
*El
análisis de redes de la Unidad de Datos de SinEmbargo arrojó que los usuarios
de Twitter consideran que Ricardo Anaya Cortés y José Antonio Meade Kuribreña
tienen una imagen similar en la temática de la corrupción. Aun cuando la
noticia no se trataba en primera instancia del candidato del PRI, su nombre fue
mencionado miles de veces, tanto como el de Anaya.
*Las
horas pasaron y los gráficos mostraron cómo los priistas se involucraron en el
tema mientras que Ricardo Anaya se quedó solo.
Ciudad de México. | 28 febrero de 2018
Tribuna Libre.- La implicación en delitos de lavado de dinero
de Ricardo Anaya Cortés modificó los mapas electorales en Twitter. En menos de
una semana, el panorama es otro en esa red social, después de la noticia de que
el candidato habría triangulado fondos en paraísos fiscales y lavado dinero en
empresas fantasma. Para estas acciones, uno de sus principales vínculos habría
sido el empresario queretano Manuel Barreiro Castañeda.
Sin bien, según el índice Glac, el candidato
por la coalición “México al Frente” no era el favorito entre los usuarios
mexicanos y acumulaba un gran número de menciones negativas, a partir del 23 de
febrero (el día en que se publicó la noticia de sus supuestos nexos con
empresarios que habrían incurrido en ilícitos) su nombre sólo aparece entre
indicadores que lo desaprueban.
Aunque la noticia no implicaba a José Antonio
Meade Kuribreña, candidato de la coalición “Todos por México” -PRI, PVEM y
Nueva Alianza- su nombre fue señalado por los usuarios en el marco del tema de
la corrupción. Así, ambos candidatos fueron equiparables en cuanto a desempeño
político y ético.
La muestra de un universo de cuatro mil 151
nodos y seis mil 858 aristas recolectada el viernes 23 de febrero arroja que
los aspirantes de la coalición “Por México al Frente” y de la coalición “Todos
por México”, son cuestionables en la misma medida. Esta percepción se generó en
una fecha que no corresponde al calendario electoral. Se trata del periodo
intermedio entre la precampaña que concluyó el 11 de febrero y el inicio del
periodo oficial de la contienda electoral, marcado para el 30 de marzo.
Tanto la tendencia
como el contenido de los tuits reflejan enojo en contra del
cáncer de la corrupción,
que a México le cuesta el 10 por ciento del Producto
Interno Bruto (PIB),
según todos los cálculos. Por el número de cargos a elegir -3 mil 400-, la
próxima contienda será la más grande de la historia de México, y la segunda en
la que las redes sociales tendrán importancia como foro de diálogo y
participación de los ciudadanos.
EL
ORIGEN DE ESTE UNIVERSO
La noticia se generó cuando el periodista
Ciro Gómez Leyva difundió en su noticiario un video en el que aparecen los
empresarios Daniel Rodríguez y Alberto Galindo mientras proporcionan
información a la Procuraduría General de la República (PGR) sobre un esquema de
empresas fantasma para lavar dinero y beneficiar al candidato de la coalición
“Por México al Frente”, Ricardo Anaya Cortés. La noticia fue retomada por la
agencia Apro de Proceso.
El mismo viernes, el equipo de campaña de
Ricardo Anaya emitió un comunicado en el que deslindó al candidato de los
delitos de lavado de dinero y expuso que uno de los empresarios que realizó el
señalamiento ante la PGR, tiene vínculos con el Partido Revolucionario
Institucional (PRI).
El interés del PRI por el escándalo generado
en redes tras las acusaciones de Anaya no fue evidente hasta horas más tarde
cuando sus principales actores políticos se sumaron a las acusaciones públicas.
Hasta las 18:00 horas del viernes, los
usuarios de Twitter reaccionaron ante la
noticia de manera
intensa. Se observó una amplia interacción
entre internautas de
bajo perfil; es decir, con actividad moderada en la red social. Esta vez, estos
usuarios se colocaron en el centro del diálogo.
En la muestra
obtenida durante el viernes, se observó que medios nacionales de
referencia, se
mantuvieron fuera de los clusters -grupos de conversación- de
mayor dimensión. En
cambio, los medios digitales participaron en la
conversación.
Aristegui Online fue el medio que más
interactuó con los usuarios, en tanto que
el personaje “Brozo”
protagonizó el grupo crítico hacia los candidatos.
En la conversación prevaleció el tono de
crítica al comportamiento ético en la política
mexicana, así como
una marcada relación entre Anaya, del Partido Acción Nacional (PAN)
y José Antonio
Meade, del PRI.
LAS
HORAS DE SILENCIO Y MÁS DE CIEN MINUTOS DE SOLEDAD
Este lunes, el PRI se incorporó a la discusión con un video difundido por el
vocero de la campaña presidencial de la coalición “Todos Por México”, Javier
Lozano Alarcón en el que aseguró que Ricardo Anaya miente y “está metido en
lavado de dinero”.
La grabación fue fijada en la cuenta oficial
del priista @JLozanoA en la que presumió contar con pruebas que afirman su
señalamiento.
Para las 17:00 horas del lunes, Lozano había
logrado que su contenido fuera uno de los más compartidos. Sin embargo,
tuiteras como @lovrega tuvieron más alcance durante los primeros minutos. Luego
de que el PRI emitiera su posicionamiento en el caso, medios como Reforma
dieron seguimiento a las pruebas en contra del candidato de la coalición
integrada por el PAN, PRD y MC.
A pesar de que Lozano Alarcón logró que su
video tuviera alcance; periodistas, intelectuales e influencers dominaron el
diálogo en Twitter en torno a Anaya. En tanto, los representantes de la
Coalición “Todos por México” se mantuvieron por debajo en las tendencias y sin
realizar pronunciamientos trascendentes en defensa de su candidato.
Ni Santiago Creel, ni Dante Delgado,
Alejandra Barrales, Juan Zepeda, o Josefina Vázquez Mota emitieron tuits en
defensa de Anaya, y se mantuvieron completamente al margen de la discusión.
Diego Fernández de Cevallos y Dante Delgado
Ranauro sí se mostraron interesados en dar su apoyo a Anaya pero no figuraron
entre los principales actores en las conversaciones en torno al conflicto. El
candidato no respondió a los señalamientos a través de su cuenta hasta el 25 de
febrero, cuando rechazó rendir su declaración ministerial acerca de la supuesta
venta de una nave industrial a un empresario que según sus adversarios es
prueba de que lavó dinero. Ese mismo día entregó a la Procuraduría General de
la República un documento en el que sostiene que las acusaciones son falsas.
PERO EL
SILENCIO SE ROMPIÓ
El silencio de Ricardo Anaya en Twitter duró
hasta la noche del 26 de febrero cuando panistas que se denominan “rebeldes”
difundieron un video en el que se observa al candidato mientras baila en la
boda de Manuel Barreiro Castañeda, el empresario con quien habría realizado la
triangulación de fondos. A las 20:24 horas, lanzó un tweet en el que respondió:
Como ya
lo he dicho:
1. Yo no le vendí nada a Manuel Barreiro.
2. Sí lo conozco. Sobre el video: Álvaro
Ugalde, mi amigo desde secundaria, me invitó a la boda de su hermana. Por
cierto, eso fue hace 13 años. Ahora resulta que asistir a una boda es prueba de
algo indebido.
Luego, la actividad de Ricardo Anaya en
Twitter se limitó. En lo que va de la semana, no ha vuelto a mencionar el tema.
Dos de sus mensajes fueron una fotografía con sus candidatas a diputadas
federales, y una imagen con el hashtag #PorMéxicoalFrente. Mientras, las acusaciones
en su contra se colocaron como tendencia bajo la etiqueta “Es Anaya” en alusión
al video en el que aparece en pleno baile en la boda de Barreiro.
“Es Anaya” fue tendencia este martes con la
activa participación del Presidente Nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, y
Javier Lozano, ante la ausencia casi total de los integrantes de la coalición
#PorMéxicoalFrente en defensa del candidato.
SinEmbargo