Dios me puso en éste camino: Duarte
Religiosos piden sabiduría para JDO
Nemi: pocos periodistas asesinados en Veracruz
Marco Antonio Aguirre Rodríguez
| 28 agosto de 2015
Tribuna Libre.- Durante la Edad
Media la disputa del poder entre la entonces omnipresente Iglesia Católica y
los reyes de cada lugar, fue dando forma a lo que se denominó la doctrina del
“Derecho Divino de los Reyes”, en la cual los monarcas sustentarán que la
posición se las otorgó Dios de forma directa y, por lo tanto sólo Dios podía
quitarlos.
Javier Duarte se
siente imbuido de ese Derecho Divino, tanto que durante una reunión con
organizaciones religiosas afirmó:
“Dios fue quien me
puso en este camino” (http://goo.gl/cB6HwE ).
El mismo principio
que los reyes de la Edad Moderna enarbolaban ya en total plenitud, para
soportar su estancia y que expandían entre los pueblos para que los súbditos y
gobernados aceptasen, proclamasen y hasta impulsaran sus medidas.
(¿Su Excelencia?)
Javier Duarte le dijo a los líderes religiosos: “lo que le pido (a Dios) es que
me ilumine y que me dé fortaleza para seguir llevando a cabo la responsabilidad
que tengo”.
Y al igual que los
reyes de la Europa de la Edad Moderna, obligaban a que se difundiese desde los
templos el carácter divino que autoproclamaban de su mandato, así Javier Duarte
le dijo a los líderes religiosos: Espero, y se los pido encarecidamente: sean
portavoces de multiplicar este mensaje a través de las diferentes iglesias y
congregaciones religiosas”.
Su postura inicial
de ese evento, “porque yo creo en Dios”, quedó plasmada, junto con su
afirmación de que Dios lo puso en la posición que ahora tiene.
(Pregunta al
margen, y sólo para moderar, ¿su operador electoral para que se le
contabilizaran los votos suficientes para declararlo triunfador y quien lo
designo sucesor en el gobierno del estado no fue una persona bien específica?).
Al iniciar el
evento se dio una oración, en la cual el encargado de impartirla le pidió a
Dios por aquello que los líderes religiosos y sus congregaciones consideran que
debe existir. Por eso, pidió que a Javier Duarte Dios le dé “el entendimiento y
la sabiduría” para que él siga gobernando éste estado tan importante.
El clamor hacia
Dios fue: “Ayúdalo, padre, dale tu bendición y dale tu respaldo”,
También se rogó
por los integrantes del gabinete de Duarte, para que ellos “puedan desempeñar
su trabajo con la claridad, con la capacidad, con la inspiración que solamente
tú puedes darles”.
La intención de
este ruego fue que “ellos puedan trabajar con rectitud, con justicia, con
honestidad, con transparencia”.
El encargado de la
petición divina expresó lo que los líderes religiosos en Veracruz y sus
comunidades anhelan para Veracruz: “Queremos que nuestro estado disfrute de sus
finanzas sanas, queremos tener seguridad, queremos que haya generación de
empleo”.
Y en esa solicitud
a Dios se insistió en que “todo esto podremos tenerlo si tu les das el
entendimiento, la sabiduría, la capacidad”, a Javier Duarte y a su gabinete (https://youtu.be/-6BpqWalpBY ).
Así pues, como en
la Edad Moderna, quien se erige como el rey, el que manda sobre todo y sobre
todos, asume y proclama el carácter divino de su posición y manda a los
dirigentes religiosos a que así lo pregonen para que sea enaltecido por el
pueblo, por los súbditos, y nunca atentado contra su grandeza.
Quien se siente el
gran místico del estado lo dijo.
Su expectativa es
que los terrenales lo asumamos.
NEMI: POCOS
PERIODISTAS ASESINADOS EN VERACRUZ. Juan Antonio Nemi Dibb es ahora el
secretario técnico del Consejo Estatal de Seguridad Publica, y en ese carácter
(¿o será en lo personal?) califica de “injustos” a quienes aseguran que
Veracruz es un estado “mata periodistas”, porque son 16 los asesinados y en el
estado existen –eso dijo- 8,000 personas dedicadas a esta actividad (Demerita
Nemi Dib los asesinatos a 16 periodistas veracruzanos publicado en AGN
Veracruz).
En cambio mencionó
que durante éste año son 23 los policías fallecidos en “cumplimiento de su
deber” (presumiblemente –debemos anotar-, porque desconocemos las condiciones
en que se dio el fallecimiento y para tener la certeza habría que revisar caso
por caso).
Pues bien, según
esto, para que Veracruz se considere un lugar peligroso para el ejercicio del
periodismo, cada año tendrían que asesinar, por lo menos a 10 periodistas…
bueno, a 11, para que la proporción sea mayor que la de policías fallecidos.
Según los últimos
números, en el estado existen 20,000 policías y si el número de fallecidos es
de 23, significa que la proporción es de 1.15 por cada mil (este es un
ejercicio nada más, para darle equilibrio a las comparaciones de Nemi).
En ese sentido, si
los periodistas son 8,000, con esa proporción de 1.15 los difuntos deberían ser
9.20.
Así pues, con 10
periodistas ya sería una proporción mayor, pero con 11 la diferencia estaría
más marcada.
¡Pero claro que
esto no debería de ser así!.
Ni siquiera se
debería de plantear una comparación de este tipo.
Las vidas humanas,
vidas humanas son.
Los periodistas
asesinados implican en si mismos un atentado a la libertad de expresión, del
ejercicio periodístico, hasta que se demuestre lo contrario.
¿Dos ejemplos
claros?. Moisés Sánchez y Gregorio Jiménez.
Los señalamientos
de que los periodistas asesinados estaban involucrados con la delincuencia, son
nada más justificantes ante la ineficacia para resolver los crímenes, hasta que
se demuestre su culpabilidad. Incluso en el caso del excorresponsal de Televisa
en Orizaba, Juan Heriberto Santos. “El muchacho –periodista- de Orizaba que
estaba a las cinco de la mañana acompañado con un grupo de delincuentes ¿Murió
por periodista?”, acota en su declaración Nemi Dibb.
En ese juego de
especulaciones, don Juan Antonio ¿por qué mejor no decimos que estaba haciendo
un trabajo de encubierto para entrar en la organización criminal y develar todo
su entradamado?. Y de hecho, así, ¿porqué no añadimos que lo mataron por eso,
por querer evidenciar las redes con los grupos de poder político y económico
que tienen sus asesinos?.
Es lo mismo, es
especulación.
Lo que si es un
hecho, para mí y para muchos, es que tanto periodistas, como policías, como
ciudadanos de a pie, han muerto y han sufrido porque vivimos en un estado que
ha sido omiso en procurar la seguridad pública que le corresponde dar a todos
los habitantes.
¿Cuántos
asesinatos hubo el año pasado en Veracruz, y en cuántos casos se detuvo a los
autores?, ¿y cuántos de esos fueron llevados a juicio?, ¿y a cuántos se les
dictó sentencia condenatoria?. Usted debe de conocer esos datos.
¿O usted puede
decir, en sentido llano, que si vivimos en un estado en donde existe paz y
procuración de justicia?.
Sin pretextos, sin
comparaciones, sin proporcionalidades, ¿puede usted decir que así es?.
Todo esto dicho
con todo respeto para ti, tocayo, pero difiero profundamente de la posición del
funcionario público.
O también podemos
decir que esta es la posición de un terrenal planteada ante un místico del
poder estatal.