México, D.F. | 12 septiembre de 2015
Tribuna Libre.- “¡Les voy a hablar
al chile hijos de su puta madre! Son 600 tablas (pesos) si no, pues ahorita les
pongo un kilo de coca y se los carga la ver &%$”, les dijo un hombre que
identifican como chofer de la policía municipal de Arriaga.
Ese fue el primer
desengaño que sufrió Edwin, un joven migrante originario de El Salvador, luego
que logró obtener una visa humanitaria que, en teoría, le permitiría transitar
por México sin tener que sufrir el acoso y la extorsión por parte de agentes
del Instituto Nacional de Migración (INM), Ejército Mexicano y policías de los
tres órdenes de gobierno.
Edwin había
pensado que la pesadilla había terminado tras el asalto y vejaciones que sufrió
apenas entrando a México, por la frontera con Guatemala. A raíz de estos hechos
se animó a presentar una denuncia penal formal contra los agresores, y tramitó
una visa humanitaria, misma que el INM no le pudo negar, ante la evidente violación
a sus derechos humanos.
El migrante se fue
a recuperar de los estragos del asalto al albergue de Arriaga. De ahí salió la
noche del miércoles, en un autobús de pasajeros, ya con su visa humanitaria en
la mano, y la certeza de que su viaje sería a partir de entonces, en mejores
condiciones de seguridad.
Pero saliendo de
la ciudad de Arriaga, apenas en el entronque de la carretera federal, Edwin
tuvo su primera decepción. El autobús en el que viajaba fue interceptado por un
grupo de personas, entre quienes identificó a un chofer de la policía municipal
de Arriaga.
Fue esta persona
quien les exigió 600 pesos a cambio de no “sembrarles” droga. Tuvieron que
aceptar él, y otro grupo de migrantes con los que iba.
Apenas en agosto
pasado, la directora del “Albergue para Migrantes Jtatik Samuel Ruiz” en
Palenque, Nelly Rios Ruiz, denunció 10 casos concretos de extorsiones se han
registrado en contra de migrantes por parte del Ejército Mexicano, en esa
región el norte del estado colindante con el vecino estado de Tabasco.
Ese mismo mes, el
sacerdote Alejandro Solalinde, fundador del albergue Hermanos en el Camino de
Ixtepec Oaxaca, denunció la existencia de una red de corrupción al interior de
las estaciones migratorias en Chiapas que involucra al delegado estatal Jordán
Alegría Orantes, en extorsiones a migrantes cubanos y a sus familiares que se
encuentran en Estados Unidos. Los casos también fueron debidamente
documentados.
El caso de las
extorsiones por parte de policías municipales, estatales y federales también va
en aumento.
Edwin lo sufrió
apenas éste jueves 10 de septiembre. En entrevista, narra que luego de entregar
los 600 pesos al chofer de la policía municipal de Arriaga, subió de nuevo al
autobús, pero kilómetros más adelante fue detenido en un retén de la Policía
Federal.
“Me pidieron
identificarme, les saque mi visa y casi me la hacen leña. Me la rompieron y
dijeron que era falsa. Yo le dije al policía antes que me la sigas jodiendo
llama a migración y que ellos verifiquen.´ Pero me contestaron: Hijo de tu puta
madre, no vas a venir a decirme como hacer mi trabajo”.
El policía le
quitó a Edwin su celular, pero finalmente le dejó continuar su viaje. Ahora él
se encuentra ya en San Luis Potosí, con la certeza de que en México, “todos nos
quieren joder”.
Esta misma mañana,
Deyra Elizabeth, mujer migrante originaria de Honduras a quien la Procuraduría
de Justicia de Chiapas injustamente encarceló cuatro años, y acusó del delito
de trata de personas, denunció que cuando iba pasando por el retén que
militares tienen en el municipio de Tonalá, los uniformados les quitaron a ella
y sus compañeras su visa de residente que lograron el INM les diera tras
reconocer su injusto encarcelamiento.
“Dicen que están
vencidas (las visas). Cómo es posible que nos hagan esta mierda. ¿No saben que
es un delito que nos están haciendo? Nosotros tenemos permiso”, dijo en el
mensaje que alcanzó a enviar.
Carlos Bartolo
Solís, director de la Casa del Migrante “El Hogar de la Misericordia” de
Arriaga, Chiapas, asegura que a diario recibe denuncias de migrantes que son
extorsionados por policías, agentes del INM y militares.
“Es una gran
mentira del gobierno cuando dice que Programa Frontera Sur –que se implementó
desde agosto de 2014- es para proteger a los migrantes y hacer un paso seguro.
Lo que están haciendo es endurecer la política de contención de la migración.
Ahora no quieren dejar pasar a nadie, ni siquiera a quienes tienen permiso para
transitar en el país”, señala.
Refiere que son
pocas las denuncias que logra hacerse oír, como la de Edwin o Deyra. “La
mayoría de las y los migrantes se aguantan los abusos y las extorsiones en
silencio. Pagan con dinero, con su cuerpo, su dignidad y hasta su vida el
querer cruzar por México”.
Refiere que con el
Plan Frontera Sur, que conlleva la contención de migrantes, los únicos que
salen ganando son Estados Unidos, y los gobiernos y autoridades corruptas. (http://ciudadania-express.com/
)