Tribuna Libre.- El exgobernador priista y el empresario
textilero son señalados de tortura en contra de la periodista Lydia Cacho, en
2005. También se ordena el arresto de exfuncionarios y de otras personas.
CIUDAD DE MÉXICO .- Un tribunal unitario
emitió órdenes de aprehensión contra el exgobernador priista de Puebla Mario
Marín y el empresario textilero Kamel Nacif Borge, señalados del delito de
tortura contra la periodista Lydia Cacho.
El 11 de abril, la titular del Primer
Tribunal Unitario de Cancún, Quintana Roo, María Elena Suárez Préstamo, también
ordenó la captura de Hugo Adolfo Karam Beltrán, exjefe de la Policía Judicial
de Puebla, y de Juan Sánchez Moreno, exdirector de Mandamientos Judiciales del
estado, así como de otras personas.
Para librar las órdenes de arresto, la
magistrada revocó la decisión del Juzgado Segundo de Distrito en Quintana Roo,
a cargo de Gerardo Vázquez Morales, quien en noviembre negó proceder contra los
implicados.
Ahora, la Fiscalía General de la República
(FGR) deberá iniciar la búsqueda de estas personas.
Por tratarse de un delito grave, ningún
involucrado podrá suspender la orden de aprehensión con un amparo ni tendrá
derecho a libertad provisional.
Mario Marín. El priista entregó el poder en
2011 al panista Rafael Moreno Valle. Desde entonces, se ha mantenido alejado de
actos públicos. Apenas este año, participó en actividades del nuevo candidato a
gobernador del PRI, Alberto Jiménez Merino, de quien es cercano.
Estas órdenes se giran a 13 años de que Cacho
fuera detenida arbitrariamente en Cancún, Quintana Roo, por la policía de
Puebla. Entonces se le acusaba de difamar y calumniar al empresario Nacif en su
libro Los demonios del edén, en el que documentó la operación de una red de
pederastia.
La periodista fue víctima de tortura por
parte de los policías que la trasladaron vía terrestre al estado de Puebla. Así
lo acreditó la propia ONU, por lo que el Estado mexicano ofreció a Cacho
disculpas públicas en enero pasado.
Tras la detención arbitraria de Cacho en 2005,
se relevó una conversación telefónica entre Nacif y Marín en la que ambos
hablaban de actuar contra Cacho por sus investigaciones periodísticas. Desde
entonces, Marín es conocido como “gober precioso”, por la forma en la que Nacif
se refería a él.
La versión sobre la orden de aprehensión
contra estos hombres comenzó a circular desde el fin de semana, luego de que el
columnista poblano Mario Alberto Mejía la difundió.
Apenas este lunes, el PRI de Puebla rechazó
que el exgobernador sea responsable del delito que se le atribuye y alegó que
los señalamientos son un intento por perjudicar a su candidato al gobierno
poblano, Alberto Jiménez Merino.