Xalapa, Ver. | 06 Julio de 2017
Samuel
Aguirre Ochoa
Tribuna Libre.- Recientemente el delegado de la SAGARPA en el
estado, el Ing. Octavio Legarreta, hombre enterado de lo que dice, declaró: “A
pesar de su potencial agropecuario, la mitad de la población del campo de
Veracruz se encuentra en pobreza extrema o pobreza de hambre, no tiene los
recursos indispensables para su sobrevivencia”. Agrego a esta declaración dos
datos duros, tomados de la CONAPO: Veracruz ocupa el 4º lugar en marginación y
casi el 50% de la población ocupada percibe menos de dos salarios mínimos. Una
desgracia para el campesinado y para los veracruzanos en general.
Y en este contexto, los productores de maíz,
frijol, papa, haba, limón, por mencionar algunos, del Norte, Centro y Sur de la
entidad, recién entrado el actual gobierno, acudieron a la SEDARPA a solicitar
apoyo elemental y mínimo para hacer producir el campo y, con ello, generar
ingresos sanos para los campesinos, me refiero al apoyo para subsidiar semilla
de maíz y fertilizantes, cuyos precios están por la nubes (es de agregar que
dicho apoyo se ha conseguido en los últimos 14 años por los anteriores
gobiernos, no sin marchas y plantones) y hoy, a unos cuantos días de que
termine el período de la siembra de maíz del ciclo primavera-verano no han
obtenido ni una bolsa de maíz ni un bulto de fertilizante subsidiados.
Creo necesario aclarar dos cosas, para el no
enterado: primera, no se trata de pedir las cosas regaladas, el subsidio del
que hablo equivale a un 16% del costo del paquete tecnológico en la producción
del maíz; segunda, estos subsidios son realmente una inversión productiva, pues
han traído como consecuencia una mayor productividad y, por tanto, mayor
producción en varias zonas del estado.
En el terreno deportivo, el Movimiento Antorchista
gestionó, también hace 14 años, ante el Instituto Veracruzano del Deporte
(IVD), la fundación de 13 centros de Iniciación Deportiva en zonas campesinas y
populares. El gobierno apoyaba pagando la beca de un entrenador y de vez en
cuando con algunos materiales deportivos. Estos centros de iniciación deportiva
se convirtieron en verdaderos semilleros de deportistas en las disciplinas de
voleibol, basquetbol, futbol, atletismo y beisbol. Permitieron hacer realidad
el hecho de que “EL DEPORTE ES UN DERECHO PARA TODOS”, pues en ellos se
concentran miles de jóvenes de escasos recursos económicos a entrenar alguna
disciplina deportiva. Todos sabemos la importancia del deporte en la formación
de un hombre sano física y mentalmente, por lo que no creo necesario abundar en
el tema.
Sin embargo, a partir de que llegó al IVD,
María de los Ángeles Ortiz, no ha otorgado ninguna de las 13 becas que se
venían pagando a los respectivos entrenadores en los municipios de Córdoba,
Veracruz, Tierra Blanca y Xalapa, dejando en el abandono a los deportistas que
están inscritos en dichos centros de iniciación deportiva, quienes se mantienen
activos, practicando sistemáticamente, pero sin ningún apoyo del gobierno
estatal. La directora del IVD argumenta que el anterior responsable de este
instituto no dejó información alguna sobre los mismos. Cosa que es totalmente
falsa, pues se ha demostrado a la responsable del IVD, lo contrario. Ahí están
los deportistas organizados en clubes y ligas, están los entrenadores, quienes
han estado participando en eventos estatales y nacionales, representando
dignamente a Veracruz en este terreno.
Si no hay apoyo para el campo y para el
deporte, que futuro puede esperarse para los campesinos y los jóvenes: para
desgracia, que los primeros disminuyan la productividad y salgan del mercado,
pasando a engrosar las filas de los desempleados, y los segundos, se conviertan
en víctimas de la obesidad y de los problemas que esta conlleva, así como de
las tentaciones a que son sometidos por las bandas delincuenciales. Ese no es
el Veracruz que ofreció en su campaña el gobernador del estado, Miguel Ángel
Yunes Linares. Ojalá y remedie las cosas, aún estamos a tiempo.