*
Candidato del PVEM sólo si le extinguen las denuncias * Sus ligas con Yunes Linares * Diputados yunistas, nuevo trapeador de
Morena * Ricardo Morales pide reabrir
juzgados * El mismo que dispensó una
autopsia a un narco * Regina Vázquez:
próximo escándalo por no pagar lo que debe
* Se integra denuncia contra el notario fogoso
Tribuna
Libre.- Priísta
de uña fina, Marcelo Montiel mueve una candidatura, la del Partido Verde, para
negociar su libertad, las denuncias por el robo de recursos a adultos mayores,
las obras fantasma, daño al erario en los días en que fue delegado de Sedesol
federal en Veracruz.
Habla, dialoga con el operador de mayor nivel
del Partido Verde, Manuel Velasco Coello, senador y ex gobernador de Chiapas,
cuya interlocución y cercanía con el presidente López Obrador le dio estatus
ante el círculo rojo de Andrés Manuel.
Públicamente dice que no hay negociación; en
los hechos, sí.
Su candidatura a la alcaldía de Coatzacoalcos
es una palanca para un beneficio personal mayor: desechar las cuatro denuncias
que pesan en su contra —y contra el ex subdelegado administrativo, Víctor
Rodríguez Gallegos— por las trapacerías cometidas en su paso por la Sedesol en
Veracruz, documentadas con videos, testimonios, reportes y las confesiones de
empleados implicados en el atraco.
De viva voz, ante la hoy Fiscalía General de
la República y en declaraciones escritas, operadores de los programas sociales
65 y Más advirtieron del robo en cajeros bancarios, el hurto de las pensiones
de adultos mayores; otros simulando que construían pisos y techos, que llevó a
abrir expedientes contra empresas de dudoso accionar.
Uno de los testimonios, el de Pablo Ruiz
Domínguez, dice:
Por lo menos 10 funcionarios y 15
trabajadores ajenos a la Sedesol estaban “dedicados a cobrar diariamente
cientos de cheques endosados con firmas falsas y tarjetas bancarias no
personalizadas en diferentes bancos y cajeros de todo el estado”.
Un altero de documentos, videos, reportes, la
compulsa entre lo integrado a los expedientes administrativos —el ámbito de
responsabilidad de Víctor Rodríguez, el de la foto acaramelada con Felicia en la
playa, en Instagram— y las voces de los ciudadanos burlados, son la espada que
pende sobre la cabeza del ex alcalde de Coatzacoalcos.
Sobre Marcelo Montiel no hay sospecha; hay
certeza. Sus más cercanos están implicados en el atraco a Sedesol. Hay evidencia,
señalamientos directos, audios de escándalo. Hasta el ratón más audaz suele
dejar rastro y huella.
Una acción legal sobre Marcelo Montiel
ocurrió en diciembre de 2019. Según una fuente de la FGR, fue cercado,
intervenido por agentes ministeriales, que lo llevarían a declarar. Pero la
diosa fortuna le sonrió. Salvó el pellejo por una reacción de salud adversa,
una descompensación que lo llevó al hospital.
Familiares, amigos, colaboradores cercanos
cumplen desde entonces con la tarea de dispersar la especie de que su estado es
delicado. El cuento del enfermo terminal que goza de cabal salud.
Literalmente el proceso electoral le vino
como anillo al dedo. Desprestigiado como está, el Partido Verde Ecologista de
México busca votos que lo mantengan en la órbita de poder de Andrés Manuel.
A partir de ahí se dio la negociación con
Marcelo Montiel para postularlo por tercera vez como candidato a la alcaldía de
Coatzacoalcos.
Marcelo Montiel impuso dos condiciones: que
no fuera en alianza con Morena, aunque su estructura trabajaría para apuntalar
a candidatos morenistas por las diputaciones federal y local, y la extinción de
las denuncias en su contra por la gran estafa en Sedesol.
Sabiendo de la raquítica oferta política del
PRI —Carlos Vasconcelos excluyendo a tantos y tantos que en un audio se le
escucha decir que él también se va del tricolor y de la CTM, la central obrera
que dirige sin ser obrero—, Marcelo Montiel se ha vendido como el gran
salvador.
Del encuentro con Manuel Velasco Coello hay
por lo menos cuatro fotografías. Sus protagonistas son Marcelo Montiel, Manuel
Velasco y Javier Herrera Borunda, hijo del ex gobernador Fidel Herrera Beltrán.
Las imágenes son prueba plena. El PVEM busca
a Montiel y Montiel usa al PVEM. Y a Manuel Velasco lo tiene como el puente
hacia López Obrador.
El tercer personaje, Javier Herrera, no sabe
—o lo sabe y lo oculta— de la filiación yunista azul del ex alcalde de
Coatzacoalcos
Son sabidas sus ligas, sus nexos, sus enredos
y acuerdos con el ex gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, el
acérrimo enemigo de su padre, Fidel Herrera Beltrán.
Y la otra vertiente, aún más explosiva:
Marcelo Montiel, un aliado de Yunes Linares, siendo arrimado al presidente
López Obrador.
Yunes azul y Andrés Manuel son agua y aceite.
Yunes tildaba de “loco” a López Obrador en 2017 cuando impulsaba a los
candidatos de Morena a las alcaldías de Veracruz y Andrés Manuel llamaba
“monarquía de la moronga azul” a Yunes y sus hijos por el proyecto para
heredarles el poder.
Operar para Yunes Linares no es tarea nueva
en Marcelo Montiel. Lo hizo siendo alcalde, en 2008, acercándole ex diputados,
caciques y aspirantes a caciques.
Al restaurant Suntory, en la Ciudad de
México, llevó, por ejemplo, a Gladys Merlín Castro, Guadalupe Porras David,
Marina Garay Cabada y Juan René Chiunti Hernández, militantes del fidelismo,
luego trabados con Javier Duarte y al final dejados en la orfandad.
De todos, sólo Marina Garay ha podido retener
el poder. Su hijo, Octavio Pérez Garay, fue vestido de independiente para
acceder a la alcaldía de San Andrés Tuxtla, el feudo de su mamá; Gladys Merlín
fue rebasada por los hermanos Cirilo y Ponciano Vázquez Parissi, en
Cosoloeacaque, y Lu-pilla Porras cedió la plaza ante el embate de los
petroleros, el panismo que confluye en Nicolás Ruiz Rosete y Morena, que
detenta la alcaldía de Minatitlán y las diputaciones federal y local.
Sobre René Chiunti aún hay denuncias vigentes
por obras fantasma en su período como alcalde de Cosomaloapan.
Aquella reunión —noviembre de 2008, cuando
Juan Camilo Mouriño, ex secretario de Gobernación murió en el avionazo de
Reforma— trascendió por los dislates de un profesor marcelista, entonces
cercano a Yara Longoria Santos, ahijada del ex gobernador Fidel Herrera
Beltrán.
Marcelo Montiel operaba en ese nivel,
intuyendo el crecimiento de Yunes Linares y advirtiendo el riesgo de derrota de
Javier Duarte cuando aspirara —2010— al gobierno de Veracruz, que Fidel Herrera
con un fraude mayúsculo, usando los programas sociales como arma electoral, el
plan G-5, aplicó para imponer a su sucesor.
Jugar a dos manos es propio de vivales. Y
Marcelo Montiel es un tahúr. Juega con el PRI y juega con la oposición. O la
infiltra. O compra candidatos a modo para no perder.
Descubierta su negociación con el PVEM, su
recurso es negar toda pretensión de ser alcalde de Coatzacoalcos por tercera
ocasión. Pero la fotografías con el operador principal del Verde, acreditan que
vuelve a mentir.
La negociación continúa. Si López Obrador
pasa por alto la filia yunista azul de Marcelo Montiel, las denuncias en la FGR
se extinguirán o serán dictaminadas a su favor. El punto es que MMM le reste
votos al PRI y al PAN.
Candidato o no a la alcaldía de
Coatzacoalcos, lo que queda de sus estructuras electorales trabajarán para
Morena. A Andrés Manuel sólo le inquieta perder la Cámara de Diputados y a
Cuitláhuac García el Congreso de Veracruz.
Mientras, el tahúr político negocia
impunidad.
Archivo muerto
Desgranado, el PAN de Veracruz protagoniza un
vodevil de risa loca. Otrora férrea adversaria de Morena, la fracción
parlamentaria yunista ahora es el trapeador del partido de López Obrador. Van
en la línea de Cuitláhuac García, caminan al son que les marca Eric Cisneros,
se ajustan a la línea del Carón, alias Juan Javier Gómez Cazarín, y avalan la
propuesta del gobernador de Veracruz para convertir en magistrados a los seis
peleles que cubrirán las plazas de los juristas que dejan el Poder Judicial de
Veracruz. Al final serán tres, pues por la vía federal se dejará sin efecto el
retiro forzoso, entre otros, de Marco Antonio Lezama Moo y de la intragable
Gladys Maldonado. Sin vergüenza, la banda yunista azul encumbra a quienes a la
postre los van a ejecutar. Alliet García Cayetano, abogada de quinta, esposa
del secretario de Infraestructura, es quien operó desde la Dirección Jurídica
de la Secretaría de Seguridad Pública el mazacote legal con el que se acusará
al ex gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, patrón de los pitufos panistas en
el Congreso, de un fraude mayor a dos mil millones de pesos con el sistema de videovigilancia del que
difícilmente se podrá librar. Por la razones que sean, por evidenciar que el
líder estatal del PAN en Veracruz, Joaquín Rosendo Guzmán Avilés, no controla
ni a sus nietos, o por exhibir al diputado Omar Miranda, líder de pacotilla en
el grupo parlamentario, como un auténtico florero azul, lo cierto es que la
banda yunista terminó convertida en la jerga con la que Morena, Cuitláhuac,
Cisneros y Gómez Cazarín limpian los sanitarios del Congreso de Veracruz… Muy
sácalepunta, Ricardo Morales Carrasco exige la vuelta a la actividad, la
reapertura de juzgados, cerrados desde marzo cuando la pandemia llegaba a
Veracruz. Muy sobrado, con voz del que detenta el poder, Ricardo Morales
conmina a que establezcan mecanismos para normalizar los procesos judiciales.
Para ello, por lo menos, el que habla debe tener ética; Morales Carrasco no.
Mala memoria la suya, la nuestra no. Ha de olvidar un nombre, el de Bernardo
Cruz Mota, ejecutado con la saña del narco, a quien Ricardo Morales, siendo
fiscal regional en Coatzacoalcos, le dispensó la necropsia a pedido del
entonces líder zeta en el sur de Veracruz, Hernán Martinez Zavaleta, alias el
Comandante H. A medio sepelio, el cuerpo de Bernardo Cruz Mota fue tomado por
elementos de la Secretaría de Marina y llevado al forense para cumplir con el
procedimiento de ley. Y el cese fulminante de Morales Carrasco no tardó en
llegar. Se supo entonces que el fiscal regional vivía en un hotel que sirve de
punto de encuentro lo mismo a policías que a próceres de la delincuencia
organizada, y como interlocutor el fiscal yunista tenía a quien servía de
puente con Osiris García Castillejos, cuñado del H, asesinado un par de años
después a las puertas del restaurant que le servía de fachada para las
operaciones comerciales de la delincuencia organizada. Hoy, Ricardo Morales es
voz cantante en el gremio en Xalapa y exige la reactivación de los juzgados. Se
intuye por qué la premura… Sainete con tufo a escándalo en el entorno familiar
y político de Regina Vázquez Saut. Y todo por un predio. Y todo por venderlo a
una inmobiliaria de altos vuelos que ahí erigió una plaza comercial. Y más aún,
por escamotearle la comisión a quien le consiguió el cliente y cristalizó la
operación de compraventa, en Puebla. Una historia que comienza con su padre, el
cacique de Acayucan, Cirilo Vázquez Lagunes, ejecutado por el crimen organizado
en 2006, y que sigue con Regina Vázquez, ex diputada federal, ex diputada
local, ex alcaldesa de Acayucan con gravísimas omisiones financieras que luego
le limpió Fidel Herrera, con el que se cobijó. Una historia con terrenos que
nunca debieron terminar en plaza comercial porque su destino era el desarrollo
de vivienda para trabajadores ferrocarrileros. La historia la cuenta su
protagonista, una víctima más de Regina Vázquez Saut y sus hermanas Fabiola y
Sofía, y está por comenzar… Alejandro Perea Parra volverá a ser juez. Ganó un
amparo que impide su remoción como titular del Juzgado Primero de Primera
Instancia, pese a la cadena de irregularidades, resoluciones aberrantes,
sentencias de escándalo. Si Perea hubiera sido el juez del caso Chapo Guzmán,
el temido narco andaría libre. Heredado por Edel Álvarez Peña, Alejandro Perea
fue dejado fuera de circulación en cuanto Sofía Martínez Huerta, la
vilipendiada presidenta del Poder Judicial de Veracruz, se encumbró. Pero el
Poder Judicial Federal lo restituyó en el cargo. Así de podrida la justicia en
Veracruz… Fogoso, el notario, es despiadado con la mujer. Van las chicas al
despacho y hay posibilidades de trabajo sólo si no rebasan la mayoría de edad.
Y aplica el acoso y el abuso sexual. Fogoso, el notario, sabe que eso es
pederastia. Sabe que es delito. Sabe que es perversión. Son años y años usando
la necesidad de trabajo de las postulantes para dar rienda al placer carnal.
Una denuncia contiene todo y en breve el sur de Veracruz se habrá de
escandalizar…
https://bit.ly/2PjgV0J