*Morena ¿una sorpresa para la gubernatura?
*La impopularidad de Duarte arrastra al PRI
*Xalapa urbano, distrito complicado para todos
Marco Antonio Aguirre
Rodríguez | 16 febrero de 2016
Tribuna Libre.- Este lunes 15 de
febrero, quien será el tercer contrincante fuerte de la elección a gobernador
de Veracruz, se registró ante su partido.
Cuitláhuac García
Jiménez acudió ante la Comisión Nacional de Elecciones a inscribirse como
precandidato al gobierno de Veracruz, por el Movimiento de Regeneración
Nacional (Morena, como es más que popular el partido).
Será el único.
Rocío Nahle, la diputada por Coatzacoalcos, finalmente se quedó como
coordinadora de la bancada federal de su partido; alguien debió convencerla
para que dejase de insistir en que se inscribiría como precandidata, como era
su intención.
Cuitláhuac García
pidió permiso para dejar la curul de diputado federal que tiene, igual que hizo
Miguel Ángel Yunes, de la misma forma que Héctor Yunes solicitó licencia a su
cargo de senador de la república.
Ellos son los tres
contrincantes fuertes para la gubernatura de Veracruz.
La contienda
comenzó con Héctor Yunes arriba.
Pero Morena podría
convertirse en toda una sorpresa, al grado de que el día de la elección pueda
estar peleando codo a codo la gubernatura.
En la elección del
2015, prácticamente de la nada, sólo con el arrastre de Andrés Manuel López
Obrador y la inconformidad contra el gobierno de Veracruz, Morena se llevó el
12.26% de la votación emitida en el estado; superó con mucho al inflado Partido
Verde y dejó atrás al desinflado PRD.
Hoy con la
permanencia de la campaña de Andrés Manuel López Obrador y la inconformidad
creciente hacia el gobierno de Javier Duarte, hace que los cálculos de
intención de voto efectiva hacia Morena, sin candidato aún, sean del 15%.
De hecho el 16 de
diciembre la encuestadora BGC abrió una medición realizada en el estado, en la
cual se mencionaba que el 10% de quienes decían estar dispuestos a votar en
este 2016 para la elección de gobernador lo harían por Morena.
No había candidato
aún.
Hace un año,
cuando la elección federal para diputado arrancaba, la intención de voto para
Morena estaba por abajo del 7% y crecieron hasta el 12.16% el día de la
elección.
Entonces, si la
plataforma de Morena hoy es más alta, la probabilidad de que crezca más,
igualmente es mayor.
Cuitláhuac García
es muy poco conocido en el estado, pero esto mismo le abre la posibilidad de
forjarse una personalidad electoral a partir de ahora y al comenzar a actuar
como precandidato.
La misma medición
de BGC mostró un descenso en la intención del voto hacia el PRI, entre abril y
diciembre del año pasado, la mayor parte de la cual se fue al rango del no saber
por quien votar.
Pero también
mostró como la popularidad de Javier Duarte es baja, bajísima, teniendo un 5.1,
después de que alcanzaba 5.9
Los índices de
aceptación hacia el gobierno de Javier Duarte arrastran a la baja el voto a
favor del PRI.
Un solo dato
muestra la percepción de los electores. Ante el planteamiento “Comparada con la
situación que tenía hace un año Veracruz ¿cómo diría usted que está la
situación actual del estado, mejor o peor?.
El 62% dijo que
estaba peor y sólo el 1% afirmó que era mejor.
Todo esto se
conjuga y puede hacer crecer a Morena.
Ahora, ¿podrá
capitalizar Morena el descontento de la mayoría de la población y atraer los
votos suficientes para ganar?.
Morena arranca
también con el inconveniente de que se ha reafirmado entre el electorado la
percepción de que Cuitláhuac García puede ser un candidato impulsado por el
gobierno del estado para contrarrestar la tendencia hacia Miguel Ángel Yunes.
Manuel Huerta
Ladrón de Guevara, coordinador del Comité Directivo Estatal de Morena, dice que
ese fue un mito que se comenzó a construir desde que Fidel Herrera filtró una
supuesta platica en la que aseguraba tener a este partido en la bolsa.
Después Javier
Duarte en diversas reuniones con periodistas y políticos repitió una especie
similar, en el sentido de que se apoyaría a Cuitláhuac para que contrarrestase
a Miguel Ángel como candidato opositor.
Manuel Huerta
enfatiza: Es mentira que tengamos relación con Javier Duarte y la muestra son
las veces que hemos pedido su salida del gobierno del estado.
De hecho, apunta
que ya solicitaron a su fracción en la Cámara de Diputados federal que busquen
acelerar el proceso para que se le haga juicio político al gobernador de
Veracruz.
Hoy Cuitláhuac
García cuando habla de su campaña menciona que va a ponderar el ahorro en los
gastos del gobierno del estado, para solventar las deudas que dejará la actual
administración.
¿Podrá superar a
Miguel Ángel?, ¿logrará ganarle a Héctor?.
XALAPA URBANO,
DISTRITO COMPLICADO PARA TODOS. Cuitláhuac García ganó la diputación en Xalapa,
contra una Elizabeth Morales que tenía una imagen sumamente desgastada.
Uriel Flores
Aguayo, el anterior diputado federal, ganó la elección del mismo Xalapa urbano,
frente a un Reynaldo Escobar al que ya nadie la creía.
Ahora ese mismo
distrito recompone por completo su posibilidad de triunfo.
Todavía no hay
candidatos, pero si aspirantes a la nominación.
Los primeros que
se han lanzado son los perredistas Manuel Bernal y Uriel Flores Aguayo, los que
buscan la nominación por la alianza PAN-PRD.
Manuel Bernal
tiene una terrible imagen política, después de imponer con el PRD aliado al
gobierno de Javier Duarte a su esposa Julia Velázquez Dávalos y a su hija
Teresa Bernal Velázquez .
Uriel Flores
Aguayo en cambio ha construido una imagen de congruencia con la izquierda, sin
sometimiento al poder del gobierno del estado; en su gestión como diputado
federal obtuvo recursos para el ayuntamiento de Xalapa, para la realización de
obra pública, sin hacerse aliado del alcalde, si no tan sólo por compromiso con
la ciudad.
En Morena hay más
de dos apuntados, porque creen que puede repetirse el fenómeno que le permitió
a Cuitláhuac García ganar: el voto de descontento contra el gobierno.
Por el PRI el
único que se anota, el único que ha sacado valor para jugar por un distrito más
que complicado para este partido, es Rodrigo Montoya Rivera, quien va con el
apoyo del alcalde Américo Zúñiga, aprovechando el buen nombre que este ha
construido; esto le permite actuar con prontitud cuando le hacen peticiones.
Rodrigo Montoya
también pondera que la suya puede ser una candidatura para jóvenes por su
partido, a quienes le toca una parte de las mismas.
Su discurso lo
sustenta igualmente en ser joven y el no tener señalamiento alguno de corrupción,
ponderando que esa sería su forma de trabajo.
Si Rodrigo Montoya
logra convencer a los jóvenes puede tener oportunidad de triunfo en este que ha
sido un distrito donde la oposición parece haber sentado las bases.
Y si le ponen a
Manuel Bernal por el PRD-PAN sus posibilidades puenden crecer.