*Los
restos, al parecer vertebras humanas, son huesos calcinados. "Así termina
una persona desaparecida en México”: Mario Vergara
Córdoba, Ver. | 16 abril de 2016
Tribuna Libre.- Después de cuatro días de trabajos de
exploración, la Brigada Nacional en Busca de Personas Desaparecidas en
Veracruz: Buscándolos nos Encontramos, hizo su primer hallazgo: once fosas
clandestinas con restos calcinados.
“Así acaba un desaparecido en México… Este es
el horror que entierra el gobierno mexicano”, dice Mario Vergara, integrante de
Los Otros Desaparecidos de Iguala, mientras sostiene en sus manos un pedazo de
hueso de color oscuro. Este viernes, siguiendo la pista de un anónimo, la
Brigada de Búsqueda ubicó un panteón clandestino, dentro de un cafetal
colindante con plantíos de caña, en la comunidad de San Rafael Calerías, a un
costado de Córdoba, la ciudad natal de Javier Duarte de Ochoa, gobernador de
Veracruz.
Debajo de un conjunto de árboles de vainillo
y cedro, las familias acordonaron un área, e
iniciaron la supervisión del lugar: buscaban pequeños hundimientos,
algún punto donde la varilla -para detectar fosas- se hundiera con facilidad,
algún rastro que confirmara sus sospechas.
En el mensaje anónimo, el lugar les fue
descrito como una “cocina” de grandes dimensiones, en donde el grupo delictivo
los zetas desintegraba a sus víctimas. Después de quemarlas con diesel y
gasolina en tambores de acero, enterraba los restos -no desintegrados- en
pequeñas cavidades y los cubría con tierra.
A medio metro de la superficie encontraron,
sin tener que excavar mucho, vertebras, rotulas, pedazos de fémur. Los restos
estaban porosos, calcinados.
Parecían tener mucho tiempo enterrados,
porque al escarbar, la tierra estaba enraizada. Juan Carlos Herrera, de los en
Busca de Desaparecidos “María
Herrera”, expresó su indignación ante el
hallazgo de la primera fosa: “El gobernador tiene los cuerpos de personas
desaparecidas enterradas en el patio de Córdoba, su tierra natal”.
“Aquí
están las pruebas de que México es un panteón clandestino”, dijo una de las
madres del colectivo Voces Unidas por la Vida-Sabuesos de Sinaloa. En una hora,
las familias de Veracruz, acompañadas por familiares de desaparecidos en
Coahuila, Sinaloa, Michoacán, e Iguala, descubrieron once fosas.
Y sí debieron parar los trabajos no fue por
falta de indicios, sino porque el material para identificar los hallazgos se
les terminó. “Nosotros pensábamos que iban a
ser unos tres o cuatro, pero aquí hay más, y no traemos tanto material para abrir las fosas,
identificarlas, y protegerlas”, dijo Alma Rosa Rosas, del colectivo Voces Unidas
por la Vida-Sabuesos de Sinaloa.
El personal
Fiscalía General del Estado con
sede en Córdoba, no hizo presencia en el sitio del hallazgo, para hacer el
levantamiento de los restos sino hasta tres horas después de que Araceli
Salcedo Jiménez, Colectivo Familias de Desaparecidos Orizaba y Córdoba, reportó
el hallazgo de las fosas. http://e-veracruz.mx/