*El
gran ganador de la reunión internacional México-Honduras
*Ebrard
a la cabeza de los presidenciables
Marco Antonio Aguirre Rodríguez | 29 julio de
2019
Tribuna Libre.- Marcelo Ebrard Casaubon, el secretario de
Relaciones Exteriores de México, fue el gran ganador de la reunión entre los
presidentes de México y Honduras, en Minatitlán, el sábado 27 de julio pasado.
Fue el gran artífice para que esta se lograse
y a la vez demostró que puede negociar tanto con los Estados Unidos, como con
los países de Centroamérica, además de tener encuentros con las grandes
potencias del mundo, como la recién pasada de la Cumbre del G-20.
Marcelo Ebrard tuvo el reconocimiento del
presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y del mandatario de
Honduras, Juan Orlando Hernández Alvarado, por el trabajo realizado para lograr
la vinculación con éste segundo país de Centroamérica, para implementar el gran
programa de detención de flujos migratorios.
Incluso el mandatario de Honduras reconoció
el liderazgo de Andrés Manuel López Obrador en la región:
“Por eso quiero decirle al presidente López
Obrador. Lo invito a que, de corto plazo, como parte de este plan estratégico
que estamos lanzando, llamemos a la formación de una gran coalición
internacional para la generación de empleo masivo en el triángulo norte de
Centroamérica, y nosotros estamos dispuestos siempre a poner de nuestra parte.
Y yo sé que con su liderazgo, presidente, lo vamos a lograr”.
El Presidente López Obrador ponderó
nuevamente la cooperación para el desarrollo, como el camino para resolver la
migración por necesidad:
“De esto hemos hablado con el presidente
Donald Trump para que se apoye a Centroamérica, para que se apoye al sur, al
sureste de México y que, de esta manera, con actividades productivas, creando
empleo, con bienestar, se logre que la migración sea opcional, no forzada, que
el que quiera salirse de su pueblo lo haga por gusto, no por necesidad”.
Marcelo Ebrard, ese mismo que al principio
enfrentó reticencias de Donald Trump, pero que ahora lleva las negociaciones
con el país del norte, también mostró el trabajo para vincular a México con los
países hermanos de Centroamérica.
Y son países hermanos porque tienen el mismo
origen hispánico; se habla la misma lengua y hay la misma conjunción de razas.
Juan Orlando Hernández realizó el recuento
histórico, desde que en 1822 los países centroamericanos buscaron anexarse al
entonces primer imperio mexicano, hasta llegar a este día, en el que mencionó
“damos un paso firme para dar vida al Plan de Desarrollo Integral de Guatemala,
El Salvador, Honduras y México”.
El Presidente de México, en las instalaciones
de la 29 Zona Militar, encabezó la firma de éste Plan y su puesta en marcha, a
través de un fondo de 30 millones de dólares para Honduras; implementando los
programas “Sembrando Vida” y “Jóvenes Construyendo el Futuro”.
Marcelo Ebrard, refirió que con este plan de
desarrollo integral para Centroamérica, México apoyará por conducto de su
agencia de cooperación, en la creación de 20 mil empleos para Honduras, entre
esta fecha y diciembre.
Marcelo Ebrard es un fuerte defensor y gran
propulsor de la idea integracionista y de creación de un corredor de
crecimiento económico en el Istmo de Tehuantepec, que genere múltiples empleos
y que detenga la migración.
El de Minatitlán fue un acto internacional,
pero que puso a Marcelo Ebrard en muy buena perspectiva hacia el 2024, tanto
que puede estar ahora ya a la cabeza de los presidenciables para ese entonces.
Hace un año, precisamente, el 20 de julio del
2018, el entonces presidente electo de México, recibió a una delegación de
parte del presidente de los Estados Unidos, y con la misma le envió a Donald
Trump una carta que decía, en resumen, que la solución a la migración por
pobreza, por miedo, es que todos los países ayuden a generar oportunidades de
desarrollo en los países de origen de cada uno, “en sus comunidades, en sus
pueblos, donde está su familia, donde están sus ancestros, donde está su
cultura”, puntualizó Marcelo Ebrard.
Esta propuesta se hizo al presidente de
Estados Unidos, pero también se presentó en la Cumbre del G-20, “con los 20
países más desarrollados económicamente del mundo. Y dijimos lo mismo: Se
necesita urgentemente un esfuerzo de inversión, de respaldo, de bienestar
social, de desarrollo, en el sur de México, en Guatemala, en Honduras y El
Salvador, principalmente”, apuntó Marcelo Ebrard
Y sí, en la última reunión cumbre del G-20,
se incluyó -por primera vez- a la migración como uno de sus temas principales,
gracias a una propuesta de México. La cumbre en el punto 42 de su declaración
final anotó que los grandes movimientos de refugio y migración son una
preocupación mundial con consecuencias humanitarias políticas y sociales.
En la reunión del G-20 en Osaka, el canciller
llevó la tesis mexicana sobre migración, la cual se le entregó a todos los
participantes, junto con la carta del presidente López Obrador que dice que
debemos actuar respecto a las causas de los grandes movimientos migratorios y
de refugio que se viven el mundo.
Con esa óptica es que se buscó y logró la
vinculación con Honduras y que Marcelo Ebrard concretó la reunión con el
presidente de ese país, logrando que este sábado 27 de julio fuese el momento
del anuncio conjunto a las grandes potencias económicas de que si es posible
desarrollar programas que incentiven la economía en las localidades, para que
las personas no tengan que migrar por necesidad.
Marcelo Ebrard apuntó que “se va a respaldar
Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo Futuro en la República de Honduras con
las modalidades que determine el gobierno de Honduras, pero vamos a participar
con ellos y el mensaje es: Si México y Honduras lo pueden hacer, ¿por qué
Estados Unidos no puede?, ¿por qué los países más desarrollados no pueden? Sí
pueden, pero nos hace falta que quieran”.
“Y vamos a lograr con perseverancia que los
demás países del mundo volteen, escuchen y actúen como hoy lo hace México y
Honduras, sin ningún otro interés más que darle una mano amiga al pueblo, a la
gente que lo necesita, a los que han decidido migrar por pobreza o por miedo”,
puntualizó.
Por eso es que Marcelo Ebrard fue el místico
que se elevó con el gran triunfo por esa reunión.
Y que creció en el camino hacia el 2014.