Tribuna Libre.- La Arquidiócesis de México criticó que las
precampañas se estén realizando “sin propuestas viables”, con mensajes “vacíos,
sentimentalistas, con cantaletas fofas y huecas”, además del alto costo que
tienen.
En el editorial Desde la Fe, afirmó que éstas
son una “curiosa ficción legal” en la que todos los ciudadanos son
“bombardeados” con spots, a pesar de que son mensajes que deberían ser
“exclusivamente” dirigidos a los militantes de los partidos.
Recordó que las precampañas “fueron
determinadas para que los partidos políticos hicieran una elección ponderada de
entre los múltiples candidatos” y “para que la militancia eligiera en condiciones
reales de competitividad para lanzar a hombres y mujeres más idóneos a la
campaña”.
Pero ello no ha ocurrido por ejemplo en la
precampaña por la Presidencia, pues los principales partidos ya tienen
definidos a sus candidatos.
Por lo anterior, la Arquidiócesis consideró
que “la ciudadanía es bombardeada y se le hace tragar mensajes contra su
voluntad, porque no hay diferencias entre precampañas y campañas, cuando los
precandidatos únicos son entronizados sin menor competencia, como en el caso para
obtener la Presidencia de la República”.
A los millones de spots los calificó como una
“plaga que rezumbará e impactará en la ciudadanía”.
“No sólo se trata de la ocupación del espacio
radioeléctrico con motivos electorales, además hay dispendio de recursos
económicos que se suman al de las campañas a iniciar en marzo próximo. Para la
Presidencia de la República, el tope máximo de gastos de precampaña será de 67
millones 222 mil 417 pesos; en el caso de las campañas será de 429 millones 633
mil 325 pesos. Para conseguir una curul en la Cámara de Diputados, el tope
máximo de gastos de precampaña será de 252 mil 008 pesos, y para la etapa de
campaña de 1 millón 432 mil 111 pesos hipotéticamente”, expuso.
Agregó que “el remedio de la Reforma
Electoral fue más caro que la enfermedad que afectaba a la democracia”.
Al señalar que se trata de una “simulación”,
apuntó que “abiertamente estamos en un periodo de campaña electoral con toda
desfachatez, usando recursos que no deberían usarse para tales objetivos”.