¿A quién protege o teme el silencio oficial y mediático sobre los verdaderos responsables del vandalismo?
Aquiles Córdova Morán | 27 enero de 2017
Tribuna Libre.- En artículos anteriores he
tratado de poner en claro, con argumentos irrebatibles a mi juicio, que las
acusaciones de vandalismo en contra del Movimiento Antorchista, poblano y
nacional, no solo carecen en absoluto de fundamento y exhiben, por tanto, la mala
fe o la miseria intelectual de sus autores, sino que, además, forman parte de
una bien planeada y coordinada guerra mediática para fabricar un chivo
expiatorio “creíble” que cargue con la culpa y con el repudio social que el
vandalismo genera y que, al mismo tiempo y gracias a este doble resultado,
proteja, manteniéndolos en la sombra, a los verdaderos culpables. Visto así el
problema, no resulta sorpresiva y sí, en cambio, perfectamente lógica la
actividad mediática de los miembros de MORENA (incluida la presidenta de su
bancada en el H. Congreso de la Unión), de sus seguidores en “redes” y de los
que disponen de algún espacio mediático importante, que se han dado vuelo
difundiendo la calumnia y manejándola como si se tratara de una verdad plena y
suficientemente demostrada. Pero no resulta igualmente lógica ni esperable la
conducta que, frente a este mismo problema, han asumido casi todos los medios
de difusión relevantes y las autoridades encargadas de velar por la seguridad
nacional y por la tranquilidad social: ambos han mantenido, hasta hoy, un
silencio que resulta algo más que sospechoso. Cito algunos ejemplos relevantes.
Por lo menos en tres estados
del centro del país en los que se nos ha señalado como responsables únicos o
como destacados participantes en los saqueos y robos a comercios y gasolineras
(el estado de Puebla, el de Hidalgo y el Estado de México), hemos recurrido a
las respectivas oficinas de Gobernación en demanda de un pronunciamiento firme,
claro y documentado sobre quiénes son los verdaderos autores y responsables del
vandalismo. Quisiera quede muy claro que no hemos ido a demandar que se nos
exculpe, sino simplemente que se publique la verdad oficial al respecto, para
conocer realmente a los culpables, sean quienes sean. Pues bien, en los tres
casos se nos ha asegurado, primero, que no tienen ningún reporte, señalamiento
ni indicio alguno de que los antorchistas hayan organizado o participado en los
saqueos; segundo, en los tres casos se nos ha dicho que tienen a varias decenas
(y hasta centenares) de detenidos en flagrancia, ninguno de los cuales ha sido
identificado como antorchista; tercero, en los tres casos, y como respuesta a
nuestra exigencia de que se hagan públicos estos hechos, se nos ha prometido
que así se haría, pero en ninguno de ellos se ha cumplido el compromiso.
Creemos que es legítimo preguntar: ¿por qué?
En el mismo orden de ideas,
es altamente significativo lo ocurrido al único documento oficial que yo
conozco sobre la cuestión. Con fecha del 11 de enero de 2017, el periódico
digital INFORMADOR.MX publicó una nota que encabezó así: “La PF señala a López
Obrador como promotor contra el gasolinazo”, y en el cuerpo de la nota se lee
lo siguiente: “Andrés Manuel López Obrador, presidente de Morena, y
legisladores de partidos como el PAN, el PT y un alcalde independiente fueron
identificados por la Policía Federal (PF) como los principales promotores de la
protesta contra el gasolinazo”.
“Un supuesto análisis
criminológico de la Dirección Científica de la PF, señala a Mario Delgado
Carrillo, senador por Morena; a Gerardo Fernández Noroña; Blanca Amelia Gámez,
diputada en Chihuahua, por el PAN; Oscar González Yáñez, diputado en el Estado
de México por el PT, y Alfredo Lozoya Santillán, presidente municipal de
Parral, Chihuahua, como los promotores de las marchas, que originaron saqueos,
bloqueos de vialidades, retención de unidades de Pemex y distribución ilegal de
combustibles en 25 entidades”. Y poco más abajo se dice: “Dicho análisis
registra que López Obrador utilizó cinco cuentas en redes sociales: Facebook,
Twitter, Instagram, YouTube y su página oficial; Fernández Noroña utilizó 4
cuentas: Facebook, Twitter, Periscope y YouTube. Le sigue el senador Mario
Delgado, quien alentó actividades en contra del aumento del precio de las
gasolinas en Facebook, Twitter y YouTube; el diputado por el PT, González
Yáñez, utilizó Facebook, Twitter y You Tube; Lozoya Santillán lo hizo mediante
Facebook y Twitter; y la diputada panista Gámez Gutiérrez en su cuenta de
Facebook”. Hasta aquí la nota de INFORMADOR.MX. El mismo día 11 de enero, otro
portal “www.elvistobueno.com.mx, el diario digital regional” publicó, palabras
más o menos, la misma información.
Piénsese lo que se quiera de
la capacidad, el profesionalismo y la imparcialidad de la División Científica
de la PF, el hecho craso es que en su documento hay mucho más material
destinado a respaldar sus señalamientos que en todas las malévolas y
descabelladas acusaciones que “destacados comunicadores e intelectuales” han
lanzado contra los antorchistas. Resulta muy reveladora, por eso, la nula
atención que todos ellos, junto con los más grandes y poderosos medios de
comunicación, con una sola excepción, prestaron al informe de la PF. Y no solo
lo ignoraron olímpicamente, sino que algunos tuvieron la osadía de apoyarse en
él para lanzar nuevas alucinadas lucubraciones e imputaciones gratuitas contra
Antorcha. Recordemos al inefable Raymundo Riva Palacio en su artículo del 17 de
enero: “El comisionado nacional de Seguridad, Renato Sales, de quien depende la
Policía Cibernética, dijo que él no conocía el informe ni había ordenado que se
hiciera. La veracidad del documento fue verificada por varios periodistas que
hablaron con los subalternos de Sales, quien no pertenece ni al grupo de Gobernación
ni al del eje Hacienda-Relaciones Exteriores. El informe desvió la atención de
que entre los verdaderos instigadores de las protestas se encontraron
organizaciones campesinas vinculadas al PRI, así como Antorcha Campesina,
también de origen tricolor”. Es decir que, según Riva Palacio, el informe es
falso porque no lo conocía ni lo autorizó el comisionado nacional de Seguridad,
sino solo sus subalternos. ¿De veras anda tan despistado el Comisionado
Nacional de Seguridad que no sabe lo que hacen sus subalternos? Además, los
“verdaderos” instigadores lo son porque así se le pega la gana a Riva Palacio,
pues no da ningún otro argumento que no sea su nada decisiva opinión. ¿Qué le
parece, amigo lector, el método demostrativo de don Raymundo?
La clave del misterio, que
responde incluso la “duda” de Riva Palacio, la dio EL UNIVERSAL en su columna
habitual BAJO RESERVA aparecida el mismo día 17: “Ayer EL UNIVERSAL dio a
conocer un documento de la Policía Federal en el que se identifica al líder
máximo de Morena, Andrés Manuel López Obrador, y otros políticos, como el
senador Mario Delgado y Gerardo Fernández Noroña, como “promotores de
actividades en contra del gasolinazo”. Informa luego que, forzada por las
reacciones críticas de varios de los señalados, la PF publicó en su cuenta de
Twitter: “Se verifica la autenticidad del documento atribuido a la CNS y
@PoliciaFedMx sobre hechos relacionados con el incremento a la gasolina”; y EL
UNIVERSAL puntualiza por su parte que, antes de publicar la nota, “validó con la
propia Comisión Nacional de Seguridad —de la que depende la Policía Federal— la
autenticidad del documento. La respuesta fue que el informe es auténtico, pero
que no se trataba de un documento pensado para ser publicado en los medios”. Y
termina EL UNIVERSAL: “Así que investigan a AMLO, pero no quieren que se
entere, no sea que se vaya a incomodar, nos comentan.” ¡He aquí, pues, la madre
del cordero! Ahora pregunto a don Raymundo Riva Palacio: ¿por qué cree que su
acusación en nuestra contra vale más y debe ser más creída por los mexicanos,
que lo que dice la Comisión Nacional de Seguridad?
Para mí no hay duda de la
existencia de una conjura para desestabilizar al país y debilitar al máximo la
figura presidencial, las instituciones y las organizaciones de masas que se
juzgan afines al Gobierno actual. Repito también que no tengo ninguna certeza
sobre los fines que se persiguen; pero como la lógica y su método deductivo
(bien entendido y reducido a su ámbito de competencia, sin pretender ir más
allá) también reclaman sus justos derechos sobre la capacidad cognoscitiva del
ser humano, me atrevo a sospechar que todo tiende a allanarle el camino hacia
la presidencia de la república a un “delfín” ya bien seleccionado y definido
por las fuerzas y los poderes fácticos que realmente mandan en este país. Por
esto mismo, me afirmo en que las acusaciones falaces y desmesuradas contra los
antorchistas y su activa difusión corren a cargo de los morenistas según
pruebas que son del dominio público; pero que la planeación, coordinación y
ejecución profesional (perfecto dominio de la psicología de masas) de las
acciones de vandalismo rebasan con mucho las capacidades y habilidades de
Morena. Parece obvio que esta parte del plan corre por cuenta de instancias
mucho más experimentadas y poderosas que
no quieren correr el riesgo de fracasar en su empeño de controlar el poder de
la nación. Y termino con otra pregunta: ¿qué tiene que ver el modesto pueblo
pobre de México organizado en Antorcha con este tan tenebroso como gigantesco
asalto al poder?