Ciudad de México. | 21 septiembre de 2018
Tribuna Libre.- El presidente electo, Andrés Manuel López
Obrador, afirmó que, si bien la elección para gobernador en Puebla ya está
“manchada”, es “un paso adelante” la decisión del Tribunal Electoral del Poder
Judicial de la Federación de ordenar el recuento de votos, y prometió respetar
el fallo final de ese órgano electoral.
Entrevistado en una sala de abordar del
Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, previo a su viaje a Tijuana,
Baja California, López Obrador afirmó que mientras no haya una definición en
este caso, no acudirá a Puebla, porque no sabría con quién reunirse: si con la
panista Martha Érika Alonso o con Miguel Barbosa.
“Sí, es un avance sin duda, sin duda, pero no
hay que hacer a un lado el hecho de que ya es una elección manchada, sobre todo
por la compra del voto. Pero yo ya no me puedo meter mucho en estos asuntos;
por encima de todo está la democracia, y por eso todavía como presidente electo
puedo opinar. Todavía no soy presidente en funciones, constitucional, entonces
yo creo que se debe acabar para siempre en México la compra del voto, la
utilización del dinero del presupuesto para beneficiar a candidatos y partidos;
que no debe de haber injerencia de políticos, de funcionarios en las
elecciones; que las elecciones tienen que ser limpias y libres; que no tiene
que apoyarse a ningún familiar, que no debe de haber nepotismo.
“Entonces, no deja de ser un paso adelante el
que se esté aceptando el recuento de los votos, pero hay que ver cómo fue que
llegaron esos votos: si fueron votos libres, o fueron votos comprados con mucho
dinero que se utilizó en las elecciones en Puebla.
“Es muy raro, rarísimo, que ganen los presidentes
municipales, diputados locales, diputados federales, los senadores, que gane el
presidente de la República, pero no gana el gobernador, lleva esto mensaje; es
muy sospechoso, es atípico completamente; de todas formas, yo voy a acatar el
fallo del Tribunal, pero tenía que decir todas estas cosas”, comentó.
Asimismo, puntualizó que lo que ha dañado
mucho el país ha sido el fraude electoral, la antidemocracia, por lo que el
fraude electoral de 2006 donde se impuso al presidente desató la violencia.
Mencionó que en una democracia es el pueblo
el que manda y reiteró que a los tres años de su mandato se hará una elección,
una consulta “si la gente dice que yo continúa, voy a continuar, si la gente
dice para afuera el presidente, para afuera, porque el pueblo pone y el pueblo
quita”.