De acuerdo con el informe, México es el peor
calificado en casi todos los indicadores, salvo tres: tiene el menor nivel de
tabaquismo y consumo de alcohol, así como la menor cantidad de ingresos a
hospital por complicaciones de asma y enfermedad pulmonar obstructiva crónica
(EPOC).
DERRAMES
CEREBRALES E INFARTOS SE DUPLICAN
La OCDE advirtió que a pesar de que México es
la segunda economía de América Latina el país sólo invierte 5.8 por ciento del
PIB en salud, cifra “bastante inferior” al 9 por ciento del promedio de los 35
países miembros y la tercera más baja del grupo.
México es, con 75 años, el tercer país en
esperanza de vida de la OCDE, sólo por delante de Letonia (74.6) y Lituania
(74.5), según los últimos datos comparativos correspondientes a 2015 del
informe de la OCDE.
La organización señaló que la “pobre” calidad
de la atención médica en México se ve reflejada en bajos índices de
supervivencia ante afecciones como derrames cerebrales e infartos, con cifras
que duplican o más que triplican el número de decesos promedio en la OCDE.
A eso se une un incremento de la tasa de
mortalidad por diabetes, la falta de progresos con las enfermedades
circulatorias, y un número extraordinariamente alto de fallecimientos por
accidentes de tráfico y homicidios.
México también ocupa el último puesto en
mortalidad infantil, ya que los 12.5 fallecimientos en el primer año de vida
por cada mil nacimientos triplica con creces la media de 3.9.
También está en cola en lo que se refiere a
la diabetes, con una proporción de enfermos del 15.8 por ciento entre los
adultos que duplica ampliamente el 7 por ciento de la OCDE.
Uno de los principales factores que está
detrás es el sobrepeso, que afecta al 72.5 por ciento de los adultos mexicanos,
el porcentaje más alto del “club de los países desarrollados” (superior al 70.1
por ciento de Estados Unidos).
La diferencia salta a la vista si se compara
con la media del 53.9 por ciento en la OCDE, donde se dan casos virtuosos en
los dos miembros asiáticos: un 23,8 % en Japón y un 33.4 por ciento en Corea
del Sur.
(sinEmbargo)