Zongolica, Ver. | 17 Diciembre de 2014
Tribuna Libre.- Sobre la noticia
publicada hace unas semanas en este medio, de los abusos de tipo sexual a
menores de edad en el municipio de Mixtla de Altamirano, sorprende que hasta
ahora se le dé la importancia debida, ya que estas aberraciones no son nada
nuevas en las comunidades indígenas de la sierra, esto viene sucediendo desde
hace muchos años, no solo en Mixtla, también en Tehuipango y Zongolica, siendo
municipios donde se conoce que regularmente las niñas son abusadas por hombres
mucho mayores de edad, muchas de las veces por familiares cercanos también,
declaro la Lic. Celfa Méndez Hernández; presidenta de la Asociación Civil
Mujeres de la Sierra.
Ante esta severa
situación, la abogada comentó que; “es gravemente preocupante, que como
asociación han tenido que intervenir apoyando a las madres de las pequeñas
víctimas para que denuncien”, -menciona y agrega- “hay casos tan relevantes por lo alarmante,
donde criaturas de entre 4 y 7 años de edad han sido violados por un mismo
hombre, quien tiene una tienda y recursos económicos, que con engaños atrae a
menores tanto niñas como a niños, para abusarlos, posteriormente mediante
amenazas, trenza temores en las familias, para que estas no se atrevan a
denunciarlo”.
Ante esto, ya se han
hecho las primeras denuncias ante la agencia del ministerio público
especializado, “se espera se realicen investigaciones pertinentes a fondo, pues
hay varios casos donde apuntan a este individuo, a quien han señalado madres de
familia, como el sujeto que ha venido abusando de manera recurrente de las y
los menores en esta comunidad”, pero no da mayores detalles para no dar pie a
que escape, y se realicen las investigaciones de manera debida, para que pague
sus atrocidades contra inocentes.
Hasta ahora, se
sabe que han sido violados por esta persona dos niñas y dos niños, pero, para
no entorpecer y dar pie para que se dé a la fuga, este medio no dio el nombre
de la comunidad proporcionado por la presidenta de la Asociación-civil; sobre
este problema, hay pocas denuncias en la sierra por el temor a los
señalamientos del menor o por miedo y traumatismo causado a las familias,
además que no tienen confianza en los organismos encargados de la impartición
de justicia, ya que quien comete estos delitos, "quien viola",
regularmente es el más fuerte, poderoso o líder de alguna comunidad, a través
de amenazas somete la voluntad de las personas para que no lo denuncien.
Estos casos están
registrados dentro de la propia Asociación, donde se cuenta con una Psicóloga,
es el miedo que inculca quien incurre en las transgresiones de estupro, por lo
que no llegan al grado de denunciarlo, por lo que se le hace un llamado urgente
a las propias Autoridades Locales, del Gobierno del Estado y Federales
para que atiendan este fenómeno en Zongolica, que lejos de disminuir, va en
aumento, esto es en verdad un foco rojo, preciso Celfa Méndez, y para tratar
esta enfermedad social, tiene que haber iniciativas para que a través de las
mismas escuelas se generen platicas y programas de monitoreo para detectar,
ayudar, y sancionar este problema, se les dé en los grados de primaria
educación sexual con fines informativos y preventivos, para que conozcan sus
derechos los niños indígenas.
Los maestros
pueden ser pieza fundamental, al interactuar de manera educacional en los temas
de educación sexual a los menores, generar esa confianza para que los niños se
les acerquen, es el mismo profesor o profesora que puede hacerla de psicólogo,
generando una conducción donde el menor pueda intercomunicarse bien con su
mentor, enseñarles durante su formación el respeto que deben tener y tenerse
para con las demás personas, pues existe que en las comunidades lo más cercano
es una escuela, ya que ni los hospitales dan buena atención, hay una solución
viable a través de la educación, finalizó.