* Coatzacoalcos, el bastión que se desmorona * El mitin de los grandes vacíos * La desinflada sigue desinflada * El Chapito Guzmán olvida que en noviembre se oponía a una alianza con el PRI y PRD * Igor Rojí se arrastra ante Nahle * Vientos de traición: Vasconcelos apoya a Yunes Zorrilla y líderes cetemistas se van con Nahle
Mussio Cárdenas | 15 enero 2024
Tribuna
Libre.-
La desinflada sigue desinflada. Rocío Nahle requiere de Manuel Huerta, el que
la bautizó así. Y de Gómez Cazarín, el que la traicionó. Y de Amado Cruz
Malpica, el que operó para Ebrard. Y ni con toda la maquinaria logra prender.
Su mitin de arranque es un mitin de grandes
vacíos. Y de masas que la dejan sola. Y de acarreados que sólo van por sus 100
pesos y su torta. Y de aplausos que apenas se escuchan. Y de las formas
priistas que intenta imitar y no se le da.
Coatzacoalcos, su bastión, no la pela. Coatzacoalcos,
el municipio en que habita pero al que nada le procura, le dispensa sólo un
desaire, grupos que no se conectan, el morenismo disperso, el morenismo en
retazos, el morenismo atarantado, y empleados municipales convocados a hacer
bulto e ir a escuchar a la benemérita zacatecana que lleva por nombre Norma
Rocío Nahle García.
Había que oír eso que quiso ser discurso de
arranque de precampaña: la ingeniera que suma, no resta; la ingeniera que
multiplica, no divide; “porque las ingenieras exponenciamos”. Seguro que sí,
como la refinería en Dos Bocas donde la ingeniera le ha sumado 18 meses de
retraso y 12 mil millones de dólares de sobrecosto.
El discurso desnuda la miseria política de
Rocío Nahle. Intenta tejer un mensaje, una idea, un concepto que prenda a la
masa y a media intervención ya ni saben quién habla y por qué diablos se les
ocurrió ir.
La desinflada, políticamente hablando porque
físicamente no lo es, es la matraca que suena y suena, repitiendo lo que dice
el Supremo Peje, Andrés Manuel, que si la economía va bien, que si el gasto es
responsable, que si la austeridad republicana es un acto de fe.
Rocío Nahle es un placebo para los insomnes:
los duerme. Así despierten pronto, Nahle los vuelve a dormir. Tiene un
sonsonete soso. Tiene un timbre de voz aguado. Tiene una ausencia de chispa al
hablar.
Tuvo un escenario único, el parque
Independencia. Ahí, el que fuera foro recurrente de Cuauhtémoc Cárdenas cuando
construía la neoizquierda que devino en PRD, hoy Morena, y espacio de Andrés
Manuel López con sus trillados discursos en los que ofrecía rescatar la
petroquímica nacional y en la siguiente gira lo volvía a decir y en la
siguiente lo decía de nuevo, Rocío Nahle simplemente se perdió.
Había que ver el deplorable espectáculo del
gentío de tres, los de a pie y los que les tocó silla para comerse espacios y
así simular que más y más gente acompañó a la oriunda de Río Grande, Zacatecas,
el lugar que vio nacer a la Nahle que hoy intenta el asalto a Veracruz.
Se desgañita hablando a un público que anda
en otro canal. Se oye su perorata mientras los asistentes platican entre sí. Y
los que comen palomitas, platanitos fritos, esquites, chicharrones, cacahuate o
la torta que el enchalecado de Morena repartía porque si va a hacer un mitin
tipo PRI, pues tienen que parecerse al PRI.
Sigue hablando la “ingeniera”. Siguen las
loas al porro de la nación. Sigue el rollo de la transformación que sólo es
eslogan. Siguen las promesas de hacer de Veracruz el estado próspero, pujante,
ejemplo para los demás.
El feudo de Nahle se quiebra. Es un mitin
regional y apenas llega una veintena de morenistas de Las Choapas, de
Minatitlán, de Nanchital, de Agua Dulce, contingentes de la sierra de Soteapan
y hasta de Papantla. Y entre todos apenas entre 2 y 3 mil asistentes. Ni en los
peores tiempos del PRD.
El 2 de enero, nadie fuma a Rocío Nahle. El
morenismo acarreado, los empleados municipales obligados, mujeres y hombres,
todos la dejan sola. Se ausentan cuando el mitin apenas comienza.
Nahle, por sí sola, es un cero a la
izquierda. Sabe que su candidatura es imposible. Incumple el requisito
constitucional de ser nativa de Veracruz o hija de padre o madre veracruzanos.
Así diga que es más veracruzana que los malandros de la huaca, o más veracruzana
que la vainilla, o más veracruzana que los olmecas, lo zacatecana lo lleva
tatuado en la piel.
2 de enero. Mitin en Coatzacoalcos. El mitin
de Rocío Nahle es un catalizador de sí misma. Morena no opera. Sus operadores
no movilizan. El derroche con el erario no es efectivo. Y su discurso es la
reiteración de logros del mesías de Tepetitán que no existen.
La zacatecana es mediática, pero en política
el único activo electoral es la operación que da votos. En las redes sociales
se pavonea como la nueva descubridora de Veracruz. Pero en los hechos está
hueca. Instagram, Facebook, TikTok es ego, edición, producción. Hasta con
inteligencia artificial se suplanta la realidad, pero en política la realidad
son los votos.
Nahle se cuelga de Manuel Huerta, ex delegado
de Bienestar que tiene el mérito de haberla destrozado en la encuesta de Morena
y en las encuestas espejo que definieron a quien contenderá por el gobierno de
Veracruz. Huerta la dejó pasar para no picarle la cresta a López Obrador y así
amarró la candidatura a senador. Gane o pierda Nahle, Manuel Huerta llegará al
Senado por ser primera fórmula.
Nahle arrastra un lastre, Juan Javier Gómez
Cazarín, líder del Congreso en Veracruz, traidor nato al que conminó a
deshacerse de Enrique Navarro Padilla, alias “El Tortas”, y no lo hizo, por ser
la oreja del ex alcalde de Coatzacoalcos, Marcelo Montiel, al que debe la
diputación federal en 2015, y la alcaldía para Víctor Carranza Rosaldo, su peón
emanado de Pemex, en 2017.
Esta vez, Gómez Cazarín ya no tuvo el sitio
de honor. Lo ubicaron a un costado en el grupo de los notables en el estrado
del desangelado mitin. Se le vio fotografiarse con enemigos acérrimos como el
diputado local Magdaleno Rosales, de Medellín, el que lo exhibió en el Consejo
Nacional de Morena acusando que compraba legisladores vía depósitos en tarjeta
Saldazo para ser coordinador de la fracción parlamentaria morenista.
La osadía, en Gómez Cazarín, es atrevida. Sin
avisarle a Rocío Nahle, integró al grupo de priistas renunciantes —Anilú
Ingram, Jorge Carvallo, Fernando Kuri, Renato Alarcón— y lo ofreció a Claudia
Sheinbaum. O sea, se pasó a Nahle por el arco del triunfo.
Nahle deja en manos de Amado Cruz Malpica, a
quien hizo alcalde de Coatzacoalcos, la operación electoral. Y Amado, que le
pide permiso a un pie para levantar el otro, la arma un mitin de espacios
vacíos.
Se pueden fotografiar, pueden sonreír, pueden
alzarse el brazo, pero la ruptura es real. Nahle jugó con Sheinbaum y Amado con
el ex canciller Marcelo Ebrard.
Nahle tiene en su público al priismo de
Coatzacoalcos, al que decía combatir. Saluda al ex alcalde Joaquín Caballero
Rosiñol, se toma la selfie, sonríe, se deja cobijar. Y con Caballero acuden
Oliver Damas, su fiel escudero; Nathaly Reyna Toledo, Carlos —Potter— García,
Marisol Moreno y el resto del grupo joaquinista. Nadie se esconde. No operan en
las sombras. El mensaje es claro: operan para Morena y la zacatecana.
¿A qué le apuesta Nahle para ganar el
gobierno de Veracruz? A los parásitos del Bienestar. Le apuesta al voto de los
beneficiarios de los programas sociales, a las dádivas del gobierno federal
—Adultos Mayores, Jóvenes Construyendo el Futuro (del dictador), Becas Benito
Juárez, etc.— que el Supremo Peje retomó de lo que había inventado el PRIAN y que
antes tanto criticó.
El mitin de arranque de campaña describe que
la desinflada sigue desinflada y que la operación política volvió a fallar. Es
el mitin de los vacíos y de los que fueron sólo por cumplir.
Qué aburrida es Rocío Nahle. Apenas habla, la
gente se va.
ARCHIVO MUERTO
* Se le olvida al ‘Chapito’ Guzmán Avilés que
apenas en noviembre intentó boicotear la alianza con PRI y PRD. Desde 2021
comenzó a bloquear acuerdos; se encumbró a la presidencia del PAN con el apoyo
del gober morenista, Cuitláhuac García (https://bit.ly/3vlbPcB)
* Igor Rojí, priista reclutado por Rocío
Nahle, carga con 42 millones de pesos observados por Orfis. Fue alcalde de
Orizaba bajo el cobijo de Juan Manuel Diez; perdió la elección a diputado
federal, en 2021, ante Morena (https://bit.ly/47oKcwo)
* Vientos de traición. Vasconcelos dice que
apoya a Pepe Yunes pero los líderes cetemistas se acercan a roció Nahle 🔥
(https://bit.ly/3Htu8iF)