Zongolica, Ver. | 26 diciembre
de 2012
Tribuna Libre.- El campo requiere de programas
gubernamentales con menos “trabas burocráticas” que generen mayor rendimiento y
productividad, afirmó Erasmo Pérez García, presidente de la Vieja Guardia
Agrarista en la sierra de Zongolica.
Explicó que las reglas de operación que se
aplican en Pro Campo y el programa de
Renovación de Fincas Cafetaleras están plagados de “candados” burocráticos que
pareciera que los recursos autorizados por el Congreso de la Unión, nunca
llegarán a las manos campesinas.
Mencionó que debido a que el campo está
desalentado, muchos jóvenes y padres de familia tienen que emigrar hacia
ciudades fronterizas, o bien, buscar el “sueño americano” en el vecino país del
norte, donde arriesgan su vida por una oportunidad de trabajo.
El entrevistado explicó que esta región de
las altas montañas es cafetalera, sin embargo, con el actual precio del
kilogramo de café cereza de cinco pesos con cincuenta centavos no alcanza ni
siquiera para adquirir un kilo de maíz que vale 6.5 pesos, y mucho menos de
azúcar que se cotiza en 11 pesos y de frijol, que se vende en 19 pesos.
Señaló que los únicos beneficiados con la
caída del precio de este aromático son los acaparadores quienes compran barato
y lo comercializan a otros precios en el mercado nacional e internacional,
incluso en dólares y euros.
Hizo un llamado al presidente de la
República, Enrique Peña Nieto para que le apueste al campo, e incluso, tenga un
acercamiento permanente con los sectores del campo como sucedió en la época de
Luis Echeverría Álvarez, donde en las zonas campesinas e indígenas del país, se
abrieron las primeras redes carreteras y, en consecuencia, hacia la educación.
Finalmente hizo una propuesta a la Cámara de
Diputados para que se establezca como Ley que las autoridades municipales no
pinten los edificios públicos como palacios municipales de los colores de su
partido político, porque en el caso de Zongolica, cuando llegó el PAN, fue
pintado de azul; el PRI, tenía colores blanco y rojo, mientras que ahora que
gobierna el PRD, está pintado de amarillo, por lo que recomendó que haya un
color institucional sin fines partidistas.