José Miguel Cobián | 01 septiembre de 2020
Tribuna
Libre.- A lo largo de dos
años en el poder, entendiendo que lo asumió desde el día en que se conocieron
los resultados de la elección, hemos visto que se han obtenido malos resultados
en materia económica, en materia de seguridad y un pésimo manejo de la pandemia. Esto afecta el proyecto de la 4T, así que se
ha buscado distraer al respetable público, para evitar el daño electoral en el
2021. El propio presidente ha sido muy
puntual para informar que es lo que duele, de tal manera que cada vez que sale
un buen distractor, hay que buscar que es lo que quiere evitar que la opinión
pública observe. La oposición no ha
sabido o no ha podido resaltar todos y cada uno de los temas de los cuales, la
distracción lograda por el presidente ha sido un éxito rotundo.
Entendemos que en su narrativa, el presidente
cree que está trabajando para lograr una sociedad más justa, existe una elevada
posibilidad de que él crea que está trabajando primero por los pobres. Por ello no ha percibido que su gobierno se
ha dedicado a comunicar, en lugar de a dar resultados. Es decir, se habla mucho y se gobierna muy
poco, con lo cual, los logros también son muy escasos.
Cualquiera que dedique tiempo a promover esos
distractores o de otros adicionales, si es actor de la 4T, está logrando sus
objetivos, y en caso de ser adversario de la 4T se está convirtiendo en tonto
útil, ya que transmite, opina y discute temas intrascendentes, en lugar de
llevar a la opinión pública a los temas que realmente importan.
Si con Vicente Fox en su presunta estulticia
tuvimos un distractor divertido, en el caso de Peña, era obvio que los errores
y lapsus se hacían a propósito para
genera una catarsis y distraer a la opinión pública. En el caso del presidente, se inició con una
enorme competencia de errores y estulticia en muchos miembros de Morena, posteriormente se evaluó la estrategia y se
rechazó, pues generaba una percepción de ignorancia e incompetencia en la
población. A partir de allí se ha
intentado controlar los posibles gazapos de funcionarios y representantes
populares emanados de ese partido.
Ahora, todas las armas de Epigmenio y el
resto de analistas políticos están orientadas a la distracción mediante el gran
instrumento de comunicación que son las mañaneras. A veces se percibe un agotamiento, como
cuando se regresa a la distracción de la rifa que no es rifa del avión que no
se rifa. En los últimos días hemos
visto los videos de los auxiliares de senadores panistas recibiendo dinero, sin
mayor explicación, pero en el imaginario colectivo ya se les linchó. Y ojo, sin mayor investigación tampoco. Tuvimos el caso Lozoya con todas las
filtraciones que tanto daño le hicieron al debido proceso, pero que se capitalizaron
mediáticamente ubicando a la oposición como corrupta…. Hasta que salió el
primer video de Pío, con el cual se confirma el rumos de que gobiernos
estatales desviaban recursos públicos para tener contento al monstruo
comunicador que representaba el AMLO opositor.
Los problemas de México no han cambiado. Desde la cancelación de la construcción del
Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México conforme a una corrupción jamás
demostrada y mucho menos castigada, México ha seguido un camino cuesta
abajo. Los escándalos que más han dañado
a la imagen del gobierno, además del video de Pío han sido relacionados con
salud y seguridad. El asesinado de la
familia Lebaron, mismo que no lleva ningún avance. La liberación de Ovidio que
todos supones se debió a cierta amenaza de liberar pruebas y videos. La falta de medicinas para niños con cáncer. La falta de medicinas para enfermos de
HIV. La falta de medicinas para mujeres
con cáncer cérvico-uterino. Hoy mismo,
hablamos de 600,000 infectados por COVID que podemos llevar a 18 millones de
acuerdo con los cálculos de reconocidas instituciones estadísticas, o la muerte
de mexicanos por COVID que cuando llega a 60,000 oficiales, sabemos que debemos
multiplicar por un número entre tres y cuatro, ya que hay sub registro. Es decir, México ha perdido el equivalente a
la población de una ciudad media COMPLETA.
Entre 180 y 240,000 personas han fallecido por la enfermedad. Si a ello le aunamos los 60,000 muertos
por violencia del crimen, el saldo, los muertos de Obrador ya son 300,000 y
apenas llevamos dos años de gobierno.
Si aunamos una caída del PIB como nunca en la
historia, una pérdida de los ¨guardaditos¨ que con tanto esfuerzo se acumularon
en muchos años. El incremento en pobres,
que en este sexenio será de entre doce y veinte millones. Y sobre todo, la presión en las finanzas públicas
que representa una enorme caída en la recaudación, a la par de la obligación de
sostener los programas sociales y los proyectos faraónicos. Cualquier entendido en cuestiones de
gobierno sabrá que los dos primeros años han sido un rotundo fracaso.
Y sin embargo, la oposición no ha sabido
comunicar a la población lo que es su nueva realidad. Estoy seguro de que quien ha perdido un
familiar por COVID, o quien perdió a un familiar por falta de medicinas, o quien
perdió su trabajo. Ninguno de ellos está interesado en la rifa del avión, o en
la consulta ilegal para saber si se debe de juzgar a los ex presidentes. Ellos son testimonio vivo de los puntos
débiles del gobierno en turno.
Eso sin contar los resultados de los
gobiernos estatales de Morena o sus aliados, que en cada estado habrá que
evaluar sus virtudes y defectos.
Material donde resaltar los negativos, hay mucho. No se replica lo suficiente, no llega a quien
debe de llegar.
Mantener en pie de guerra a las bases anti
AMLO es una buena estrategia, pero no basta, falta mucho más. Falta una idea organizada de lo que hay que
hacer. Responder a preguntas básicas
como ¿De qué manera lograr que la gente confíe de nuevo en los partidos que los
hartaron y fueron la razón de 16
millones de votos a favor de AMLO? Esa
cifra es en mi opinión el diferencial con respecto al voto duro de morena que
son 14 millones históricamente.
¿Cómo lograr que quien hoy confía ciegamente
pueda comprender que quizá está equivocado al no juzgar lo bueno o malo que
hace el gobierno? A fin de cuentas,
¿Cómo romper la polarización que hace que quien trabaja y tiene un auto sea
enemigo de quien trabaja y se mueve en trasporte público? Esto es fundamental, porque si los
mexicanos nos seguimos alegrando de que al otro le vaya mal, al final nos irá
mal a todos.
Hay un grupo de personas en redes sociales,
pagadas tanto por el gobierno como por la oposición que ofenden y agreden,
buscando polarizar a quien todavía actúe con respeto a la opinión del contrario. No hay que caer en esos juegos. Al que ofende lo bloqueas, y sigues la
discusión con quien pueda expresar argumentos y análisis. ¿Cómo contrarrestar
la polarización?
A fin de cuentas, la narrativa, son las
historias que se cuentan en el sexenio. No importa si son verdad o no,
simplemente manejan percepción que es lo que guía las simpatías políticas y el
voto. La gran pregunta de la oposición
debe ser ¿Cómo contrarrestar la narrativa oficial, manejada por el mejor
comunicador y el mejor medio de comunicación disponible en México?
Un humilde punto de vista de análisis
político.