Ángel Rafael Mtz. Alarcón / 27 de marzo de 2012
El presente conversatorio, su titulo es
tomado de una canción chilena, para denunciar a la dictadura del General
Augusto Pinochet quien gobernó entre los años de 1973 a 1990, la República de
Chile. Una de las dictaduras militar más crueles que haya existido en el
continente americano. Una dictadura que utilizo la fe católica del pueblo
chileno para justificar sus atrocidades ante la amenaza comunista. Tanto Pablo VI y Juan Pablo II, hicieron
críticas a dicho régimen, pero también se entrevistaron con el extinto
dictador, que por cierto admirado por Josefina Vázquez Mota, en lo económico.
En la primera visita de Benedicto XVI a nuestro país, es muy distinto al que
encontró su predecesor Juan Pablo II en 1979. Hoy técnicamente vivimos una
guerra entre el desorganizado gobierno y el crimen bien organizado. Cuantas
verdades se la ocultaran al vicario de Cristo en la tierra y cuantas mentiras
le dirán.
Han pasado 33 años de la primera visita
papal a México, en enero de 1979, Juan
Pablo II inicia la primera visita pastoral a nuestra nación. Eran los tiempos
de los gobiernos priistas más duros. José López Portillo y Pacheco, en una
entrevista acepta de autorizo a la
visita papal para cumplirle un deseo a doña Refugio su señora madre;
violentando todo el marco jurídico un estado laico como lo establecía la carta
magna de 1917. Logrando que uno de los políticos más brillantes del siglo XX,
como Jesús Reyes Heroles, secretario de la Secretaría de Gobernación cuando era
operativa y eficiente. Presente su renuncia ante la violación al Estado de
Derecho desde las Leyes de Reformas promulgadas por Benito Juárez García. Hasta
2002, fueron cinco las visitas del beato Juan Pablo II, sus últimas tres
visitas ya fueron en el marco de las reformas al artículo 130 constitucional,
donde se reconocían las existencia de las iglesias en la vida de la sociedad
mexicana. Hay que recordar que España y
Roma son los últimos estados en reconocer la independencia de México, el papa Gregorio XVI en el años de
1836. Por más de 134 años el Estado Mexicano no reconocía jurídicamente a
ningún credo religioso; pero la realidad el estado y las distintas iglesias,
mantenían relaciones, llamadas las famosas "tomas de chocolates"
públicamente nuestros gobernantes se declaraban ateo confesos, y en lo privada
fueron hombres religiosa, etc. Don múltiples las declaraciones de los
gobernantes mexicanos atacando a la iglesia católica apostólica y Romana, la
religión de la mayoría del pueblo mexicano.
Carlos Salinas de Gortari, presidente de
nuestro país entre los años de 1988-1994. Quien cometió el fraude electoral del
siglo XX. Durante su gobierno se dieron las más importantes reformas que
necesitaba el país, hubo quien las comparaba con reformas iniciadas por Mijaíl
Seeguivich Gorbachov, presidente de la extinta Unión de Repúblicas Socialistas
Soviéticas, entre los años de 1986 a 1991. Salinas de Gortari, consigue
reformar artículos que eran la joya del movimiento armado de 1910. El Arturo
3°, 27°, 130° constitucionales. El tercero sobre la educación, el ejido, que
dio la garantía al campesinado de obtener la tierra para trabajarla y heredarla
a sus hijos, y el finalmente formalizar las relaciones entre las iglesias; para
nuestra caso el catolicismo, la religión más practicada por la mayoría de la
población, según Calderón, 98 millones de mexicanos.
En 492 años de catolicismo en México, solo un
papa había visitado el territorio nacional, Juan Pablo II quien su propia
biografía de ejercer el sacerdocio en la Polonia comunista, con una población
profundamente católica, por eso se pudo identificar con la historia y pueblo
mexicano. El pasado viernes 23 de marzo, S.S.
Se convirtió en el segundo papa en visitar nuestra nación. Por razones
de salud de Benedicto XVI, no estará en la capital del país. Pero que mejor
sitio que el corazón del país, allá en la tierra bañada por la sangre de
católicos que ofrendaron su vida durante la persecución religiosa de 1926-1929.
Seguramente muchas cosas desconoce Benedicto
XVI de las realidades que vivimos como sociedad mexicana, pero también no
descarto que venga bien informado por las informes de la provincia eclesiástica
de México, su propia personalidad académica, tenga otra visión del país. El Santo
Padre, llega a México, con 60 mil muertos de ambos bandos de los delincuentes y
de las fuerzas de seguridad; como también de víctimas inocentes. La corrupción que ejercen todos los partidos
políticos. La cultura del narcotráfico ha permeado a la sociedad en todos los
niveles. La cultura del secuestro de las más diversas modalidades. EL lavados
de dinero producto de las finanzas de los delincuentes, vía casa de cambio.
Santo Padre miles de mexicanos han sido levantados para pedir rescates express.
Sería muy largo exponer todo la cultura de injusticias en nuestra sociedad. Lo
peor de todo que usted encontrara sindicatos blancos o charros.
Los políticos de acción nacional, salieron de
dobles morales, así como inexpertos en los asuntos de políticas públicas,
nepotismos, todo lo que los panistas
criticaron del PRI, lo está superando en la brevedad sin límite de tiempo. En
lo educativo, las plazas para docentes se heredan o se venden al mejor pujador,
sin tener el perfil. Los salarios en México son de ofensa, y así millones de
mexicanos son más que felices con seis mil pesos mensuales. El dipsomanía ha
aumentado con las mujeres, el catalogo
de drogas, prostitución, así como también de la trata de blancas con mujeres de
todas partes del mundo, que ingresan sin ningún control por partes de las autoridades migratorias. Sin
exponer todas las vejaciones que son víctimas de los centroamericanos que
cruzan nuestra nación. Santo Padre, en nuestra nación ser indígena es el sufrimiento
más duro que puede tener nuestros hermanos, por espacios de 492 años han sido
marginados como explotados; así también no hay respeto para la naturaleza, se
pueden talar miles de árboles, sin que la autoridad tome carta en el asunto.
Ser campesino también es de dolor, sin ninguna ayuda, más que ser movilizados
para los mítines de los partidos políticos, sin servicios básicos, por eso
abonan el campo para migrara las ciudades. Benedicto XVI, también es muy larga
como compleja la realidad que viven millones de mujeres: violencia, falta de oportunidades,
salarios diferenciados. Cárceles abarrotadas, controladas por los delincuentes.
Miles de niños y niñas que viven y trabajan en las calles, sin más oportunidad
que ingresar al crimen organizado; esos niños
no fueron invitados al balcón con usted, el pasado sábado por la noche.
Así también Santo Padre, los ministerios públicos se ejerce todas las
corruptelas que usted de pueda imaginar; donde la cultura del soborno como
práctica cotidiana.
En los tres órdenes de gobierno, federal,
estatal y municipal, el desvíos de recursos públicos para las campañas.
Millones de pesos puede moverse, sin acreditar hacia quien eran los
beneficiados, esos de los 25 millones de pesos fue cuento de niños.
También hay funcionarios del sector
salud, llegan a las doce horas del mediodía y salen tres horas más tardes, eso
sí dignos como buenos panistas. Sería muy
largo, seguir escribiendo todo lo malo que esta nuestra nación, son más
cortas las millas de vuelo entre Guanajuato a Roma que todo lo malo que tiene
en la actualidad el gobierno y la sociedad mexicana.
La insolencia del presidente Felipe Calderón de estar a su lado, quien
presumía de sus manos limpias,
hace seis años, hoy son sus manos ensangrentadas por el asesinato de 60 mil
seres humanos, que importa que sean mexicanos, narcos, marinos, policías,
soldados o víctimas inocentes, además como 20 mil desapariciones.
Lo único bueno que uno sus alumnos vive en
Xalapa, don José Benigno Zilli Manica, un extraordinario filósofo,
investigador, sacerdote y amigo, hombre de paz, amor y mucha sabiduría.