*Destacó que el gobierno que encabezará enfocará
sus esfuerzos en 50 municipios de alta marginación.
Xalapa, Ver. | 26 abril de 2016
Tribuna Libre.- “Los partidos
políticos estimulan a través de la coacción del voto la pobreza para mantenerse
en el poder y seguir viviendo del erario público” afirmó el Candidato
Independiente a gobernador Juan Bueno Torio, quien lamentó no se establezcan
programas concretos para mejorar la calidad de vida de los veracruzanos.
Dijo es el sistema
partidista que está instaurado en el estado el que no ha permitido que los
índices de marginalidad desciendan; “los partidos están alentando la pobreza en
Veracruz para seguir teniendo en este núcleo de la sociedad, lastimada, herida
y abandonada sus reservas de votos para el día de las elecciones” razón por la
cual señaló no existe una verdadera política de desarrollo social.
Garantizó que dos
años son suficientes para poder dar un nuevo rumbo a Veracruz y trazar la ruta
del cambio que beneficie a los ciudadanos, pues al acabar con la corrupción, el
dinero que se desvía será utilizado para mejorar las condiciones de vida de los
veracruzanos.
“Tengo destinado
cada año, de los dos años, 2 mil millones de pesos para esos 50 municipios
rezagados, de tal manera que esos 2 mil millones de pesos se pueden multiplicar
con los programas federales para que sean 10 mil millones de pesos que se
puedan invertir cada año”, explicó el candidato independiente a gobernador.
Por ello,
puntualizó mejorará las condiciones de vida de las zonas más vulnerables,
mejorando los caminos de acceso para llegar a las comunidades más alejadas y
así introducir la energía eléctrica para impulsar el desarrollo.
El candidato
Independiente a gobernador, Juan Bueno Torio, realizó este lunes promoción del
voto en cruceros de la ciudad de Xalapa, en dónde saludó y recibió muestras de
apoyo de la sociedad que está cansada de la forma en que se hace gobierno en la
entidad.
Por último resaltó
que el movimiento independiente está creciendo en Veracruz a consecuencia del
hartazgo social que existe ante la incompetencia del Gobierno para resolver los
problemas y necesidades más apremiantes.