* Subdirectora de Inspección y Notarías * Liz
Yunes, la notaría 8, Amadeo, el procu de Javier Duarte * Mónica Robles ya
succiona al candidato * Kalimba, al acecho del pupilo de Marcelo *
Morena o UCISVVER segunda temporada * Revientan perredistas elección en
Cosolea * Un Tapia para candidato
Mussio Cárdenas Arellano | 10
marzo de 2016
Tribuna Libre.- Liliana Yunes
Yunes —Liz Yunes— es un hilo sensible, el más fino, entre Héctor Yunes Landa,
su padre, y Javier Duarte. Sirve al grupo en el poder y con un cargo de alto
nivel exhibe, evidencia, que el precandidato del PRI duartista sí es.
Pregona Héctor
Yunes que al gobernador de Veracruz lo habrá de pasar por la ley, que hable y
explique el destino de los 35 mil 400 millones de pesos de origen federal, que
de la cero tolerancia se pasará a la cero impunidad. Y Liz Yunes es pieza del
duartismo.
Dice que las
obsesiones están en su primo Miguel Ángel Yunes Linares, precandidato del
PAN-PRD al microgobierno de dos años, y en el mismo Javier Duarte, y que él le
dará cauce a Veracruz. Y Liz Yunes incrustada en el gobierno duartista.
Si por querer un
Veracruz más seguro es ser incómodo, expresa Héctor Yunes en su balconeo en
redes sociales, sí, es incómodo. Y Liz Yunes en la nómina duartista.
Proclama Héctor
Yunes que como diputado local y senador ha sido crítico del gobierno de
Veracruz y eso lo ha vuelto incómodo. Y Liz Yunes apretando notarios en toda la
entidad por orden de la pandilla duartista.
Si querer un
Veracruz sin corrupción y pelear por los veracruzanos es ser incómodo, se ufana
Héctor Yunes, sí, es incómodo. Y Liz Yunes en la cúspide del poder, en la
órbita de Javier Duarte.
Nada incómoda, en
cambio, la hija del precandidato del PRI es funcionaria de alto rango en la
cueva de Javier Duarte y los 40 ladrones, subdirectora de Inspección y Archivo
General de Notarías en la Secretaría de Gobierno, ahí por donde han pasado
ilustres duartistas como Sor Buganza, alias Gerardo Buganza Salmerón, el
cordobés errante desterrado a la Secretaría de Infraestructura y Obras
Públicas, devuelto a la Segob y echado a una candidatura independiente a
gobernador que fue una trampa para deshacerse de él.
Pasó por la Segob
Erick el Z, alias Erick Lagos Hernández, el hijo político de Fidel Herrera, tapadera
del ex gobernador cuando presidió la Comisión de Hacienda en el Congreso de
Veracruz, en los días en que Héctor Yunes era líder cameral y el atraco a las
arcas trasponía esa aduana porque entre los fidelistas la complicidad es
virtud.
Algo mueve a Erick
Lagos. Fidelista como es, muta a hectoryunista pues en el fondo, como proclama
Yunes azul, Héctor y Fidel y Duarte son los mismos y son lo mismo. Salada la
Secretaría de Gobierno, hoy tiene a su peor ejemplar —y eso que superar a Erick
el Z es toda una proeza—: Flavino El Oaxaco, alias Flavino Ríos Alvarado,
detractor de Javier Duarte en los albores del sexenio, el que mostraba a quien
fuera que las cifras del gran peculado fidelista yacían en el Plan Veracruzano
de Desarrollo, de la autoría del gordobés, y ahí constaba que no eran 3 mil 500
millones como decía Fidel sino 34 mil millones.
Ya se ve que la
formación académica no exime de caer en el fango. Liliana Yunes —Liz Yunes— es
abogada por la Universidad Anáhuac —no es UV— con maestría en Asesoría de
Imagen y Consultoría Política por la Universidad Pontificia de Salamanca.
Rediez.
Tiene en el
duartismo próspero su hábitat. Con los hijos políticos del gobernador convive y
a ellos sirve.
Provoca risa,
pues, escuchar al precandidato del PRI al microgobierno de Veracruz, Héctor
Yunes, en su proclama de cárcel a Javier Duarte, que nadie se va liso e impune,
que el gordobés aclare dónde están los 35 mil 400 millones que la Federación
envió a Veracruz. Sería tanto como enjuiciar de paso a su retoño.
Y suelta: “Tengo
la solución para los problemas de Veracruz, incluida la corrupción. Veracruz
necesita un gobernador, no un celador; el odio no es un buen consejero. Después
de la justicia, daremos tranquilidad a los hogares y bienestar a los
veracruzanos”. Ajá. Y Liz Yunes formando parte de la pandilla duartista.
Cuenta su
currículum que Liliana Yunes fue abogada auxiliar en la notaría número 8 de
Xalapa, otro reducto duartista. Y resulta que esa notaría es la del hoy líder
ilegítimo del PRI en Veracruz, Felipe Amadeo Flores Espinoza, titular de ella
por 24 años, amigo y socio político de Héctor Yunes, ambos en la tercera edad
priista.
Ahí laboró Liz
Yunes, en el feudo de Amadreo, que luego fue a parar como procurador de
Veracruz, quizá la peor etapa de su vida política intentando maquillar el
desastre del aparato judicial de Javier Duarte, quemándose las manos con los
crímenes de periodistas, imputándole a unos ligas con los narcos y malosos, a
quienes, según su versión, no respaldada por la PGR, les pedían el favor de
ejecutar a otros colegas.
¿Algún otro Flores
con rasgos duartistas en la notaría 8? Sí, Felipe Amadeo Flores Villalba, hijo
de Flores Espinoza, primero notario adscrito, titular desde el 18 de febrero de
2010 hasta que Javier Duarte lo nombró director jurídico de la oficina del
gobernador.
Son duartistas los
Amadeos, encubiertos y cobijados por Javier Duarte, que hizo al vástago de
Flores Espinoza magistrado en el Tribunal Superior de Justicia, sin méritos,
sin trayectoria judicial, sin prestigio, irritando a muchos, provocando el
repudio de juristas y del sector más íntegro del Poder Judicial.
Trapecistas del
poder, los hectoryunistas vienen pujando por el poder, simulando que entre
ellos y el duartismo no hay química y que ahí se aplica la ley física de que el
agua y el aceite no se mezclan.
Incómodo dice ser
el precandidato el PRI, luego que Javier Duarte lo instara a criticarlo para
simular un deslinde. “Yo mismo le recomendé que empezara a criticarme”, reveló
el gordobés a Imagen de Veracruz, periódico del Clan de la Succión, los Robles,
José Pablo e hijos, y Mariú y los otros hijos.
Incómodo es,
alardea Héctor Yunes en su spot en Facebook, pero muy cómoda se siente su hija
duartista, Liliana Yunes, en el seno del gobierno de Javier Duarte, en la subdirección
que le sirve para reventar notarios rebeldes, con faltas administrativas, con
quejas reales o inventadas, a quienes la investigación los deja al aire.
A la otra mafia,
los notarios afines, la Secretaría de Gobierno ni los toca. Flavino Ríos es notario
9 en Minatitlán. Iván Hillman, ex alcalde de Coatzacoalcos, es notario 5 en
Coatzacoalcos. Juan Hillman Jiménez, su padre, y Yohan Hillman Chapoy, su
hermano, son notarios 4 y 2 luego de una permuta por aquello de que el más
joven tiene la misión de cubrir el lodo acumulado del papá. Yossy Juventina
Félix Porras, notaria 29 en Minatitlán es hija de la ex alcaldesa Guadalupe
Porras David.
Liliana Yunes fue
llevada al baile cuando acudió con la representación de su padre, el entonces
senador en funciones Héctor Yunes Landa, a un evento en Nuevo Atoyac, el 13 de
junio de 2015, donde había un presunto zeta.
Circuló la
fotografía en internet, en la cuenta de Alfredo Gutiérrez en Facebook, con
alertas hacia el hoy precandidato del PRI y su hija Liz, quien aparece junto al
líder sindical cañero, Modesto Trujillo Herrera, cacique de la Sección 23, con
sede en El Potrero.
El enlace con los
zetas, según Alfredo Gutiérrez, es José Francisco Camacho León, alias Pepe
Gallina, y es chofer del líder cañero. Presuntamente en el evento había dos
zetas más. Días antes una acción policíaca los puso en la cárcel, pero horas
después abandonaron la prisión.
Liz Yunes se
excusó. Dijo no saber quién es Pepe Gallina. “Fui en representación de Hector
Yunes Senador de la República, a darles un saludo a todos los obreros cañeros
que celebran el fin de la zafra”, señaló.
Luego la frase con
que se exime:
“Desconozco quien
sea Pepe Gallina y desconocemos sus cartas de buena conducta”. (Verhttps://www.facebook.com/permalink.php?story_fbid=120330454965955&id=100009670026449&pnref=story).
Duartista, Héctor
Yunes recluta a lo más granado de la fidelidad y las infanterías ligadas a
Javier Duarte. Una de ellas, Mónica Robles Barajas de Hillman, diputada local y
embajadora del Clan de la Succión, que le debe su arribo al Congreso de
Veracruz al gobernador.
Succiona a placer
Mónica Robles, pues le viene de estirpe, parafraseando a Fidel Herrera, pillado
desde “la plenitud del pinche poder”, en la campaña de 2010, su voz en audios
que retrataban el quién es quién en el uso de los recursos públicos para
arrebatar elecciones, el quién es José Pablo Robles Martínez, que lo mismo
mamaba de Javier Duarte que mamaba de Yunes Linares, vía publicidad y chayote.
Asume la señora de
Hillman la coordinación de Agenda Política y Social de las Mujeres, quizá
confiado Héctor Yunes en el poder de convocatoria de Mónica Robles, que es
igual a nada, repudiada por todas las corrientes del PRI, sobre todo el
marcelismo al que el precandidato le apuesta para que le genere votos en el sur
de Veracruz; en su liderazgo en el Partido Verde en Coatzacoalcos con sus 84
militantes reales, hasta que le fue arrebatada la afiliación para evitar una
debacle mayor, y puesta en manos de Tony Macías, el suegro incómodo del
gobernador Javier Duarte.
Horas antes del
nombramiento hectoryunista, el portal Plumas Libres daba santo y seña,
documentos en mano, de la cuota de publicidad para Diario del Istmo, otro medio
del Clan de la Succión, del que Mónica Robles fue presidenta del Consejo de
Administración, poco más de 136 mil pesos al mes pagados por el ayuntamiento de
Minatitlán.
Pago por callar,
acusa Plumas Libres, mientras a Minatitlán lo devora la inseguridad y el mal
gobierno, los secuestros, el levantón, los muertos ejecutados por el crimen
organizado. Y Diario del Istmo, la voz sin libertad, calla.
Escadalazo, pues,
para la diputada Mónica Robles, la misma que tras hablar en tribuna del
Congreso de Veracruz soltó un “creo que estoy un poco cruda”, ahora exhibida
por el lucro con la información, el silencio ante el desvío de recursos, el
engaño del tesorero municipal, Saúl Wade León, el alcalde real de Minatitlán, a
la Auditoría Superior de la Federación, simulando que hace obra, desapareciendo
147 millones de pesos de origen federal.
Fidelista y
duartista, Mónica de Hillman llegó al Congreso de Veracruz con la bendición de
Javier Duarte, pactando con el ex delegado de Sedesol federal, Marcelo Montiel
Montiel, y luego rompiendo alianzas y vapuleando al marcelismo.
¿Y la diputación?
Esa puede esperar. Se une Mónica Succión al clan duartista con el que Héctor
Yunes como precandidato intenta retener el poder en Veracruz y proseguir la
quiebra financiera y el baño de sangre.
Lo que es el arte
de la maroma. Del regazo de Pepe Yunes salta Mónica Robles al pesebre de Héctor
Yunes. Y el senador originario de Perote finalmente se la sacudió.
Y Marcelo Montiel
pepenado votos para que la alcaldía se la entregue Yunes Landa a los Robles. Lo
que es la decadencia.
Hilo sensible
entre Héctor Yunes y Javier Duarte. Hilo fino el que representa Liliana Yunes
Yunes, mejor conocida como Liz Yunes.
¿Alguna duda?
Héctor Yunes y su hija duartista.
Archivo muerto
Se sacude el OPLE,
su depuesto secretario ejecutivo, Víctor Hugo Moctezuma Lobato, toda la
estructura electoral por el ahogamiento económico y sus ejecutivos mañosos y
tramposos, algunos sin experiencia alguna, borregazos del gobernador Javier
Duarte, y aquí, en el distrito 29, Kalimba ni se inmuta. Víctor Cruz Romero
sigue su labor de enlace administrativo, el que lleva la marcha del órgano
electoral, el que controla los recursos —los pocos que aterrizan— y de paso
atesora toda la información interna de la elección y la entrega a su grupo
político, el ivanista. A diario acude Kalimba, alias Víctor Cruz, al edificio
Mohill, centro de operaciones de la corriente priista jefaturada por el ex
alcalde Iván Hillman Chapoy, que esta vez tiene todo para reventar al cuasi
candidato marcelista, Víctor Rodríguez Gallegos, y cobrar así viejas afrentas,
entre ellas una derrota electoral en 2009, cuando Iván El Terrible fue obligado
primero a reconocer a Marcelo Montiel como el mejor alcalde de Coatzacoalcos en
los últimos tiempos y luego a morder el polvo y ver frustrado su sueño de ser
diputado federal, aplastado en las urnas con el voto de castigo del marcelismo.
Kalimba no es un enlace neutral. Es priista. Es ivanista. Es el que va a sepultar
a Víctor Rodríguez… ¿Morena o UCISVVER segunda temporada? Se unen a Manuel
Huerta Ladrón de Guevara, líder estatal del partido del Pejemesías López
Obrador, Fidel Robles Guadarrama, diputado local; Rafael Carvajal Rosado,
representante del PT hasta hace unos días ante los órganos electorales —antes,
en 2000, lo fue del PAN— y Benito Soriano Aguilera, tres veces regidor en
Coatzacoalcos y operador de la campaña de la hoy diputada federal, Rocío Nahle
García. Huerta, Robles, Carvajal y Soriano proceden de la Unión de Colonos
Inquilinos Solicitantes de Vivienda en Veracruz, a la que también perteneció
Gloria Rasgado Corsi, y que sirviera de plataforma para luego irrumpir en el
Partido de la Revolución Democrática. Así pues, el Movimiento de Regeneración
Nacional viene a ser UCISVVER segunda temporada… De vuelta a lo suyo, roban
urnas los perredistas en Cosoleacaque, se confrontan y así invalidan la
elección interna en el distrito 27. Nadie de los contendientes por la
candidatura a diputado local figura en el tablero electoral de Rogelio Franco,
ni del PRD nacional. Seguro habrá consenso en el seno de la alianza “Unidos
para Rescatar a Veracruz” y el candidato será un externo, un no militante del
PRD. De plácemes, pues, en la familia Tapia…