*Sin distinción de siglas partidistas, la idea es
garantizar el orden y no tener miedo al “costo político” que eso les pueda
generar, afirmó el diputado José Ramón Gutiérrez de Velasco
Xalapa, Ver. | 07 septiembre de 2015
Tribuna Libre.- Sin distinción de
siglas partidistas, los presidentes municipales de Veracruz deben aplicar el
nuevo Reglamento y la Ley de Tránsito y Seguridad Vial, pues como autoridades
deben tomar decisiones que contribuyan a garantizar el orden y no tener miedo
al “costo político” que eso les pueda generar, afirmó el diputado José Ramón
Gutiérrez de Velasco Hoyos.
Como presidente de
la Comisión de Seguridad Pública de la LXIII Legislatura del Estado, reconoció
que “los ayuntamientos tienen autonomía para decidir si aplican o no el
Reglamento, pero si se resisten, las autoridades deberán asumir las
consecuencias del desorden vial, accidentes y el malestar que eso provocaría
entre los ciudadanos”.
Dijo que quienes
más se quejan de este ordenamiento son conductores a quienes les gusta
infringir la ley, que hablan por teléfono o mandan mensajes por su celular
mientras manejan: prácticas que aumentan en cuatro veces el riesgo de algún
percance.
“Otros inconformes
–continuó– son quienes se pasan los altos o manejan ebrios y los taxistas que
conducen como locos. Porque los ciudadanos que piden orden no protestan; por el
contrario, avalan la normatividad vigente”.
Consideró que a
los presidentes municipales les da miedo aplicar el Reglamento porque piensan
que tendrá algún “costo político”, que la gente se va a manifestar: “Ellos
deben contribuir a poner orden y no es para que les tiemblen las canillas, o la
mano, al tomar decisiones que garanticen la seguridad o integridad física de la
población”.
A manera de
ejemplo, José Ramón Gutiérrez de Velasco citó que en otras partes los
ciudadanos se portan bien, porque saben que existen multas que pueden afectar
su bolsillo y no pueden evadir las sanciones, “como muchas veces ocurre aquí”.
El Diputado
lamentó que existan personas que sin deberla ni temerla son víctima de algún
accidente vial, y para que se le repare el daño en ocasiones pasan años. “Lo
peor es cuando pierden la vida o sufren alguna afectación permanente. De
seguro, con la aplicación del Reglamento se reducirán los percances”.