*El presidente Enrique Peña Nieto pidió a la
Procuraduría apoyar a la fiscalía de Oaxaca en la investigación del
enfrentamiento en Nochixtlán que dejó al menos seis muertos.
Ciudad de México. | 21 junio de 2016
Tribuna Libre.- El presidente
Enrique Peña Nieto instruyó este lunes a la Procuraduría General de la
República a que apoye a la Fiscalía de Oaxaca
en la investigación del enfrentamiento del domingo en Nochixtlán.
La PGR apoyará en
la indagatoria "para deslindar responsabilidades y castigar a los
responsables", dijo Peña en su cuenta de Twitter.
El enfrentamiento
del domingo dejó al menos seis muertos, aunque la Coordinadora Nacional de
Trabajadores de la Educación afirma que fueron ocho los fallecidos. Además hay
decenas de lesionados.
La CNTE, que
escaló sus protestas después de que su líder fue encarcelado hace unos días,
responsabiliza a la policía de dispararle a los manifestantes, mientras las
autoridades dicen que fueron grupos infiltrados los que desataron la violencia.
"Lamento la
pérdida de vidas humanas. Mi solidaridad con sus familiares, así como con las
personas que resultaron heridas", dijo Peña.
"He girado
instrucciones para que, en el marco de la ley, se tomen las acciones necesarias
para solucionar el conflicto", agregó.
El mandatario
también informó que pidió a las instituciones de salud del gobierno federal
para que apoyen al Gobierno de Oaxaca para atender a los lesionados.
El sindicato, que
actúa separado del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE)
que es cercano al gobierno, denunció que más de 40 militantes que fueron
detenidos por la Policía Federal no han podido ser localizados y anunciaron que
retomarán este lunes sus movilizaciones.
"Lo que se
vivió ayer fue realmente algo brutal, algo que no tiene nombre. Llegaron los de
la Gendarmería, los de la PFP (cuerpos de Policía Federal) y ya iban armados y
llegaron disparando, no mediaron palabra", dijo a Reuters Miguel Zurita,
dirigente de la CNTE en Oaxaca.
El jefe de la
Policía Federal, Enrique Galindo, aseguró este lunes que vivieron una emboscada
y aseveró que en principio los uniformados no iban armados, sino que fue
después cuando llegaron refuerzos armados para "repeler la agresión".
Se trató de una
emboscada “muy estratégica porque comienzan también a envolvernos; se organiza
mucha gente, una gran cantidad, se juntan, en un momento dado llegan hasta dos
mil gentes a envolver a la policía", dijo Galindo.