A
propósito del verdadero reto y perspectiva de la UPAV
Lenin
Torres Antonio | 04 agosto de 2018
Tribuna Libre.- Es cosa normal en la política en México el
fenómeno de los tránsfugas, aquellos que sin tapujo brinca de un partido a otro
buscando proteger sus intereses personales y oportunidades políticas para su
“carrera política”, y el partido que los acoge los hacen regularmente con el
fin de engrosar sus filas de los “factores y grupos de opinión”, los aceptan con
una pasmosa y descarada normalidad, las pasadas elecciones ocurrió el fenómeno
de los tránsfugas en proporciones monumentales, vimos como las mareas de
tránsfugas aseguraban la llegada al poder del Movimiento de Regeneración
Nacional encabezada por Andrés Manuel López Obrador. Incluso algunos analistas
señalan que no hubiera podido AMLO llegara la presidencia, aun con el
descontento y el hartazgo popular, sin la ayuda de esos tránsfugas, quienes se
encargaron a lo largo y ancho de la república mexicana de movilizar a sus
huestes con el objetivo de hacer presidente a AMLO.
Hoy vemos como esos señalamientos no son
fortuitos, vemos como el grupo zedillistas, algunos le denominan la “izquierda
priistas”, ocuparan puesto relevantes en el gobierno de la república que
encabezará AMLO, por la sencilla razón que serán los que consoliden el nuevo
status quo y diseñen la nueva clase política venida redentora de las causas
populares, quizás por eso detectamos a la próxima Secretaría de Gobernación, la
ex magistrada Olga Sánchez Cordero, al próximo Secretario de Educación Esteban
Moctezuma, y en la Dirección de la Comisión Federal de Electricidad al
innombrable Manuel Bartlett, como expriistas y zedillistas; quien en un simple
análisis aceptaría una razón contundente de juicio ver normal que parte del
PRIAN, de los denostados por AMLO, serían sus aliados, y compartirían la tarea
de gobernar para la “cuarta transformación social de México”, pero el éxtasis,
el bacanal orgiástico del pueblo mexicano de sentir que las cosas cambiaran al
fin de cuenta, no le permiten ver las contradicciones de fondo; y el perdón y
el bautizo a los causantes de la crisis social que vive México se dan de facto,
como la anulación del matrimonio por la Iglesia de la primera dama de México,
mejor conocida como “la gaviota”.
Nada sucede al azar, la generación espontánea
es una imposibilidad en política, el equilibrio es necesario para el poder
dominante, es decir, los grandes
intereses geopolíticos no permiten los cambios sociales sin su consentimiento y
dirección, y si hay que incubar enfermedades mortales, y si hay que hacer
revolucionarios de papel a los grupos locales de los países estratégicos, y
México es uno de ellos, se harán, por lo que no es una casualidad los
movimientos estratégicos políticos en las pasadas elecciones: el contubernio de
los ex acérrimos enemigos, los medios de comunicación, con AMLO; el silencio y
al final la aceptación de la Iniciativa Privada al triunfo de MORENA, y el
apoyo discreto en algunos casos y en otros descarados del PRI a AMLO. No fue gratuito que el aparato de poder del
Estado Mexicano se encargara de desgastar y debilitar al único que podría hacer
frente a AMLO, Ricardo Anaya, y no por lo que significará como político el
canallin de Anaya, un imberbe en política, sino de los dos candidatos del
PRI-AN era el menos desgastado, además viéramos a connotados panistas compartir
simpatía y acción política con AMLO o Meade, y en ningún momento los iguales se
juntaron, al contrario se separaron y con ellos diluyeron la posibilidad de
competir contra AMLO, como le hicieron en la asunción del ex presidente Felipe
Calderón, por lo que la decisión ya estaba tomada, AMLO sería presidente, y
estaba tomada no por el pueblo mexicano sino por el poder dominante mundial. México
no podría aguantar con el sistema político actual y podría traer graves
problemas para el Reino de los blancos, así que había que hacer una transición
pacífica, y se hizo.
La caídas de las ideologías, no significaba
que el verdadero poder tendría que asumir otros rostros, se descaro y se ha
presentado tal cual es, ahora vemos como las felicitaciones por doquier le
llegan a AMLO, el imperio americano, el gobierno de Trump ya vino a ponerse de
acuerdo cómo mantener el sistema neoliberal perverso, el embajador de China a
ponerse a disposición del nuevo poder, siempre y cuando le permita continuar
llenando el mercado de baratijas, que llegan a manufacturar hasta el sombrero
de charro mexicano, y así el relevo se está dando aun antes de tomar posesión
AMLO de la presidencia. La “transición democrática” nos pone en un nueva ruta
de la esperanza y el optimismo, ahora sí que nos convertirnos en país del
primer mundo. No importa que no haya identidad ni originalidad, el beneplácito
y la patada de buen augurio está dada.
Desde lo local, en Veracruz, también vemos
esas contradicciones, en Veracruz más de 300 mil votos del priismo emigró a
MORENA, y le aseguró un triunfo holgado, el otrora partido dominante tan sólo
alcanzó por la vía plurinominal tres diputados en el Congreso Local, ni rastro
quedó de la perfecta maquinaria de la simulación y el engaño, pero si bien el
PRI se desintegró como partido, eso no significa que los priistas, como buenos
expertos en la sobrevivencia y le transfuguismo se hayan desintegrado, están
ahí omnipresente en el triunfo morenistas en Veracruz, y estarán de alguna
manera en su gobierno, aquí el enemigo que los unió fue el gobernador actual y
no dudaron en usar todos los medios para quitarlo de en medio, incluso
destruyendo a su propio Partido.
Pero los ejemplos son innumerables, uno antes
otros después emigran a Morena y al poder en turno, así podemos ver cómo sin
tapujo ni pudor, la transfuguista diputada Local Cinthia Lobato (antes del
Partido Movimiento Ciudadano, después Panista, y ahora Morenista) junto a un
grupo de expriistas pepistas yunistas (también venidos a Morenistas tardíos)
asumen reivindicaciones que nunca les importaron, ni lucharon sobre el Tema de
la Universidad Popular Autónoma de Veracruz, y lanzan una convocatoria para
discutir el tema de la UPAV. Es innegable que detrás de ese discurso
reivindicador está la búsqueda del simple poder, una especie de legitimación
para sus aspiraciones der asumir el control de la UPAV, el poder de la UPAV
pareciendo lo que nunca han sido, reivindicadores de la defensa de una
maltratado proyecto de educación de los veracruzanos que es la Universidad
Popular Autónoma de Veracruz, que su desgracia ha venido de haberse construido
como un espacio de poder del gobierno priista en turno, construida sin una
legislación completa que no contempla ni siquiera el tiempo que durará al cargo
el rector, que deja su designación a expensa de la voluntad del gobernador en
turno, convertido la UPAV en un “botín político” para propio y extraños, por lo
que no hay Foro que valga, “La UPAV su análisis, retos y perspectivas”, sino es
una profunda Reforma de la Ley 276 que la crea la UPAV y se legisle por la
Plena Autonomía Universitaria y Financiera de la UPAV, los Derechos Laborales
de sus más de 3000 docentes que ahora tienen el estatus de “solidarios”, una
trampa de la actual ley para evitar derechos laborales y representaciones
sindicales, y la Elección Democrática del Rector por la propia comunidad
Universitaria de la UPAV y no una designación del gobernante en turno, y una
Profunda Reforma Académica que fortalezca y conserve el Modelo Educativo
Popular Vasconcelista, y se complete la normalización de la funcionalidad de la
UPAV como cualquier Universidad Pública, sumando a la Docencia, la
Investigación y la Extensión Social. Esta convocatoria al “Foro” por la
tránsfuga Cinthia Lobato y sus esbirros expriistas, deja ver la displicencia
del gobernante electo en turno al grave tema del rezago educativo en Veracruz,
su ligereza al aceptar el transfuguismo con normalidad incoherente a su prédica
de transparencia y democracia que le exige su líder Andrés Manuel López
Obrador, la avaricia y ambición desmedida de sus organizadores por crear las
condiciones para contar con el beneplácito del gobernador electo y hacerse con
el “botín político” que ha significado la Universidad Popular Autónoma de
Veracruz .
Queda pues ver los tiempos de la decencia y
la coherencia democrática.
Agosto de 2018