Tribuna Libre.- El titular de la Secretaría de Relaciones
Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard, expuso que México usará su peso y
reconocimiento moral y político para buscar una estrategia que fortalezca la
posibilidad de una mediación que conduzca a un entendimiento y evite una crisis
mayor en Venezuela.
“México es una democracia con mucho peso y su
convocatoria es porque tiene autoridad moral y política como país, tenemos una
de las democracias más vigorosas del continente y por supuesto que lo que
decimos tiene un peso, no sólo por su tamaño, sino por su autoridad política”,
sostuvo.
Previo a su viaje a Montevideo, Uruguay,
donde se reunirá con representantes de ese país y de la Unión Europea para
analizar la problemática en la nación sudamericana, el canciller afirmó que
“vamos a usar ese peso y reconocimiento para procurar evitar un enfrentamiento,
es lo que México puede hacer y es lo que estamos haciendo”.
“Lo que pedimos es convocar a ambas partes a
un diálogo que pueda conducir a un entendimiento, es lo mejor. Caso contrario,
se corren riesgos muy grandes de que haya enfrentamiento o se agrave la
situación”, reiteró el canciller.

Enfatizó que se deben respetar y ser
respetados los derechos y libertades de las personas y apuntó que “no
defendemos a Maduro ni a su régimen ni tenemos ninguna posición política,
queremos que haya un diálogo inteligente y creo que es lo que va a ocurrir”.
“Nosotros lo que pedimos es que sienten a
dialogar, no podemos imponer condiciones, pues para eso nos sumaríamos lo que
hizo el Grupo de Lima, pero consideramos que no está en nosotros imponer
condiciones a las partes, sino buscar que se encuentren, se comuniquen y se
evite violencia en Venezuela”, insistió.
Marcelo Ebrard aclaró que no se ha planteado
en este momento dar asilo político ni a Nicolás Maduro ni a Juan Guaidó, pues
México siempre se ha opuesto a desconocer a un gobierno en funciones, “es una
tradición mexicana que tiene razones poderosas, en este momento lo que vamos a
hacer es insistir en que haya ese diálogo y que eso pueda conducir a una salida
política”.
Señaló que en la reunión del día 7 de febrero
en Uruguay, México sólo buscará la forma de ayudar a resolver esa crisis y
contribuir en la medida de sus posibilidades a que el dialogo se dé entre las
partes, “porque sólo a ellas les corresponde resolver el problema, tienen que
ponerse de acuerdo entre los venezolanos”.
Puntualizó que México está en el lado correcto
de lo que debe ser la posición política como país y confió en que los actores
principales de este conflicto se den cuenta de que lo que planteamos es lo más
sensato.