*La
militancia del PRI eligió como nuevo presidente del CDE a un exfuncionario de
Javier Duarte señalado de fraude y traición.
Xalapa, Ver. | 30 abril de 2018
Tribuna Libre.- Señalado de fraude y traición, vinculado a
los gobiernos de Javier Duarte y Fidel Herrera, considerados los más corruptos
de Veracruz, Marlon Ramírez Marín, virtual dirigente del Partido Revolucionario
Institucional, será el nuevo rostro del Tricolor, partido político que desde el
2016 se convirtió en la tercera fuerza electoral en Veracruz.
Al joven político lo han vinculado con todos
los grupos al interior del PRI, incluso al PAN, sin destacar algún mérito
propio para ocupar la dirigencia del partido que por 80 años administró
Veracruz, y que vive su peor declive en la vida política del Estado.
En la elección del 2010, cuando resultó
ganador Javier Duarte de Ochoa, internado en el Reclusorio Norte desde hace un
año, el tricolor sumó un total de un millón 356 mil votos; para el 2016, cuando
perdió la gubernatura, se quedó con 928 mil 249 sufragios; en el 2018 la
votación quedó en 528 mil 663 votos, es decir, en solo ocho años perdieron al
62 por ciento del electorado.
Según el corte de resultados de la elección interna, hasta las ocho de la
noche del domingo 28 de abril, después de contar 192 actas de las 223, Marlon
Ramírez contaba con 20 mil 395 votos, arriba de su más cercano competidor
Adolfo Ramírez Arana quien contaba con 6 mil 138 sufragios, en los casos de
Carlos Aceves y Damara Gómez sumaban poco más de mil votos.
A pesar de la poca participación de la
militancia, el 18 por ciento del padrón, Marlon Ramírez tiene una ventaja de
más de 14 mil votos por lo que su triunfo es irreversible, sin embargo, se
tendrá que confirmar en el cómputo final este 30 de abril.
Su
negro historial
Marlón Ramírez fue director de Política
Regional y Subsecretario de Gobierno en la administración de Fidel Herrera.
Para el periodo de Duarte, ocupó la Subsecretaría de Gobierno, y antes fue
Secretario de Fiscalización del Congreso local en la 62 legislatura.
Su función como integrante de la Cámara era
apoyar en el análisis y la fiscalización de las cuentas de recaudación y
distribución de ingresos de los ayuntamientos del Estado, así lo marca el
reglamento del Poder Legislativo.
Es decir, tenía que apoyar en la revisión del
manejo de los recursos públicos de los 212 municipios del Estado de Veracruz en
el periodo 2010-2013, sin embargo, no cumplió al 100 por ciento su función.
En ese trienio, el Órgano de Fiscalización
Superior (Orfis) presentó un total de 41 denuncia penales contra igual número
de municipios por el desvió de más de 417 millones 777 mil pesos.
En el año 2014, cuando ya operaba como
Subsecretario de Gobierno en el Estado, fue acusado de cometer fraude contra
habitantes del predio Paso de Vergara Tarimoya, conocido como la Reserva 4.
Mauro Pitalúa Alemán, denunció ante los
medios de comunicación que el entonces funcionario de la dirección de Política
Regional (2004-2010) se hizo de tierras ejidales a base de engaños en
contubernio con su padre, el abogado Pedro Ramírez Casas y líderes vecinales
militantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El afectado, contó a los medios, que buscó el
apoyo del abogado Pedro Ramírez Casas, para regularizar sus predios. A cambio
del proceso legal, el padre de Ramírez pidió el 50 por ciento de las tierras,
porque no poseía recursos para pagar los servicios profesionales.
“Tenemos una minuta y no me la quieren
reconocer, aquí están las firmas y donde se ve que nosotros vamos a darles las
tierras cuando ellos nos entreguen los 14 lotes, en el 2010.
“Se ve la firma de Marlon que en ese tiempo
era Director General de Política Regional y la de su papá (…) somos como 50
familias que estamos igual, algunos cedieron menos del 50 por ciento, pero pues
son muchas tierras, del terreno que me están quitando a mí son 5 mil metros
cuadrados, pero hay quienes tienen más”, declaró a los medios.
Para julio del 2015, el área de comunicación
social informó que por instrucciones del gobernador Javier Duarte de Ochoa, el
secretario de Gobierno, Gerardo Buganza Salmerón, tomó protesta de ley a Genaro
Mejía de la Merced, exdiputado federal por Tantoyuca, como subsecretario de
Gobierno.
El encargado de la política interna del
estado, Gerardo Buganza, pidió al nuevo servidor público redoblar el esfuerzo y
trabajo en su encomienda que demanda compromiso con los veracruzanos, a quienes
debe servir con lealtad y responsabilidad.
Versiones periodísticas confirmaron que su
salida se atribuyó a su mala operación política en la elección del 2014, cuando
Anilú Ingram Vallines, actual diputada federal, perdió la alcaldía de Veracruz.
En calidad de operador de la zona, no logró
los votos suficientes para arrebatar el puerto de Veracruz al clan Yunes
Linares, con quien hoy se le vincula, al afirmar que su campaña fue financiada
por los panistas.
A su paso por la Segob se denunció que Marlon
Ramírez era el responsable de administrar los grupos de choque y utilizarlos
según conviniera a la administración en turno. Para ello tenía a su disposición
el dinero de la partida «para expresiones sociales», que era dinero en efectivo
de la Secretaría de Gobierno que se usaba con discrecionalidad.
Ya como regidor, sus declaraciones a los
medios han sido limitadas a pesar de ser de oposición; se buscó en la página
del municipio el trabajo al interior del Cabildo, pero no hay grabaciones de
las sesiones, ni las actas de las reuniones.
Su inclusión en la planilla de Fidel Kuri
Grajales, en la elección del 2018, generó manifestaciones y el reclamo de los
militantes.
“No puede ser posible que la dirigencia del
partido no sé de cuenta que nadie quiere saber nada de los funcionarios del
sexenio pasado, quieren seguir por el mismo camino y eso les costará la
presidencia municipal porque muchos de nosotros no vamos a votar por él, es más
ni siquiera vamos a participar”, reprochó ante los medios Carlos Guerrero.