*La
violencia que ya no queremos los veracruzanos
*El
campo: ¿Producir alimentos o votos?
Tribuna Libre.- El caso de la familia de México estadounidenses
que fue presuntamente agredida por policías del estado, se volvió paradigmática
en varios sentidos:
1. La
reacción social fue más que nada en contra de una policía agresora de la
ciudadanía. Es una muestra del hartazgo contra una fuerza que se siente enemiga
de la sociedad, más que protectora
2. La
percepción de inseguridad en Veracruz sigue siendo muy alta
Pero además es un caso que puede generar un
conflicto internacional si no se resuelve a plenitud y se esclarece que pasó
ahí.
En lo político Jorge Winckler (quien sigue
siendo el Fiscal del estado porque no lo han podido remover) tomó el caso muy a
su favor, diciendo que hay presunción de actos ilícitos por parte de los
policías y que recibió una comunicación del gobierno de Estados Unidos (no
aclara si es de la embajada, del Departamento de Estado o de quien) para que
prácticamente proteja a la familia de estadounidenses de origen mexicano que
fueron agredidos, presuntamente, por la policía estatal.
La presunción de que se agredió a ésta
familia, se da porque no está comprobado legalmente el hecho.
Pero todos los indicios marcan que así fue. Y
el más fuerte de estos es el video que la familia difundió donde los policías
sacan a las personas de la vivienda y luego la acusación pública de que
llamaron a sus familiares en los Estados Unidos para pedirles dinero por su
liberación.
El secretario de Gobierno, Eric Cisneros
Burgos, acusó un uso político por parte del fiscal Winckler y los diputados del
PAN, que enviaron cartas a la embajada de Estados Unidos en contra de la acción
de los policías del estado.
Y es cierto, Winckler y el PAN han
aprovechado muy bien este caso para llevar agua a su molino.
En contrario Eric Cisneros y el secretario de
Seguridad Pública, Hugo Gutiérrez Maldonado, en lugar de tomar el sentir de la
población, hicieron una defensa a ultranza de la versión que dieron los
policías estatales de que habían hecho la detención en una carretera, contraria
al video que mostró la familia de que esto ocurrió en la casa en la que se
encontraban y después de un amplísimo operativo con varias patrullas de la
policía estatal.
¿A poco no les pasaron ese reporte a Eric
Cisneros y a Hugo Gutiérrez?.
Eric Cisneros insiste en señalar a los
estadounidenses, tanto que hasta acusa de malinchismo a Winckler:
“Hoy estamos a 500 años de la irrupción
española, aquí donde estamos parados en el puerto de Veracruz, en ese tiempo
hubo una malinche, siempre privilegiaba a los extranjeros, y no es que no
tengan derechos, pero yo preguntaría, en una reacción tan rápida beneficiando a
alguien, ¿así de pronta es la justicia que ha procurado para los indígenas y
los veracruzanos”.
¿Acaso tampoco le informaron que los
involucrados son de origen mexicano?.
¿No ha visto la declaración que dio el
gobernador Cuitláhuac García sobre el caso?.
¿No leyó lo que el delegado de la
Presidencia, Manuel Huerta, dijo?.
Ambos hablaron de que el caso se investiga.
Ninguno incurrió en su apresuramiento de culpar a los agredidos, presuntamente.
Incluso el gobernador afirmó que en su
gobierno no se van a permitir excesos y reconoció que a la familia detenida se
le trató con violencia.
Manuel Huerta, por su lado apuntó: No habrá
impunidad. Se va a investigar con mucha profundidad esta situación. Que sea la
última vez que esto ocurra. Tendrán que tomarse todas las medidas necesarias
para que las fuerzas policiales de donde fueran no tengan ese tipo de acciones.
En Veracruz la violencia, la delincuencia,
siguen estando muy vigentes. Cualquier día se puede hacer un recuento de
muertes violentas en el estado.
Es más la inseguridad es tan grave que en
Veracruz se mantienen los grupos de autodefensa. El gobernador lo reconoció en
el evento por el 104 aniversario de que se promulgó la Ley Agraria.
Están en 30 municipios, advirtió previamente
el presidente de la Asociación Nacional de Consejos de Participación Cívica de
la República Mexicana, Arturo Mattiello Canales.
Hoy Jorge Winckler saca los datos de la
violencia en diciembre: 138 homicidios, de los cuáles 19 son feminicidios, y 38
secuestros.
En noviembre fueron 134 homicidios
Cierto, hay un descenso con respecto a los
primeros 10 meses del año, pero siguen siendo muchos… muchos.
¿O Hugo Gutiérrez dirá que estos números son
por los “malos periodistas”?.
Tal vez ya no habrá subregistro de la
violencia.
¿Cómo quedarán ahora las estadísticas de la
impunidad delincuencial en Veracruz?.
Eric Cisneros prometió que para Navidad o Día
de Reyes Winckler estaría fuera.
Pero ahí sigue, no lo pudo sacar.
La violencia, la delincuencia, es algo que
preocupa a todos los terrenales. Es algo por lo que tienen que velar los nuevos
grandes místicos del estado.
¿O acaso Hugo Gutiérrez y Eric Cisneros
tienen más interés en defender las acciones ilícitas (presuntamente) de la
policía estatal?.
EL CAMPO: ¿PRODUCIR ALIMENTOS O VOTOS?. Hubo
dos actos para conmemorar el aniversario de la Ley Agraria. En los dos hubo
política.
Por un lado el gobernador Cuitláhuac García
Jiménez convocó a “todas las organizaciones campesinas” … “para que nos vayamos
poniendo de acuerdo sobre cómo no sólo restituir el derecho legítimo de la
tierra al campesino que la trabaja y la hace producir, sino también de elevar
la productividad del campo”, concluyó.
Incluso ofreció que cada producto que la
administración pública apoye tendrá mercado garantizado.
Ahí mencionó que se implementarán “mil
hectáreas” para la producción de palma de coco y que se hará un programa de
conversión de cultivos de caña de azúcar en otras alternativas, como la
producción de arroz, para establecer un
precio de garantía que genere una ganancia superior a la que actualmente se
obtiene por cada hectárea.
El otro fue el evento que organizó , Juan
Carlos Molina, dirigente de la CNC en el estado, que tuvo a casi 10 mil
campesinos y a un montón de políticos, entre ellos el titular de la Secretaría
de Agricultura y Desarrollo Rural del gobierno de México, Víctor Villalobos
Arámbula; la lideresa nacional del PRI, Claudia Ruiz Massieu; el senador Miguel
Ángel Osorio Chong; el líder nacional de la CNC, diputado federal Ismael
Hernández Deras; líderes sociales, alcaldes y diputados locales y federales de
todos los partidos políticos –PRI, Morena, MC, PVEM, PAN y PES-.
Molina Palacios coincidió con Cuitláhuac
García en que “sólo así, en unidad, olvidándose de siglas partidistas, el campo
mexicano podrá resurgir para convertirse en el pilar económico del país en
beneficio de las clases más necesitadas”.
A ese, su magno evento de Juan Carlos Molina,
también asistieron los ex dirigentes nacionales de la CNC, Beatriz Paredes
Rangel y Manuel Cota Jiménez; José Narro, presidente de la comisión de
Agricultura del Senado; Anilú Ingram Vallines, diputada federal por Veracruz;
Eduardo Cadena Rincón, secretario de Agricultura del gobierno estatal, así como
Rosa María Hernández Espejo, subdelegada del gobierno federal en el estado,
además de los alcaldes panistas de la conurbación Veracruz-Boca del Río,
Fernando Yunes Márquez y Humberto Alonso Morelli, respectivamente.